Si buscamos en nuestra base de datos coches de cuatro puertas de 4,0 a 4,3 m de longitud, con motor Diesel entre 90 y 116 CV, se puede ver que el Córdoba es uno de los mejores por relación entre precio y equipamiento.
Los que tiene un precio cercano al del Córdoba bien son coches menos rápidos (como el Focus TDdi 90) o bien eso y también algo anticuados (el Fiat Marea, el Peugeot 306 o el Renault Mégane Classic). Los coches modernos con un nivel de prestaciones y equipamiento cercanos al Córdoba son más costosos o no tienen el equipamiento de las versiones más costosas del Córdoba TDI 100.
Para quien dé valor al uso del coche cuando está cargado, el Córdoba puede ser muy satisfactorio por dos razones: primera, su maletero es muy voluminoso; segunda, cuando está cargado, sigue siendo un coche rápido y económico porque el motor tiene muy buen rendimiento.
El precio, las prestaciones, el consumo y el maletero son las cualidades que hacen más recomendable a esta versión del Córdoba. Si la habitabilidad en las plazas traseras es una prioridad, en cambio, hay varios modelos preferibles. Tampoco es de los más cómodos de suspensión, que es algo dura, y tiene un nivel de ruido y vibraciones un poco mayor que otros Diesel modernos.
La estabilidad es normalmente buena; con el control de estabilidad, que es opcional, se convierte en un coche seguro y fácil de conducir. La calidad de acabado me parece también algo mejor de lo normal, al margen de que la combinación de materiales sea más o menos del agrado del usuario.
El puesto de conducción me parece adecuado para personas de distinta talla y forma de conducir. Otros aspectos prácticos también están bien resueltos, como el funcionamiento del sistema de ventilación, y el número y disposición de huecos para dejar cosas.
Con este motor hay tres versiones del Córdoba: Stella, Sport y Signa. Se distinguen en el equipamiento y también en el acabado; las dos primeras tienen un tipo de plástico en el salpicadero distinto de la última.