Škoda Scala (2019) | Impresiones del interior
El Scala es un coche amplio, bien presentado y cuyo equipamiento puede ser grande sin que el coste de las opciones sea muy alto. De su tamaño, es de los coches con mejor relación entre dotación y precio. La sensación de calidad que transmite el habitáculo es buena, aunque no nos parece mejor que la de un SEAT León o un Kia Ceed. Los plásticos de la parte superior del salpicadero tienen un pequeño acolchado, mientras que los de la zona media y baja son duros, pero de buena apariencia. En general, los distintos componentes están bien ensamblados y no producen ruidos malsonantes durante la circulación.
Hay detalles positivos, como el tapizado de la guantera y del hueco que hay a la izquierda del volante (imagen). Delante de la palanca hay un espacio de generosas dimensiones donde se puede colocar un móvil para que se cargue inalámbricamente (imagen). Aspectos menos cuidados son los reflejos que produce, en días soleados, la superficie del salpicadero frente al copiloto, el ajuste de algún plástico de la instrumentación y la iluminación de las plazas traseras, que depende de unas luces LED que alumbran con muy poca potencia.
Tampoco nos parece acertada la decisión de que una parte de los mandos del climatizador se manejen desde la pantalla central. Lo que en un Rapid requería una sola orden (imagen), casi sin desviar la atención de la carretera, en el Scala requiere a menudo un mínimo de dos: primero, pulsar el botón «Menu» del climatizador (imagen); segundo, tocar en la pantalla táctil. Uno de los controles que más se usa, el mando que regula la velocidad del ventilador, está en el extremo más alejado del conductor, tiene un tamaño pequeño y provoca distracciones (imagen).
Los sistemas multimedia Bolero y Amundsen (los dos que hemos manejado) tienen unas pantallas de buena resolución, que responden con rapidez al tacto y cuyos gráficos se mueven con fluidez. Hay algunas animaciones entre menús que ralentizan un poco algunas acciones, pero la experiencia global de uso es buena. Según nos informa Škoda, ha detectado un error en unidades nuevas que hace que la interfaz multimedia no funcione bien (a nosotros nos ha pasado en los dos coches que hemos probado). La marca está pendiente de que se solucione mediante una actualización del software en breve.
Aunque Škoda ofrece una pantalla de instrumentación que permite ordenar la información de manera muy flexible (imagen), el coche que hemos probado contaba con la instrumentación de agujas tradicional, con una pantalla monocromática en el centro (imagen). No hemos echado en falta ninguna función. La información es clara, se lee bien, sin que los reflejos afecten aunque se circule con la persiana del techo panorámico de cristal abierta.
Según nuestras mediciones, no hay ninguna alternativa al Škoda Scala que tenga más espacio para las piernas en la fila posterior de asientos. Hemos medido 75 centímetros entre respaldos (con el asiento del conductor colocado a 100 cm del pedal del freno). Son dos más que en un Opel Astra 5p, tres más que en un Ford Focus 5p y un Honda Civic 5p y cinco más que en un Volkswagen Golf 5p.
También es muy bueno el espacio en sentido vertical, entre la banqueta y el techo. Con el techo panorámico de cristal hay 93 centímetros y sin él, 96. En un Opel Astra 5p, un SEAT León 5p y un Hyundai i30 5p también medimos 96 cm, mientras que en un Volkswagen Golf 5p esta cota fue un centímetro mayor, 97 (en todos los casos fueron unidades sin techo solar). Con el techo de cristal, una persona de 1,85 metros de estatura roza ligeramente el guarnecido si se estira (habitualmente nadie viaja totalmente estirado porque es una postura difícil de mantener e incómoda), mientras que sin el techo de cristal alguien de hasta 1,95 metros puede viajar con comodidad. Estas estaturas que damos son aproximadas y la referencia puede cambiar según la persona, pues algunos son proporcionalmente más largos de torso que de piernas y viceversa.
Esta fila de asientos no tiene la anchura adecuada para que tres adultos de constitución normal se acomoden sin molestias, ni para llevar a dos sillas infantiles y un adulto entre medias. Es algo común a cualquier coche de este tamaño más grande. La distancia entre puertas es dos, cuatro y seis centímetros menor que la de un Golf, un Focus y un Civic respectivamente. Además, la plaza central es notablemente más dura e incómoda que las laterales y el túnel central, voluminoso.
