Con esta puesta al día del Scala —un turismo de cinco puertas y 4,36 metros de longitud—, Škoda refresca ligeramente su imagen y agrega nuevos elementos de equipamiento. La gama de motores es de gasolina, de 95, 116 y 150 caballos.
La versión más asequible cuesta 21 500 euros (todos los precios del Scala 2024), un precio que lo sitúa entre los más asequibles, que son el el Kia Ceed y el Hyundai i30. El Citroën C4, el Opel Astra, el SEAT Leon o el Peugeot 308 cuestan más (listado de turismos de entre 4,2 y 4,5 metros de longitud con motor de gasolina).
Exteriormente, los cambios más visibles se dan en el frontal. Los faros, el parachoques y la parrilla son distintos (frontal del Scala 2024 y Scala 2019). Es novedad que los faros puedan ser de tipo matricial (Matrix LED; de serie con el nivel Monte Carlo). En la parte posterior las diferencias son más sutiles. Los pilotos tienen la misma forma, aunque la distribución interna de las funciones es distinta, y cambia la tipografía de las letras del portón (trasera del Scala 2024 y Scala 2019).
En el habitáculo es difícil encontrar las novedades. Más allá de que haya nuevas tapicerías y molduras decorativas —hechas con materiales más sostenibles—, lo más destacable es que Škoda ha añadido dos botones al climatizador para regular la intensidad del caudal del aire (climatizador Scala 2024 y Scala 2019). Nos parece un acierto, pues en el Scala 2019 era necesario acudir a la pantalla central para hacer un cambio en este parámetro. Ahora será más sencillo, rápido y menos distractor.
Como en el Scala 2019, la instrumentación se ve en una pantalla de 8,0 pulgadas, mientras que el sistema multimedia más sencillo viene con una de 8,25. En opción se puede pedir una instrumentación de 10,25 pulgadas y un multimedia con sistema de navegación integrado y pantalla de 9,2. Ambos sistemas multimedia tienen conexión inalámbrica para Android Auto y Apple CarPlay
El Scala 2024 viene de serie con faros led, conexión automática de los limpiaparabrisas, aire acondicionado o climatizador, dos pantallas, cuatro tomas USB de tipo C de 45 vatios y llantas de aleación. Además hay disponible elementos como un sistema de carga por inducción de dispositivos móviles que está ventilado (para evitar que el móvil se caliente en exceso y se interrumpa la carga) o un techo panorámico.
No hay cambios en lo que respecta al espacio para los pasajeros, siendo este muy bueno en las plazas posteriores por longitud (piernas) y altura (cabeza), y no tanto por anchura (no es adecuado para transportar a tres adultos). El maletero tiene un volumen de 467 litros, un dato excepcional, pues no hay ningún turismo de longitud parecida que tenga más capacidad (listado comparativo). Es novedad la función manos libres para el accionamiento eléctrico del portón. Las impresiones del interior del Škoda Scala 2019 siguen vigentes en todo lo relativo a amplitud y ergonomía.
Los niveles de equipamiento disponibles son cuatro: Essence, Selection, Design y Monte Carlo. Monte Carlo es el de aspecto más «deportivo», cualidad para la cual Škoda le dispensa con la sustitución de los cromados por piezas en negro (en la parrilla, los parachoques, las llantas y el marco de las ventanillas), con unos asientos delanteros con mayor sujeción lateral y los reposacabezas integrados (imagen), con una tapicería con una línea roja y con unas molduras decorativas en imitación de fibra de carbono (imagen).
Motores
Está disponible con tres motores, todos de gasolina:
Versión | Cilindros | Potencia (CV) | Caja de cambios | Desconexión de cilindros |
1.0 TSI | 3 | 95 | Manual 5 velocidades | No |
1.0 TSI | 3 | 116 | Man. 6 vel. / Aut. 7 vel. | No |
1.5 TSI | 4 | 150 | Man. 6 vel. / Aut. 7 vel. | Sí |
Son motores que pertenecen a la familia EA211 del Grupo Volkswagen y a la generación evo2. Producen menos emisiones contaminantes gracias, entre otros motivos, a la colocación del catalizador y el filtro de partículas dentro de un mismo módulo y más cerca de los colectores de escape; de esta manera ambos elementos de descontaminación alcanzan más rápidamente la temperatura óptima de trabajo. Algunas características técnicas de estos motores son que funcionan bajo el ciclo Miller en vez del Otto, tienen inyectores de diez orificios que trabajan con una presión de inyección máxima de 350 bar y un turbocompresor con álabes de posición variable (puede trabajar a temperaturas de hasta 980 grados). El 1.5 TSI lleva un sistema de desconexión automática de los cilindros: cuando la presión sobre el acelerador es baja o media, el motor funciona únicamente con dos de sus cuatro cilindros, reduciendo de esta manera el consumo de carburante y las emisiones.
Ninguno de estos motores cuenta con un sistema de hibridación, por lo que a todos los Scala les corresponde el distintivo C de la DGT.
En lo que respecta a la suspensión, hay dos posibilidades, la estándar, y la que viene con el Sport Chassis Control (15 milímetros menos de altura al suelo e incluye unos amortiguadores de dureza variable en dos posiciones que el conductor puede elegir a voluntad).
Aunque el Scala tenga una longitud y una anchura superiores a la de un Volkswagen Golf (es 78 milímetros más largo y 4 más ancho), está construido sobre una plataforma de un segmento inferior, la MQB A0, la misma del Škoda Fabia y el Volkswagen Polo. El Golf utiliza la MQB evo, la del Škoda Octavia. El Škoda Scala se produce en la planta que el fabricante tiene en Mladá Boleslav, República Checa.