Nissan Pathfinder (2005) | Impresiones del interior y de conducción
Da un resultado aceptable por carretera. La carrocería balancea apreciablemente, aunque no es un coche torpe en exceso a la hora de afrontar zonas de curvas. Aún así, es un coche que va mejor por carreteras rápidas que por las lentas.
Me ha gustado más que un Patrol y no hay mucha diferencia con respecto a un Toyota Land Cruiser. El Murano, un Touareg o un BMW X5 son coches que van mejor que el Pathfinder en carretera.
El control de estabilidad me parece un elemento muy importante para circular tanto por carretera como por pistas de tierra. Sobre caminos de tierra se puede conducir rápido sin que esté constantemente actuando y cuando actúa me ha parecido muy eficaz en sobreviraje. Al conectar la reductora el control de tracción se desconecta automáticamente, aunque queda en funcionamiento el autoblocante electrónico.
Como todoterreno puro, su capacidad para afrontar zonas trialeras puede estar limitada por unos recorridos de suspensión que no parecen grandes (imágenes en zonas trialerzas).
Lo que sí que tiene es un buen dato de altura libre al suelo (238 mm), aunque no tanto como otros coches con suspensión neumática en los que se puede variar manualmente la altura libre al suelo: un Touareg con muelles neumáticos puede llegar a tener hasta 300 mm, pero con una velocidad limitada.
Otros coches, como un Ssangyong Rexton, un BMW X5, un Mercedes ML o un Volvo XC 90 son peores en este sentido que el Nissan (tienen 200, 180, 204 y 218 mm de altura libre al suelo respectivamente).
Sus ángulos de ataque y salida son 33 º y 25º, respectivamente. Estos datos en un Patrol son 37º y 32º y en un Montero 5p, 39º y 24,5º. Un Touareg sin suspensión neumática tiene 28 º en ambos casos y con suspensión neumática, en la posición más elevada posible, llega a 33,2º también en ataque y salida. Otros SUV son peores, como un BMW X5 (28º y 22,5º) o un Volvo XC90 (28º y 25º)
El motor es básicamente el mismo que utilizaba antes el Nissan Pick Up (aunque con ciertas modificaciones). Tiene inyección por conductor común, turbocompresor de geometría variable y 174 CV. Es una potencia específica alta para lo que es habitual en un motor de todoterreno. Su resultado práctico es muy bueno por lo bien que funciona a bajo régimen (algo muy importante para circular en campo por zonas complicadas). Empieza muy pronto a dar una buena aceleración (en torno a las 1.500 rpm), lo que no hace es alcanzar un régimen alto con brillantez.
La posición de conducción me ha parecido cómoda y no he echado en falta que el volante carezca de regulación en profundidad. Los materiales que utiliza en el interior son sencillos y duros en su mayor parte, aunque la impresión que deja es de buen ajuste. La excepción es el plástico laminado que hay en la parte superior del salpicadero, de mayor calidad que el resto.
Como otros todo terreno tiene dos asideros para cada uno de los pasajeros delanteros. Uno está en el techo y el segundo en el montante del parabrisas.
Es muy funcional. La tercera fila de asientos va alojada en el maletero y cuando estos dos asientos están plegados queda completamente enrasados con el resto del maletero. La segunda fila de asientos (que no tiene recorrido longitudinal) tiene dos posibilidades distintas de plegarla. Una de ellas está pensada para facilitar el acceso a las plazas traseras: se libera el respaldo con una palanca y el resto del movimiento está asistido con un muelles que abate el respaldo y la banqueta hacia delante. Es un sistema muy cómodo y que deja un buen hueco para acceder a las plazas traseras.
La segunda posibilidad de abatir las plazas traseras está diseñada para conseguir un plano de carga completamente enrasado con la superficie del maletero. Se hace mediante tres movimientos. Uno, que abate la banqueta de las plazas traseras; el segundo, que pliega el respaldo; y el tercero, que hace que baje el respaldo unos centímetros para que quede perfectamente enrasado con el maletero. Para poder hacer este tercer movimiento hay que accionar una palanca situada en la base del asiento.
En función del nivel de equipamiento la superficie del maletero está terminado en un plástico duro aparentemente más fácil de limpiar que la clásica moqueta.