En las plazas traseras son de serie las dos salidas de aire centrales (imagen) y son una opción elementos como el reposabrazos central, las dos entradas USB-C de la consola (Škoda provee a sus clientes de un adaptador a USB 3.0 de aspecto muy endeble. Mercedes-Benz hace lo mismo en el Clase A, pero el adaptador tiene mucho mejor acabado) y unas mesitas de tipo avión.
El volumen del maletero es de 467 litros. No hay ningún turismo de cinco puertas y menos de 4,50 metros de longitud que tenga uno de mayor volumen. Como se muestra en este listado ordenado por tamaño de maletero, los modelos que más se aproximan son el Hyundai i30 Fastback, el Fiat Tipo 5p, el Peugeot 308 5p y el KIA Ceed 5p. El del Honda Civic 5p es todavía más grande, pero también su carrocería es 15,6 centímetros más larga (mide 4,52 metros de longitud). El volumen del maletero del Civic es de 478 litros, excepto con los niveles de equipamiento Sport y Sport Plus, que es de 420 l, debido a la presencia de un sistema de escape más voluminoso.
La cota más destacable del maletero es el espacio vertical entre el piso y la bandeja cubre equipaje (55 cm), que es mayor que en cualquiera de las alternativas mencionadas, incluido el Civic 5p. Hay seis ganchos en el espacio de carga (de diferente tamaño y formas), cuatro argollas en el fondo (para sujetar una red) y una toma de 12 voltios. El portón puede tener apertura eléctrica y la función de activación con un movimiento de pie por debajo del parachoques trasero.
Con la opción «suelo de carga trasero plano» (150 €) hay una bandeja adicional de dos centímetros de grosor que se puede colocar a dos alturas. En la más alta suceden varias cosas: se elimina el escalón que hay entre el borde de carga y el piso, este último además también queda enrasado con los respaldos de los asientos posteriores cuando se abaten (imagen) y, por último, se crea un doble fondo con 13 centímetros de altura. Se pida o no esta bandeja, la última cubierta del piso del maletero es siempre una alfombrilla que, al levantarla, descubre el hueco para la rueda de repuesto (imagen). Esta tiene llanta de chapa y unas medidas inferiores a las del resto de ruedas.
En opción se puede pedir una alfombrilla extra que por un lado es de goma y por el otro tiene la misma moqueta que el resto del maletero (la de goma está pensada para dejar en ella objetos sucios). Hay un catálogo de accesorios originales entre los que hay unas alfombrillas de goma para el habitáculo (incluido el túnel central), un soporte para móviles que se adapta al portabebidas, láminas decorativas para los umbrales de las puertas, redes para el maletero, separadores de carga, accesorios para transportar mascotas y para llevar bicicletas o cofres sobre el techo. Nuestra unidad de prueba contaba con bola de remolque extraíble (opción que cuesta 881 euros), que se desbloquea con un botón en el maletero y se esconde manualmente empujándola a su alojamiento (imagen).
Los respaldos de los asientos posteriores están divididos en dos partes (60/40). Se abaten con unos mandos que hay en su parte superior; no hay ningún tirador en el espacio del maletero. Por 90 euros se puede pedir que el asiento del acompañante también sea abatible.
Hemos probado los asientos que vienen con el nivel Style (imagen) y los deportivos, que forman parte del equipo de serie del nivel Sport y First Edition (imagen). Estos últimos se distinguen por dar un poco más de sujeción al cuerpo en las curvas y porque el reposacabezas y el respaldo están unidos. Ambos tipos de asientos son cómodos y permiten adoptar una postura confortable al volante. Los del nivel Style son mejores si se busca el mayor confort posible ya que la banqueta es un poco más ancha, el relleno un poco más mullido y es posible ajustar el reposacabezas al gusto.
El asiento del conductor puede tener ajustes eléctricos y memoria de posición. Para los dos delanteros y los dos laterales de la fila posterior hay disponible una calefacción mediante una resistencia eléctrica, ajustable en dos niveles potencia (imagen e imagen). El volante también se puede pedir con esta función, con un solo nivel de potencia. Se activa desde la pantalla del climatizador (imagen).