El KGM Korando es el mismo coche que hasta mediados de 2024 se llamaba SsangYong Korando (excepto por un par de cosas, como detallaremos más adelante). La sustitución del nombre SsangYong por KGM responde a la estrategia comercial de KG Mobility, propietaria de SsangYong. El logotipo, paradójicamente, se mantiene (foto).
El Korando, por lo tanto, sigue siendo un SUV de 4,45 metros de longitud cuya gama está compuesta por dos versiones de gasolina —148 y 163 CV— y una eléctrica —207 CV—. La más asequible, la de 143 CV, está en venta por 23 850 euros (precios de toda la gama), un precio bajo en relación a su competencia, si bien no el más bajo puesto que un Dacia Duster y un EVO 5 son todavía más baratos (listado comparativo).
Los dos motores de gasolina se pueden pedir con adaptación a GLP, lo que habilita a su propietario a solicitar el distintivo ECO de la DGT; de lo contrario se deberá conformar con la pegatina C. La versión de 148 CV siempre lleva cambio manual y tracción delantera, mientras que la de 163 CV siempre es automática y la tracción es, en opción, en las cuatro ruedas.
El Korando que nosotros probamos —a mediados de 2020, en la época SsangYong— fue la versión de 163 CV con tracción delantera. Nos pareció que el motor suave, con suficiente para mover al Korando con agilidad siempre que estuviera por encima de 2000 rpm y cuyo consumo de carburante era tirando a alto. El tacto de conducción del vehículo era satisfactorio, pero sin ninguna faceta reseñable por la que elegir este coche frente a la competencia (impresiones de conducción).
Al principio del texto hemos dicho que este KGM es el mismo coche que el SsangYong excepto por un par de cosas. Una de ellas es el motor de la versión eléctrica. KGM emplea un proveedor diferente (BYD) y la potencia ahora es de 207 CV, mientras que en el SsangYong era de 190. El par máximo, por el contrario, ha descendido de 360 a 339 Nm (ficha comparativa). En cualquier caso, el incremento de potencia supone una ligera mejora en la aceleración de 0 a 100 km/h (baja de 8,4 a 8,0 segundos), pero no así en la velocidad máxima, pues el limitador sigue ajustado a 156 km/h. Tampoco hay cambios en la batería, de 55,3 kWh útiles, ni en la autonomía, de 340 kilómetros. Siendo así, la prueba del SsangYong Korando eléctrico que publicamos en diciembre de 2023 (pinchar aquí para leerla), sigue vigente, excepto por esa leve mejora en las prestaciones.
El Korando eléctrico, o Korando e-Motion, tiene un precio de partida de 29 900 euros, un valor que le sitúa como uno de los vehículos eléctrico más asequibles de su segmento junto con el MG ZS (listado comparativo).
Como comentamos en las impresiones del interior del Korando e-Motion, el interior del Korando es práctico, poco vistoso, construido con materiales poco lujosos, pero bien encajados. Siguiendo la tendencia actual, hay dos pantallas, una de 12,3 pulgadas para mostrar la instrumentación y una de 9 para el sistema de información y entretenimiento. Este último es compatible con Android Auto y Apple CarPlay (siempre con cable). El espacio en la fila posterior de asientos es grande para las dimensiones exteriores de la carrocería y el maletero, de 423 litros sin importar la versión, se sitúa en la parte media-baja en relación a sus competidores.
Los niveles de equipamiento son tres: Line, Urban Plus y Limited (de menos a más equipado; detalle). Aquí es donde se encuentra el segundo punto de diferenciación con el SsangYong, no porque haya habido un cambio de nombre en los niveles, sino porque dentro de la dotación de serie vienen incluidos los elementos que la Unión Europea impone para todos los vehículos que se venden nuevos desde julio de 2024. Son, entre otros: la frenada de emergencia, el sistema de mantenimiento en el carril, la lectura de señales de tráfico, el detector de fatiga y la detección de obstáculos en la zona posterior.
El KGM Korando se fabrica en Pyeongtaek, una ciudad de Corea del Sur. Está disponible con hasta cinco colores para la carrocería —Dandy Blue, Grand White, Iron Metal, Platinum Grey y Space Black—.