El Suzuki Baleno es un turismo de cinco puertas y cinco plazas que mide 4,0 metros de longitud, 1,75 metros de anchura y 1,47 metros de altura. Se trata, por lo tanto, de una alternativa a modelos como el KIA Rio, el Opel Corsa o el Renault Clio. El Suzuki Swift es más pequeño (mide 3,85 metros).

La versión más accesible (1.2 90 CV) está disponible por 12 655 euros, un precio que lo sitúa en un punto intermedio frente a sus rivales. Un Dacia Sandero TCE 90, Un Nissan Micra 1.2 80 CV o un KIA Rio 1.2 CVVT 84 CV son un poco menos costosos, mientras que un Toyota Yaris 5p 100, un SEAT Ibiza 1.2 TSI 90 CV o un Citroën C3 PureTech 82 lo son más. Listado de turismos de entre 3,8 y 4,2 metros de longitud con motor de gasolina de entre 80 y 110 CV, ordenados por precio. 

Se puede elegir entre dos motores de gasolina, de 90 y 111 caballos de potencia. El primero es uno de 1,2 litros atmosférico de cuatro cilindros. El segundo, es un 1,0 litros sobrealimentado por un turbocompresor, de tres cilindros e inyección directa de combustible (Suzuki lo denomina BOOSTERJET).

Además hay una versión de propulsión híbrida denominada SHVS (Smart Hybrid Vehicle by Suzuki). El sistema está compuesto por el mismo motor de 1,2 litros citado en el párrafo anterior y uno eléctrico de casi 3 CV que se encarga de asistir al motor de gasolina durante las fases de aceleración (siempre que este último gire a 3900 rpm o menos), ponerlo en marcha tras las detenciones en el tráfico y recuperar energía durante la frenada, que se almacena en una batería de iones de litio con 0,38 kWh de capacidad. La potencia máxima del sistema es 90 CV, mientras que el consumo medio de combustible es de 4,0 l/100 km, el más bajo de toda la gama Baleno.

No es un sistema de propulsión equiparable al del Yaris Hybrid (su principal rival por tamaño y potencia), ya que el motor eléctrico del Baleno SHVS tiene muy poca potencia y no es capaz de mover el vehículo de manera autónoma. La finalidad principal de este sistema es reducir el consumo de combustible —sobre todo en ciudad— frente a la versión de gasolina de idéntica potencia (ficha comparativa).

Durante la presentación del modelo a la prensa he conducido las versiones 1.0 BOOSTERJET de 111 CV y 1.2 SVHS de 90 CV. El primero de ellos tiene un motor de funcionamiento suave y agradable con una entrega de potencia enérgica desde muy pocas revoluciones, circunstancia que permite circular con agilidad sin prestar mucha atención al cambio de marchas. Además me ha dado la sensación de que el consumo de combustible es reducido y poco sensible a los cambios de ritmo. En el recorrido previsto por la organización, que transcurría en su mayor parte por vías secundarias con varios puertos de montaña, el ordenador de viaje indicó 5,6 l/100 km, una cifra baja teniendo en cuenta que el ritmo de conducción fue ágil.

El motor de gasolina de la versión 1.2 SVHS tiene igualmente un funcionamiento muy suave, pero como suele ocurrir con los motores atmosféricos de poca cilindrada, obliga al conductor a revolucionarlo mucho para obtener una aceleración más o menos intensa. El aporte de potencia que da el motor eléctrico, aunque discreto, se nota sobre todo durante los primeros metros recorridos, en los que el que el vehículo gana velocidad con una solvencia que no suele ser habitual en vehículos con motor atmosférico de potencia similar. A media y alta velocidad no me ha dado la impresión de que tenga influencia en el rendimiento del sistema; de hecho, las prestaciones de esta versión y de la que sólo tiene motor de combustión son las mismas, algo lógico teniendo el cuenta que el motor eléctrico no asiste al de gasolina si éste gira a más de 3900 rpm (ficha comparativa).

