El Lamborghini Huracán Sterrato es una versión del Lamborghini Huracán con 44 milímetros adicionales de altura libre al suelo, algo que le permite circular por zonas que serían inconcebibles para cualquier otro Huracán. Con respecto a sus hermanos de gama, pierde un poco de efectividad en carretera revirada, pero gana sensiblemente en confort. Lo que no cambia es el exuberante sonido y empuje de su V10 de gasolina de 610 CV (más información en las impresiones de conducción).
Además de tocar la suspensión, Lamborghini ha añadido unos neumáticos que no son exclusivos para un uso en carretera y ha incrementado el ancho de vía de ambos ejes (30 mm el delantero y 34 mm el trasero). Asimismo, ha añadido unos faros en la parrilla, rieles portaequipajes y una toma de aire en la parte posterior del techo.
La producción del Sterrato está limitada a 1499 unidades, cada una de las cuales tiene un precio de 299 515 €. La principal alternativa a este modelo es el Porsche 911 Dakar, que tiene un planteamiento muy parecido y es sensiblemente menos costoso (ficha comparativa).
En el habitáculo, Lamborghini ha utilizado un tapizado de Alcantara en color «verde Sterrato» en asientos, parte inferior del salpicadero y paneles de las puertas. Además, tanto el sistema multimedia como la instrumentación (que es mediante pantalla) incluyen menús específicos para la conducción fuera de carretera: datos sobre la inclinación del coche, el ángulo de giro de las ruedas, las coordenadas o una brújula. De todo lo relacionado con el habitáculo, aportamos más datos en la impresiones del interior.
Para proteger los bajos ante posibles impactos de objetos, la parte delantera de los mismos tiene una placa de aluminio, los umbrales de las puertas están reforzados y el difusor aerodinámico posterior está menos expuesto que en otras versiones del modelo. Además, como en algunos vehículos todoterreno, las aletas incluyen unos protectores de plástico unidos a la carrocería con tornillos.
El sistema que gestiona los distintos elementos electrónicos del coche y que sirve para ofrecer varios modos de conducción, al que Lamborghini llama «LIVD» (Lamborghini Integrated Vehicle Dynamics), tiene una puesta a punto específica para este modelo. Los modos Strada y Sport tienen una nueva calibración que se adapta a las características de la carrocería (a su mayor altura, principalmente) y además hay uno nuevo llamado Rally que está pensado para ser usado en condiciones de baja adherencia.
El motor del Huracán Sterrato es un V10 atmosférico de gasolina con 5,2 litros de cilindrada y 610 CV, el mismo que tiene el Huracán EVO RWD. Va unido a una caja de cambios automática de doble embrague con siete relaciones y a un sistema de tracción total con un embrague central de tipo Haldex. El diferencial posterior es de tipo autoblocante.
La aceleración desde parado es muy buena, aunque algo peor que la de otras versiones de la gama Huracán: puede pasar de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos (3,3 s en el Huracán EVO RWD y 2,9 s en el Huracán EVO de tracción total), exactamente el mismo tiempo que emplea un Porsche 911 Dakar de 480 CV. La velocidad máxima es mucho más baja que en otras versiones de la gama, de «solo» 260 km/h (325 km/h en los Huracán EVO RWD y EVO de tracción total) debido a la limitación electrónica que Lamborghini ha implementado.
Las llantas del Huracán Sterrato tienen un diseño específico y 19 pulgadas de diámetro. Llevan unos neumáticos Bridgestone Dueler AT002 en medidas 235/40 y 285/40 R19 (delante/detrás) que, según Lamborghini, ofrecen un buen rendimiento tanto en carretera como fuera de ella. El sistema de frenos incluye discos carbocerámicos en las cuatro ruedas, de 380 mm en el eje delantero (con pinzas fijas de seis pistones) y de 356 mm en el trasero (igualmente con pinzas fijas, pero de cuatro pistones).
Como en otras versiones del Huracán, es posible acudir al programa de personalización de Lamborghini («Ad Personam») para elegir entre 350 colores para la carrocería y 60 para la piel o la Alcantara del interior.