El Jaguar XE es un turismo de cuatro puertas y tracción trasera o total que por tamaño —mide 4,67 m de longitud, 1,85 m de anchura y 1,42 m de altura— se sitúa por debajo del XF y del XJ, las otras dos berlinas que comercializa Jaguar. Es una alternativa a modelos como el Audi A4, el BMW Serie 3, el Lexus IS y el Mercedes-Benz Clase C. 

Del XE destacamos su ligereza en comparación con sus alternativas, su bajo consumo de carburante en las versiones Diesel y que tiene una presentación lujosa y un confort de rodadura elevado. Los motores de gasolina son agradables y potentes; los Diesel son toscos por ruido y vibraciones. Más información en las impresiones de conducción.

El habitáculo es poco espacioso y el maletero es pequeño —su volumen es 450 litros—. Los materiales del interior son de buena calidad y los asientos delanteros de las unidades probadas dan mucho confort. Más información en las impresiones del interior.

En febrero de 2017, Jaguar hace cambios en la gama de motores, que se resumen en tres puntos: Primero, añade un motor Diesel de 240 CV; segundo, reemplaza los motores de gasolina de 200 y 240 CV por otros de 200 y 250 CV con la misma cilindrada, pero con un bloque de cilindros diferente y unos consumos homologados inferiores; y, tercero, sustituye el motor de gasolina de 340 CV con uno de 381. De esta manera, la gama queda conformada por tres motores de tipo Diesel —de 163, 180 y 240 CV— y otros tres de gasolina —de 200, 250 y 381 CV—. 

Todos están sobrealimentados, tienen cuatro cilindros y dos litros de cilindrada, excepto el de mayor potencia de gasolina que es de seis cilindros y tiene tres litros de cilindrada. El cambio puede ser manual (de serie y únicamente disponible para los Diesel de 163 y 180 CV) o automático de 8 velocidades. La tracción es en las ruedas traseras, aunque en algunas versiones es posible pedir un sistema de tracción a las cuatro ruedas (es de serie con el motor Diesel de 240 CV y de gasolina de 381 CV).

El Jaguar XE está en venta por 37 860 euros, un precio similar al de un Audi A4 2.0 TDI y un BMW 320d, e inferior al de un Mercedes-Benz C 220 d (ficha comparativa). El equipamiento del XE es un poco más abundante que el de todas las alternativas citadas. Para instalar muchas de las opciones posibles hay que recurrir a paquetes. Curiosamente, las versiones Diesel de 163 y 180 CV cuestan lo mismo (ficha comparativa del XE 2.0 D 163 CV Pure y XE 2.0 D 180 CV Pure). Jaguar afirma que en España la versión de 163 CV está destinada a flotas.

Hemos probado durante una semana la versión de 180 CV con cambio automático y suspensión deportiva. Durante la presentación a la prensa también hemos probado el Diesel de 163 CV y los de gasolina 2.0 de 240 CV y 3.0 de 340 CV (estos dos últimos se dejan de comercializar en febrero de 2017). Los Diesel gastan poco carburante, pero tienen un funcionamiento poco refinado. Suenan de forma notable al ralentí, al acelerar y también al circular despacio sin apenas pisar el acelerador. Aquí pueden verse unos vídeos que hemos grabado en la presentación donde se aprecia el ruido y las vibraciones que transmite a la palanca de cambios. Los de gasolina tienen un funcionamiento mucho más agradable, pero su consumo es sensiblemente más elevado. De estos y otros aspectos hay más información en las impresiones de conducción.

El sistema de tracción total es de tipo conectable. El vehículo circula normalmente impulsado por las ruedas traseras y cuando el sistema detecta una falta de adherencia, transfiere —dependiendo de la situación y de forma automática— una determinada cantidad de par a las delanteras. El XE con tracción integral también puede incorporar como opción un sistema denominado Adaptive Surface Response, derivado del Terrain Response que utiliza Land Rover, que adapta el acelerador, la transmisión y el control dinámico de estabilidad a las condiciones del asfalto.  

Hay cinco niveles de equipamiento: Pure, R-Sport, Prestige, Portfolio y S (este último únicamente disponible con el motor de gasolina de 381 CV). Elementos de la carrocería como los parachoques, los alerones y las molduras cambian en función del nivel de equipamiento. Las llantas de serie son de 17 pulgadas y, en opción, pueden ser de 18 o 19 pulgadas.

Entre el equipamiento posible hay un sistema de información proyectada sobre el parabrisas que funciona mediante una fuente de luz láser y se visualiza en color. Según Jaguar este sistema ocupa menos y es más ligero que uno convencional. Después de probarlo no nos ha convencido. Los reflejos que produce en el parabrisas no compensan y las imágenes no son nítidas ni de fácil lectura. No lo recomendaría ni como opción sin coste adicional. Otras soluciones que conocemos, sin fuente de luz láser, proporcionan mayor claridad de lectura y dan menos reflejos en el parabrisas.

El XE utiliza un sistema de cámara estereoscópica —como el que usa Mercedes-Benz en el Clase S, por ejemplo— para reconocer algunas señales de tráfico, detectar las líneas que delimitan el carril y medir con precisión la distancia a la que se encuentra en vehículo precedente. Esta cámara forma parte del sistema que permite el funcionamiento del aviso por abandono involuntario del carril y del sistema de frenada de emergencia, además de informar al conductor de los límites de velocidad.

Otros sistemas de ayuda a la conducción disponibles son el aviso de vehículos en el ángulo muerto de los retrovisores, el de detección de vehículos en movimiento al retroceder, la cámara de aparcamiento trasera o las cámaras de visión periférica, un sistema de aparcamiento semiautomático (el coche gira únicamente el volante y el conductor debe actuar sobre el acelerador y el freno). El sistema de reconocimiento de señales nos ha parecido que funciona muy bien y también el reconocimiento de líneas de carril. Cuando el conductor las sobrepasa vibra ligeramente el volante. Los coches que hemos conducido no llevaban instalado el programador adaptativo de velocidad.

Algunos elementos opcionales de equipamiento son los faros de xenón, las luces adaptativas con iluminación en curvas, el parabrisas térmico, el acceso y arranque sin llave, los asientos delanteros y traseros térmicos o el precalefactor del habitáculo con control remoto. Muchas opciones forman parte de paquetes de equipamiento. No existen, por el momento, faros con ledes para las luces cortas o largas (las luces diurnas con este dispositivo son opcionales).

Hay dos sistemas multimedia: InControl Touch e InControl Touch Pro. Ambos utilizan pantallas táctiles en color, de 8,0 y 10,2 pulgadas respectivamente. Los mapas del navegador están almacenados en una tarjeta SD en el primero y en un disco duro de 60 GB en el segundo. Se puede reproducir audio mediante una conexión Bluetooth, existe una toma USB y el sistema también funciona como punto de acceso wifi al que conectar diversos dispositivos (teléfonos, tabletas y similares). Estos sistemas multimedia permiten controlar desde un móvil diversas funciones del coche y, desde el coche, manejar algunas aplicaciones instaladas en el móvil (con sistemas operativos Android e iOS). El sistema InControl Touch Pro tiene un navegador que es capaz de guiar al conductor aunque se haya perdido la señal GPS.  

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