El Volkswagen Arteon es una berlina de línea más deportiva que clásica, en especial la versión con carrocería familiar o Shooting Brake. Sus asientos están colocados cerca del suelo, una posición que para algunas personas puede resultar incómoda cada vez que hay que subir y bajar del coche. Es parecido a lo que ocurre, por ejemplo, en un BMW Serie 3.
El aspecto del interior es relativamente tradicional, lejos del diseño minimalista que empieza a imperar entre los coches actuales. No por ello es un coche «antiguo»: la instrumentación se muestra en una pantalla, el sistema multimedia tiene otra táctil y hay mandos táctiles (los del climatizador), además de los físicos tradicionales (el conmutador de las luces o los que hay en la consola) y otros que funcionan de las dos maneras, al tacto y bajo presión (los del volante).
En la instrumentación se muestra mucha información y se da bastante libertad al usuario a la hora de cómo mostrarla y qué ver y qué no; en ella se puede visualizar también el mapa del navegador. El sistema multimedia no ha dado problemas durante la prueba, salvo en una ocasión que tardó en estar operativo durante medio minuto. Su manejo es sencillo, con menús claros y bien ordenados. Se puede conectar, con cable o de manera inalámbrica, un móvil y utilizar algunas aplicaciones directamente en la pantalla del coche.
Los ajustes y terminaciones son los habituales en los coches de combustión de Volkswagen, precisos y cuidados. La parte superior del salpicadero y de las puertas es de plástico blando, con un relieve que simula al del cuero, pespuntes falsos incluidos. También es de material gomoso la pieza de la consola contra la que apoya la rodilla interior (lo cual es de agradecer). La guantera, las bolsas de las cuatro puertas y el cajón de la consola están tapizados para evitar ruidos. En las puertas, el salpicadero y la consola hay piezas negro piano en las que el polvo y las huellas llaman rápidamente la atención.
El habitáculo es espacioso, tanto delante como detrás. En ambas filas caben ocupantes de metro noventa de estatura, incluso con la opción del techo de cristal. La cota más generosa es la del espacio para las piernas, que es de 80 cm en las plazas traseras. En un BMW Serie 3 Touring hay 76 cm, en un Audi A4 Avant, 72 cm y en un Mercedes-Benz CLA Shooting Brake, 69 cm.
La versión que hemos probado tenía el nivel de equipamiento R Line con la opción Paquete de cuero Nappa/Carbon Style que incluye unos asientos delanteros deportivos que tienen el respaldo y el reposacabezas en una sola pieza. Este no ofrece posibilidad de ajuste, pero al menos en mi caso (mido 1,93 m) no ha supuesto ningún inconveniente porque me quedaba bien situado. El asiento quizás no es tan acogedor como otros que son más blandos en trayectos cortos, pero me ha parecido especialmente cómodo para trayectos largos.
Los asientos delanteros tienen ajustes eléctricos (salvo para alargar la banqueta, que se hace de manera manual), calefacción y masaje. Esta última función no es tan elaborada como otros coches en el que hay varias cámaras neumáticas que ejercen presión en espalda y glúteos, el del Arteon es del tipo básico en el que el apoyo lumbar sube y baja a la par que aumenta y disminuye la presión que hace sobre la espalda.
Detrás hay un túnel central que ya indica que este tampoco es el coche idóneo para que viajen tres adultos en la segunda fila de asientos. Si viajan dos, lo harán cómodos por la cantidad de espacio que hay. Como ocurre con las plazas delanteras, las traseras están cerca del suelo y, además de lo incómodo que podrá ser el acceso para algunos adultos, tampoco ayuda a la hora que colocar un bebé en una sillita, porque hay que agacharse mucho para introducirlo.
El maletero es profundo y ancho, de 563 litros de capacidad en la berlina y de 565 litros en el Shooting Brake (con los asientos abatidos el volumen de carga crece hasta 1557 y 1632 litros, respectivamente). En ambos casos, está por encima de la media de sus competidores. En este listado aparecen ordenadas por capacidad de maletero todas las alternativas de tipo berlina disponibles actualmente, y en este otro listado, las variantes familiares.
El portón está accionado eléctricamente. El techo de cristal no es fijo, se puede abrir, y tiene una cortina de accionamiento eléctrico para evitar que entre luz y calor al habitáculo.