Infiniti Q60 (2017) | Información general
El Q60 es un cupé de dos puertas, cuatro plazas y 4,69 metros de longitud que guarda una gran similitud con el Q60 Concept, un prototipo que Infiniti presentó a principios del año 2015. Sustituye al Q60 2008 y es una alternativa al Audi A5 Coupé, el BMW Serie 4 Coupé, el Mercedes-Benz Clase C Coupé y el Lexus RC. Infiniti ha anunciado en marzo de 2019 que abandonará Europa en marzo de 2020. Hasta entonces dice que prestará servicio a sus clientes y, posteriormente, dice que garantizará la atención pero que comunicará los detalles en el transcurso del año que hay de plazo.
El Q60 está en venta con dos motores de gasolina: uno de cuatro cilindros, 2,0 litros de cilindrada y 211 CV y otro de seis cilindros, 3,0 litros de cilindrada y 405 CV. Ambos están sobrealimentados mediante turbocompresor (uno para el de cuatro cilindros y dos para el de seis) y van asociados a una caja de cambios automática de siete velocidades. La tracción es en las ruedas traseras en la versión de 211 CV y total en la de 405 CV (fichas técnicas).
Con el motor de menor potencia está en venta desde 45 987 €, por lo que es más caro que un BMW 420i Coupé o un Audi A5 Coupé 2.0 TFSI y ligeramente más barato que un Mercedes-Benz C 200 Coupé. Todos ellos tienen un motor de potencia inferior, pero sus prestaciones son muy similares y su consumo de combustible, más reducido (ficha técnica comparativa). La versión con el motor de 405 CV, está en un termino medio entre un BMW M4 de 431 CV y un Ford Mustang de 421 CV (ficha comparativa).
El Q60 es un vehículo especialmente adecuado para circular por carreteras amplias, de tipo autopista o autovía, porque lo hace con mucha suavidad y silencio y porque proporciona un nivel de confort correcto a sus pasajeros (aunque inferior al de algunos de sus rivales). Como tiene motores potentes, también permite circular rápido por vías con muchas curvas, pero no es un coche que invite a ello porque la dirección tiene un tacto muy artificial y porque sus reacciones no son demasiado ágiles. El motor de la versión 2.0 de 211 CV tiene un funcionamiento muy suave y da una aceleración buena, suficiente como para no echar en falta más potencia en adelantamientos o en ascensos de pendientes pronunciadas —incluso con el coche cargado—. Hay más información sobre estos y otros detalles en el apartado Impresiones de conducción.
El habitáculo no es demasiado espacioso, pero permite acomodar con holgura a dos personas de hasta 195 centímetros de altura en las plazas delanteras. En las traseras, como es habitual en coches con carrocería de tipo cupé, solo irán cómodos niños o personas de poca estatura (mediciones del interior). El acceso y la salida hacia estas plazas tampoco es demasiado cómodo porque el hueco que liberan las puertas y los asientos delanteros es pequeño e irregular. La calidad de los materiales con los que está fabricado es aparentemente muy buena, y además todas las piezas ajustan perfectamente entre sí. Como en el Q50, en la consola hay dos pantallas que muestran todas las funciones del sistema multimedia (al que Infinifi denomina «InTouch»). La pantalla superior es un poco más grande que la inferior (8 pulgadas frente a 7), pero da peor calidad de imagen. Hay más información sobre estos aspectos en el apartado de Imprsiones del interior.
La versión de 211 CV se puede pedir con dos niveles de equipamiento —Premium y Sport— y la de 405 CV con uno solo —Sport—. El más sencillo incluye de serie elementos como la alerta por cambio involuntario de carril, la cámara trasera de ayuda al estacionamiento, los faros de ledes para todas las funciones, el sistema de reconocimiento de señales de tráfico, la tapicería de piel, los asientos delanteros con ajustes eléctricos y calefacción (el del conductor, además, con dos memorias de posición) y el sistema de frenada de emergencia en ciudad con detección de peatones.
El equipamiento Sport añade a todo lo anterior unas levas en el volante (que se echan en falta en el Premium si se conduce de forma rápida por carretera de curvas), una dirección diferente con desmultiplicación variable, unos neumáticos más estrechos (según nos cuenta Infiniti, para aumentar la deportividad) montados en llantas de la misma medida que el Premium; y un programa adicional de conducción, llamado Sport+ (el resto son Standard, Snow, Eco y Sport). Adicionalmente, para el Q60 de 405 CV existe una suspensión con amortiguadores controlados electronicamente («Dynamic Digital») con varios niveles de ajuste.
El Q60 no puede tener, ni de manera opcional, elementos de seguridad y ayuda a la conducción muy habituales en vehículos de este precio e incluso menor. Es el caso de el programador de velocidad activo, el detector de vehículos en el ángulo muerto o el sistema de aparcamiento semi automático.
De acuerdo con nuestro comparador de seguros, el precio de una póliza a todo riesgo sin franquicia para un Q60 2.0 de 211 CV asociado al nivel de equipamiento Sport tiene un precio anual mínimo de 416 euros. Es una póliza de la compañía Nuez Seguros con una relación entre calidad y precio normal (6,91 puntos sobre 10 posibles). El tomador de este supuesto es un hombre de 45 años que reside en La Coruña, recorre unos 15 000 kilómetros al año y aparca en un garaje individual.