El maletero del Primera SportWagon tiene más de funcional que de amplio: su volumen es 465 l. Hay más competidores con más maletero que con menos.
Menos tienen el Peugeot 407 SW (448 litros), el Jaguar X-Type Wagon (445 litros), el Audi A4 (442), el Volvo V50 (417 litros), el Rover 75 Tourer (400 litros) y el Opel Signum (sólo 365 litros).
En el maletero tiene una longitud máxima de 108 centímetros y una anchura máxima de 112 cm. Hasta la cortinilla enrollable que lo cubre, hay una altura de 40 cm. El plano de carga (altura mínima que hay que hay que levantar un objeto para meterlo en el maletero) es 65 cm.
En el piso hay una tapa plegable en porciones con un acabado realmente bueno que cubre un segundo compartimiento, muy útil para meter diversos objetos. A los lados, también en el piso, hay otros dos cajones con tapa y sobre los laterales, hay otros dos que se abren con una pieza de plástico que se libera girándola noventa grados.
La rueda de repuesto es igual que las demas de medidas de tamaño, y va situada dentro del maletero. Para sacarla hay que abatir la tapa plegable y sacar el cajón de plástico.
La tapicería de esta versión es muy suave al tacto, parece acogedora en épocas frías, pero es calurosa en verano. Quienes hemos conducido en coche, hemos notado que el asiento no da una apoyo uniforme en la espalda (aunque habrá quien esté muy a gusto; es cuestión de probarlo), algo que se da con cierta frecuencia en los coches en los que sólo se puede variar la altura de la banqueta pero no la del respaldo (que permanece en una posición fija).
He probado a conducir con la banqueta lo más baja posible (como casi siempre lo hago) y en una posición más bien alta. En el primer caso notaba demasiado apoyo en la zona lumbar, mientras que el resto de la espalda me quedaba con poco apoyo. Con la banqueta alta tenía un apoyo aceptable salvo en la parte superior de la espalda. En ambos casos, después de conducir mucho tiempo seguido, a veces notaba fatiga y otras no.
La banqueta se regula en altura con dos ruletas que cuando se accionan con todo el peso encima del asiento pueden estar duras.
El interior tienen unas dimensiones buenas en todo las cotas, pero es claramente estrecho en las plazas traseras para un tercer ocupante.
Con el aire acondicionado conectado y las salidas de aire del salpicadero abiertas, no conseguía evitar corrientes de aire frío en la mano izquierda.
Hay algunos mandos, como los de la regulación eléctrica de los faros, de los retrovisores eléctricos y del control de estabilidad que quedan un poco alejados y fuera de campo de visión de conductor. No lo considero un inconveniente porque son botones que no se usan con frecuencia normalmente.
La pantalla multifunción del centro del salpicadero queda muy a mano y es fácil de manipularla, aunque puede requerir un corto periodo de adaptación.