SEAT Toledo 2.3 V5 20V (1999) | Habitabilidad justa y un maletero grande
El Toledo tiene poco espacio interior, comparado con otros modelos de tamaño más o menos parecido. En las plazas traseras se acomodan dos personas de talla alta algo justos de espacio, tres no. Es uno de los modelos de su categoría que menos sitio ofrece para las piernas y tiene menor altura libre al techo.
El pasajero central es el que tiene menos posibilidades de encontrarse cómodo, a pesar de que el Toledo 2.3 V5 170 CV tiene reposacabezas y cinturón de seguridad de tres puntos también en la plaza del medio. Esto se debe a dos aspectos: uno, que la banqueta y el respaldo trasero están mejor acondicionadas para el confort de dos ocupantes; dos, que el prominente abultamiento que hay en el suelo limita el espacio para los pies del pasajero central. La banqueta del asiento trasero es un poco corta.
Es uno de los modelos de su categoría que tiene el maletero más grande (500 litros). Sólo es criticable que la boca de llenado es algo pequeña y limita el acceso. Bajo el piso hay una rueda de repuesto de tamaño normal, herramientas, gato, triángulos de emergencia, botiquín y lámparas de recambio. En el maletero también hay una toma de corriente adicional (12 voltios). La posibilidad de abatir el asiento trasero por partes (60/40) amplía las posibilidades de carga.
A diferencia de otros Toledo, el puesto de conducción del Toledo 2.3 V5 170 CV es muy cómodo. La diferencia la marcan sus asientos de corte deportivo, con una buena sujeción lateral y un mullido acertado en dureza. En otros Toledo, como el 1.9 TDI 150 CV Signa, la posición es buena, pero los asientos tienen un mullido muy blando.
El volante está forrado en cuero, es muy agradable de empuñar y se regula vertical y longitudinalmente. Todos los mandos se accionan fácilmente y hay numerosas guanteras que resultan muy prácticas en el uso cotidiano. La instrumentación es sencilla, se puede leer bien y está complementada con un ordenador de viaje que indica el consumo medio, consumo instantáneo, velocidad media, autonomía, tiempo de recorrido y temperatura exterior.
También hay una pantalla adicional que indica las funciones de la radio. Nuestra unidad de pruebas es la versión «Executive» y se distingue por su tapicería parcialmente en cuero y Alcantara y porque tiene reglaje eléctrico, con tres memorias, de los asientos delanteros. Con reglaje eléctrico, la banqueta es regulable en altura e inclinación.
El navegador (opcional) no es tan fácil de utilizar como en otros modelos y requiere un amplio estudio del manual de instrucciones. El cargador de 6 CD's (opcional) se sitúa en el interior de la guantera y roba prácticamente todo su espacio.
Los faros de doble parábola dan una iluminación intensa, aunque su amplitud es escasa. No ayudan en este punto los faros antiniebla, que ofrecen una iluminación muy pobre.
Los plásticos duros utilizados en la parte baja del salpicadero y las puertas desentonan en un coche como el Toledo 2.3 V5. En la parte superior se utiliza un plástico mullido, pero tiene una forma muy áspera al tacto y difícil de limpiar. El ajuste de todos los elementos me parece correcto.