El KIA Niro comparte plataforma y otros elementos, como el sistema híbrido, con el Hyundai IONIQ (ficha comparativa). El motor de combustión del KIA Niro es nuevo y está desarrollado para ser utilizado en este y en otros modelos híbridos de KIA y Hyundai. Es de gasolina, tiene 1,6 litros de cilindrada, 105 caballos de potencia máxima y funciona bajo el ciclo Atkinson.
El motor eléctrico tiene 44 caballos de potencia máxima y se alimenta de energía almacenada en una batería situada bajo los asientos traseros. Esta es de polímero de litio de 1,56 kWh de capacidad (que suministra a una tensión máxima de 240 V) y trabaja normalmente entre los márgenes del 30 % (inferior) y el 70 % (superior). Esta batería pesa 33 kilogramos. Hemos preguntado a KIA sobre si sería posible en caso de fallo reemplazar únicamente el módulo averiado en vez de la batería completa y nos han dicho que está preparada para poderlo hacer.
Los dos motores están conectados entre sí mediante un embrague. Cuando está abierto, el motor de gasolina queda aislado del resto de la cadena cinemática y se puede apagar. En esa situación, el motor eléctrico que gira solidario con el eje de entrada de la caja de cambios es el encargado de impulsar el coche. Si el embrague se cierra, ambos motores trabajan en serie y mueven al Niro.
Hay una diferencia grande en el consumo homologado según la medida de la llanta. Si tiene llanta de 16”, es 3,8 l/100 km; si es llanta de 18”, 4,4 l/100 km. Esto se debe principalmente a que el método de homologación agrupa las condiciones de la prueba según el peso de los coches. Con las llantas de 18”, el peso aumenta lo suficiente para que el Niro pase al siguiente tramo (que supone hacer la prueba como si la versión de 18” pulgadas pesase 130 kg más que la de 16”). Los de 16” están orientados a lograr un consumo bajo y ofrecen menor resistencia a la rodadura, mientras que los de 18" son más blandos para proporcionar más agarre.
El Niro puede acelerar de 0 a 100 km/h en 11,5 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 162 km/h, por lo que es más lento que un Fiat 500X y un Honda HR-V con cambio automático y motores de gasolina de potencia equivalente. La velocidad máxima es muy baja en relación a la potencia, según KIA porque corresponde a la que alcanza en las condiciones menos óptimas (entendemos que sin la ayuda del motor eléctrico).
La masa en vacío del KIA Niro es 1425 kilogramos. KIA dice que para conseguir esa cifra ha utilizado acero de alta resistencia (el 53% del bastidor está hecho con este material) y aluminio en diversas partes de la estructura y la carrocería, como en el capó y el portón (5 y 6 kg de ahorro respectivamente), en los brazos inferiores de la suspensión delantera y en la viga interior del parachoques delantero. La suspensión es de tipo McPherson en el eje delantero e independiente de tipo multibrazo en el trasero.
KIA está trabajando en dos funcionalidades que incorporará más adelante. La primera se llama «Coasting Guide Control» y avisa al conductor, mediante un icono en la instrumentación, del momento adecuado para dejar de pisar el acelerador y aprovechar la inercia para recargar la batería (por ejemplo, porque sabe que a los pocos metros hay un cruce); para que funcione hay que llevar programada una ruta en el navegador. La segunda función se llama «Predictive Energy Control» y utiliza los datos del GPS para analizar el relieve de la ruta establecida y determinar así en qué momento es más adecuado recargar la batería. Por otra parte, KIA dice que ofrecerá en un futuro un Niro preparado para arrastrar remolques de hasta 1300 kg. Para ello, recibe modificaciones en el sistema de refrigeración y en los frenos.