Ya están a la venta las nuevas versiones del 75, la berlina más grande que actualmente fabrica Rover. No es un coche completamente nuevo, sino un remodelación del modelo lanzado en 1999, del que Rover ha fabricado 170.000 unidades.
Los cambios más notables son de aspecto. El equipamiento de serie —en función de las versiones— es un poco más abundante. No hay cambios en la gama de motores.
La gama sigue estando compuesta por tres niveles de equipamiento «Comfort», «Classic», y «Club». Todas las versiones tienen de serie antibloqueo de frenos, seis airbags (dos frontales, dos laterales y dos de cabeza), climatizador y cuatro elevalunas eléctricos.
Las nuevas versiones traen de serie un equipamiento un poco más abundante, que se puede ver en esta tabla. Este incremento de equipamiento supone un ligero incremento de precio respecto a la gama reemplazada de Rover 75. Los precios van desde 25.053 hasta 31.300 € para la versiones con carrocería de cuatro puertas; la carrocería familiar (Tourer) es 1.252 € más cara.
La gama de motores permanece inalterada; hay un Diesel de 2,0 litros de cilindrada y 131 CV de potencia y tres gasolina: uno de 120 CV de potencia y 1,8 litros de cilindrada, otro de idéntica cilindrada pero turboalimentado y 150 CV de potencia. El más potente es un 2,5 litros V6 de 177 CV.
Tiene una nueva parrilla de formas más angulosas y con menos superficie cromada; los faros tienen un diseño distinto y un recubrimiento de plástico transparente para los proyectores.
El paragolpes delantero tiene nuevas entradas de aire, unos antinieblas alargados; las nuevas versiones prescinden de las molduras cromadas que tenía el modelo anterior (también en el paragolpes delantero).
A pesar de que la parte frontal tiene menos material cromado, Rover lo sigue usando en el marco del parabrisas, en el de las ventanillas laterales y en los tiradores de las puertas. También conserva la banda que recorre longitudinalmente la carrocería (en algunas versiones), así como la que va en el espacio inferior entre las puertas de acceso al habitáculo. Este tipo de decoración que suele ser opcional en otros coches, es de serie en el Rover.
En la versión Tourer los cambios en el frontal son los mismos que en el cuatro puertas, en la trasera hay modificaciones en el portón (que ahora lleva las letras Rover centradas su parte inferior) y el paragolpes está un poco rebajado por el centro para permitir un acceso al maletero más cómodo.
Hay nuevos recubrimientos para el salpicadero, asientos y puertas, además del cambio de diseño de los asientos traseros.
También, hay una nueva gama de llantas de aleación y de colores para la carrocería, así como nuevas variedades de tejidos, tapicerías y colores de carrocería dentro del programa de equipamiento «Monogram». Esta posibilidad de equipamiento incluye una variedad de 24 colores para la carrocería, algunos de ellos iridiscentes, con efectos holográficos o con brillos de diferentes matices.
El Rover 75 es un coche de tracción delantera de 4,747 mm de longitud (el familiar mide 4,792 mm) y un volumen de maletero pequeño teniendo en cuenta su longitud; sólo 432 litros (400 el familiar).
Sirve de base para la fabricación del MG ZT, así como los Rover 25 y 45 son la base para los MG ZS y ZT. Lo que hace MG es dar una decoración distinta exterior e interior. También añade cambios en los motores y suspensión.