El Land Rover Velar 2023 es un lavado de cara del Velar de primera generación (código L560), que llegó al mercado en la segunda mitad de 2017. Cambia un poco por fuera (nueva parrilla, faros, pilotos y zona baja del parachoques trasero) y mucho por dentro (galería de imágenes). También hay novedades en el equipamiento y en la gama de motores (por ejemplo, la versión híbrida enchufable tiene más autonomía eléctrica).
Es un todoterreno de grandes dimensiones —4,80 metros de longitud, 2,04 m de altura y 1,68 m de altura— con un precio de venta que parte de 77 600 euros (todos los precios). Dentro de la familia Range Rover se sitúa por encima del Evoque y por debajo del Sport.
Con respecto al Velar 2018 (que ha sufrido numerosas puestas al día a lo largo de su vida comercial), cambia el enrejado de la parrilla y la firma lumínica de faros y pilotos. Continuando con los faros, los más avanzados son de tipo matricial, como en el anterior Velar, pero pierden los diodos láser. A cambio, tienen un control más preciso del encendido selectivo de los ledes, de los que hay 67 por faro.
El habitáculo es donde las novedades son más perceptibles. La pantalla multimedia de 10 pulgadas integrada en el salpicadero (imagen) deja paso a una curvada de 11,4 (imagen) y, además, el software recibe la última versión del sistema Pivi Pro. La pantalla es parecida a la que tiene el Range Rover Sport, aunque en este modelo mide 13,1 pulgadas. Los mandos de manejo del climatizador, que antes conformaban un módulo independiente (imagen), ahora ahora se integran en la pantalla multimedia. En su lugar hay un hueco con tapa para dejar objetos (imagen). La zona de la palanca del cambio se ha simplificado al máximo: ahora solo está la palanca, en el centro, sin ningún botón o hueco a su alrededor (imagen antes e imagen ahora).
La gama Velar 2023 se reduce a tres versiones: D200 (Diesel 204 CV), D300 (Diesel 300 CV) y P400e (híbrida enchufable 404 CV). No hay versiones de gasolina para España; en otros mercados sí las hay.
El motor del Velar D200 tiene cuatro cilindros y 2,0 litros de cilindrada, mientras que el del Velar D300 es un seis cilindros de 3,0 litros. Ambos llevan un sistema de hibridación ligera a 48 voltios (lo que les permite portar el distintivo ambiental ECO) y están asociados a una caja de cambios automática de convertidor de par y 8 relaciones. No hay diferencias en los datos de prestaciones y consumo con respecto a las versiones equivalentes del anterior Velar (ficha técnica comparativa).
El sistema de propulsión del Velar P400e recibe una nueva batería de 19,2 kWh (antes 17,1 kWh), gracias a la cual la autonomía homologada en modo eléctrico pasa de 52 a 64 km. El motor de combustión y el eléctrico permanecen sin cambios: el primero es de gasolina, tiene cuatro cilindros y da 300 CV, mientras que el eléctrico es síncrono de imanes y produce 143 CV. Con este último, el Velar P400e puede alcanzar 140 km/h.
La aceleración de 0 a 100 km/h del Velar P400e se mantiene en 5,4 segundos, pero la velocidad máxima cae a 209 km/h (antes, 240 km/h). La batería se puede cargar con corriente alterna a 7 kW (dos horas y media para pasar del 0 al 100 %) y con continua a 50 kW (0 a 80 % en 30 minutos; el anterior Velar P400e llegaba a 32 kW). Ficha técnica comparativa.
Los niveles de equipamiento son tres: S, Dynamic SE y Dynamic HSE. Desaparece, al menos para España, el nivel Autobiography. Los Dynamic tienen un parachoques diferente y algunos detalles decorativos para diferenciarlos del nivel S, como unas salidas de aire falsas en el capó. Es novedad la disponibilidad del tejido Ultrafabrics como tapicería para asientos y salpicadero. Es una tela que evita el uso de materiales de origen animal y cuyo tacto, tras probarlo en un Range Rover Sport, nos parece mucho peor que el del cuero natural por su aspereza.
El sistema de cancelación activa de ruido, que está presente en el Velar desde 2020, viene incluido en los modelos con sistema de sonido Meridian. Gracias a él, Land Rover dice que el Velar es el «vehículo más silencioso de su clase en lo relativo a ruido de la carretera, en comparación con su competidores directos: Audi Q5, BMW X4, Mercedes-Benz GLC y Porsche Macan». El sistema de purificación del aire con filtro PM 2.5 también sigue presente en el Velar 2023. Este filtro impide el paso de partículas antropogénicas de 2,5 micrómetros o menos, que suelen ser perjudiciales para la salud.
La suspensión —doble triángulo superpuesto delante y multibrazo detrás— viene de serie con muelles metálicos. Estos se pueden reemplazar por unos neumáticos pagando la opción correspondiente. Estos últimos permiten cambiar la altura libre al suelo a voluntad (se puede llega a un máximo de 251 mm) y con ello lograr mejores ángulos todoterreno (ángulo de ataque de hasta 27,5 grados, de salida hasta 29,5 y ventral de hasta 23,5). La versión híbrida tiene peores cotas todoterreno, pues su altura libre al suelo es como máximo de 214 mm y sus ángulos de ataque, salida y ventral se quedan como mucho en 25,0, 27,0 y 21,0 grados.
Todos los Range Rover Velar tienen el sistema de tracción total Intelligent Driveline Dynamics. Este sistema hace un reparto de par variable entre ambos ejes de rueda según las circunstancias. En condiciones óptimas, envía el 100 % del par al eje posterior con el fin de disminuir el consumo de carburante. Si las circunstancias cambian y se estima necesaria la intervención del eje delantero, un embrague multidisco se encarga de realizar su acople progresivamente, hasta llegar a desviar el 100 % del par delante si es necesario. El paso de todo atrás a todo delante y viceversa, se puede realizar en un tiempo mínimo de 165 milisegundos. Por otra parte, es posible pedir en opción el bloqueo del diferencial trasero, una función que resulta útil en conducción todoterreno. De lo que no dispone el Velar, ni tan siquiera como opción, es de reductora. Tampoco de sistemas avanzados como barras estabilizadoras activas que sí están presentes en los Range Rover superiores.