El Mercedes-Benz S 580 e es la versión híbrida enchufable del Mercedes-Benz Clase S (2021). Tiene 510 CV y una autonomía eléctrica de hasta 111 kilómetros (WLTP). Está disponible con la carrocería corta desde 133 438 € y con la larga desde 135 172 (miden 5,18 y 5,29 metros de longitud respectivamente). En España solo se puede pedir con tracción trasera, pero hay otros países, como en Alemania, donde es posible pedir tracción a las cuatro ruedas.
Lleva el motor de gasolina del S 450 4MATIC, es decir, uno con seis cilindros en línea, 2999 cm³ de cilindrada, 367 CV y 500 Nm de par. El motor eléctrico es síncrono, con rotor de imanes permanentes, una potencia de 150 CV y un par de 440 Nm. La batería es de iones de litio y su capacidad bruta es de 28,6 kWh (21,5 kWh utilizables).
Todas sus alternativas —el Audi A8 60 TFSI e (449 CV), el BMW 745e (394 CV) y el Porsche Panamera 4 E-Hybrid (462 CV)— tienen un motor eléctrico menos potente, una batería mucho más pequeña y la mitad de autonomía eléctrica (ficha técnica comparativa). No obstante, todos estos vehículos cumplen con los requisitos para llevar el distintivo medioambiental 0 de la DGT. El Clase S, es por mucha diferencia, el más caro de entre los modelos mencionados.
El motor eléctrico está colocado entre el de combustión y la caja de cambios automática de convertidor de par de nueve relaciones (9G-Tronic). Solamente con él, el S 580 e puede alcanzar 140 km/h. La velocidad máxima con ambos motores es de 250 km/h (limitada electrónicamente).
La versión híbrida enchufable de la anterior generación del Clase S —S 560 e L, más información—, solo estaba disponible con carrocería larga y tracción trasera. Tenía 476 CV (motor de gasolina V6 de 367 CV y eléctrico de 122), una batería de 13,5 kWh y una autonomía eléctrica de 45 km.
La recarga de la batería se puede hacer a un máximo de 11 kW con corriente alterna. Es decir, con este tipo de corriente, carga a más potencia que un Mercedes-Benz EQC (7,4 kW), un modelo totalmente eléctrico. En opción, hay disponible un cargador para corriente continua, con una potencia máxima de 60 kW (el EQC carga a un máximo de 110 kW en CC). En este último caso, Mercedes-Benz dice que una recarga del 0 al 100 % toma aproximadamente 30 minutos. El puerto de recarga está en el costado izquierdo (imagen), justo en el lado opuesto de la boca del depósito de gasolina (en el S 560 e L está debajo del piloto derecho, imagen).
Mercedes-Benz ha rediseñado la suspensión posterior para hacerla más compacta (su altura es 27 milímetros inferior) y, de esta manera, ganar espacio para la batería y el depósito de carburante. El maletero tiene un volumen de 350 litros, 200 menos que los demás Clase S. En el espacio de carga ya no hay el escalón que tiene el S 560 e L hacia la mitad (imagen). El depósito de carburante es de 67 litros, nueve menos que las versiones no híbridas.
Entre los modos de conducción disponibles, hay uno llamado «Battery Level» o «BL», que sirve para evitar que la batería descienda por debajo de un determinado nivel de carga. Para conseguirlo, el motor de combustión se enciende y hace la función de generador.
Detrás del volante hay una levas que sirven para variar la recuperación de energía cuando se deja de pisar el acelerador. Se puede pasar de una retención muy alta, que permite conducir casi sin tocar el pedal del freno, a una posición de retención nula, con la que el coche circula como si fuera en punto muerto.