El Baleno está construido sobre una nueva plataforma que, según Suzuki, es más rígida y más ligera que la utilizada hasta el momento en otros modelos de la marca. La versión de acceso pesa 940 kilos (incluidos un conductor y todos los fluidos necesarios para el funcionamiento del vehículo), que es menos que sus principales rivales (ficha comparativa). La suspensión del eje delantero es de tipo McPherson, mientras que en el trasero es de ruedas tiradas unidas por una barra de torsión. Es una suspensión blanda que proporciona un buen nivel de comodidad a los ocupantes, aunque no consigue controlar bien los movimientos laterales de la carrocería, que en ocasiones pueden llegar a ser notables si el ritmo de conducción es rápido o si la carretera tiene muchas curvas pronunciadas. Las reacciones ante errores de conducción o maniobras bruscas son muy seguras gracias a un control de estabilidad muy restrictivo que actúa con eficacia.

El cambio manual de cinco velocidades es de serie en todas las versiones y tiene un funcionamiento correcto tanto por suavidad como por precisión en las inserciones. La versión de mayor potencia (BOOSTERJET) también se puede pedir con una caja de cambios automática de convertidor de par y seis relaciones, una opción que supone un sobrecoste de 1500 euros frente a la versión con cambio manual (ficha comparativa).

De acuerdo con nuestras mediciones, el Baleno sobresale por el espacio disponible para las piernas en los asientos posteriores, que es incluso mayor que el de algunos vehículos con carrocería más grande, como el Toyota Auris o el Ford Focus. La anchura a la altura de los hombros en las dos filas de asientos se sitúa en un punto intermedio frente a sus rivales, mientras que la altura libre hasta el techo es con claridad la peor cota. A pesar de ello, hay espacio suficiente para que dos personas de hasta 1,85 metros de altura quepan sin agobios detrás de otras dos que viajen delante y midan más o menos lo mismo.

El maletero (imagen) tiene 355 litros de capacidad, con lo cual es mayor que el de todos los turismos de similar tamaño y tipo de carrocería que actualmente hay en el mercado español (listado comparativo). A pesar de ello, las maniobras de carga y descarga pueden llegar a ser dificultosas porque el borde queda situado a 83 cm del suelo, que es mucho. Todos los Baleno vienen de serie con un piso de maletero móvil que se puede colocar a dos alturas distintas, de manera que se puede dividir en dos zonas diferenciadas.

El puesto de conducción del Baleno es agradable porque el número de mandos y botones alrededor del conductor son reducidos y están organizados de manera lógica e intuitiva, por lo que no es necesario apartar la vista de la carretera para accionarlos. Además es fácil encontrar una postura adecuada, ya que tanto los ajustes del volante (en altura y profundidad en las versiones más equipadas) como los del asiento son amplios. El asiento del conductor tiene ajuste en altura, pero incluso en su posición más baja, me ha dado la sensación de que está situado más alto de lo normal en un vehículo de tamaño similar.

El salpicadero y las puertas están recubiertos con plásticos duros de aspecto sencillo. En general, los ajustes entre las distintas piezas son correctos y no se perciben ruidos, aunque hay algunos detalles poco cuidados, como por ejemplo la zona de unión entre el tapizado del techo y el parabrisas o la palanca que sirve para ajustar la altura del asiento del conductor. La pantalla del sistema multimedia está situada en la parte superior del salpicadero, en una posición en la que no es necesario apartar la vista de la carretera mucho tiempo para consultar la información visualizada (imagen).

Hay tres niveles de equipamiento disponibles: GL, GLE y GLX. El primero de ellos solo está disponible en combinación con el motor de gasolina de 90 CV e incluye de serie elementos como el aire acondicionado, el ordenador de viaje, la conexión Bluetooth para el teléfono móvil o los faros con encendido automático. El nivel GLE sólo se puede pedir con el motor de gasolina de 111 CV e incluye, además, las llantas de aleación de 16 pulgadas. El nivel más completo «GLX», se puede pedir con el motor de gasolina de 111 CV y con la versión híbrida «SVHS» de 90 CV y añade a todo lo anterior el sistema multimedia con pantalla táctil de siete pulgadas, el climatizador automático, el programador de velocidad adaptativo, o un dispositivo que detecta una posible colisión con otro vehículo (puede llegar a activar los frenos si el peligro de alcance es elevado).

Hay nueve colores distintos para la carrocería, mientras que las llantas pueden ser de 15 o 16 pulgadas de diámetro.

Suzuki anticipó el diseño del Baleno con un prototipo de aspecto similar denominado iK-2. El anterior Suzuki Baleno, que se vendió en España hasta 2001 (fichas técnicas), estaba disponible con carrocería de tres y cuatro puertas puertas, así como con una familiar. El Baleno 2016 se fabrica en India, en la fábrica de Suzuki-Maruti.