Mercedes-Benz E 220 CDi Automático (1998) | Audi, BMW y Volvo: unos rivales con las mismas armas
Por potencia, el Audi A6 2.5 TDi (150 CV) y el Volvo S80 2.5D (140 CV) son los rivales más directos del Mercedes-Benz E 220 CDi (143 CV). Queda ligeramente por encima el BMW 525d (163 CV) y por debajo el 520d (136 CV). Hay otra versión del Clase E —el 270 CDi de 170 CV y 6,3 millones— más próximo al BMW 525d.
Cada marca ha optado por una solución mecánica diferente: Audi, seis cilindros en V, BMW, seis en línea, Volvo, cinco en línea y, Mercedes, cuatro en línea. El motor CDi es el más ruidoso y el que más vibra, pero también el que tiene la mayor potencia específica (66,6 CV/litro) y, sobre todo, el que menos consume.
El Mercedes-Benz es más rápido que el Volvo, tan rápido como el Audi y no mucho más lento que el BMW. El E 220 CDi necesita siete metros más que el 525d Automático para adelantar a 80 y 100 km/h.
Decir cual de estas berlinas tiene el mejor comportamiento en carretera es tarea difícil porque todos muestran una estabilidad y un confort de marcha excelente, aunque yo me inclino hacia BMW y Mercedes. A excepción del Volvo S80 (que es tracción delantera y lo necesita menos que BMW y Mercedes), todos cuentan de serie con un control de tracción, pero sólo Mercedes-Benz equipa sin sobreprecio el control de estabilidad, que es opcional en el Audi, el BMW y el Volvo.
El Mercedes-Benz E 220 CDi menos costoso —Classic— tiene un equipamiento de serie tan abundante como sus rivales, e incluso mejor en algunos aspectos (incorpora de serie ordenador de viaje, control de crucero y control de estabilidad). De todos ellos, el Volvo S80 2.5D es el modelo que queda peor en este sentido (son opción los faros antiniebla, el radiocasete o el control de tracción) aunque también es el que menos cuesta.
La elección no es sencilla. El BMW 525d es el más potente y rápido, pero el Mercedes-Benz E 220 CDi tiene unas prestaciones parecidas y es el que menos consume. Audi ofrece un motor V6 TDi muy equilibrado y un equipamiento completo pero también es más caro que el Mercedes, mientras que Volvo, con su motor de origen Audi, no alcanza el mismo nivel de prestaciones que el resto de sus rivales y tiene un cambio automático de sólo cuatro marchas.
Pincha aquí para ver la ficha comparativa de estas cuatro berlinas turbodiésel.