El habitáculo del Tipo SW tiene prácticamente el mismo espacio que el del cinco puertas en ambas filas de asientos, aunque el acceso a las plazas posteriores es un poco más cómodo en la variante familiar porque las puertas —que se abren 80 grados— tienen unas formas más regulares y dejan un hueco mayor para pasar. En la prueba del Tipo de cinco puertas hay más información del habitáculo que es válida para la del SW dado que son similares.
Frente a sus principales rivales, las plazas traseras del Tipo SW sobresalen por el espacio disponible para las piernas, que es incluso mayor que el de algunos modelos de mayor tamaño.
El maletero tiene más soluciones que el del Tipo 5p y que el del Tipo 4p para llevar la carga organizada. El piso se puede colocar a dos alturas distintas (dejan 42 o 47 cm de distancia a la cortinilla cubreequipaje), de manera que divide el maletero en dos zonas diferenciadas (la principal y el doble fondo). En la versión de gas, en el hueco de la rueda de repuesto está colocado el depósito de este combustible (imagen).
Además, en cada lateral hay dos pequeños tabiques de plástico diseñados para guardar objetos que se pueden eliminar para ganar unos centímetros de anchura (imagen e imagen). Al igual que el Tipo 5p, también cuenta con cuatro ganchos metálicos, dos plafones de iluminación (uno en el Tipo 5p) y una toma de 12V (imagen).
La capacidad según el método VDA es de 550 litros. Es un volumen grande, aunque los hay que ofrecen, todavía, más espacio. Son el Volkswagen Golf Variant (605 l), el Hyundai i30 CW (602 l), un SEAT León ST (587 l) y el Dacia Logan MCV (573 l). En este listado aparecen, ordenados por capacidad del maletero, los turismos familiares de entre 4,45 y 4,65 m (el Tipo SW mide 4,57 m) de entre 85 y 135 CV.
El volumen del maletero se puede ampliar abatiendo los respaldos y banquetas de las plazas posteriores. La superficie resultante no es plana (imagen).