El motor Diesel Multijet II, de 1956 cm³, que lleva el Fiat Freemont es el mismo que utiliza Alfa Romeo en el Giulietta, en sus versiones de 140 y 170 CV. En el Freemont da las mismas potencias. Es un evolución del motor Multijet que tiene el Alfa Romeo 159, que da 136 CV en su versión de menor potencia y 170 CV en la más potente —este modelo dejó de comercializarse a principios de 2012—. Se trata prácticamente del mismo motor, con pequeñas variaciones en la inyección.
En la información suministrada por Fiat se asegura que, respecto a la primera generación de los motores Multijet, cambia el sistema de alimentación con inyectores más rápidos y capaces de efectuar inyecciones múltiples muy seguidas (gráfico). En concreto, se afirma que es posible efectuar una inyección principal de combustible en varias fases diferentes y anticipar las siguientes. El sistema Multijet II es capaz de gestionar hasta 8 inyecciones por ciclo, gracias a la nueva servoválvula con obturador equilibrado, brindando mayor velocidad, flexibilidad y precisión en las distintas fases de funcionamiento.
Según Roberto Corradi, ingeniero de Desarrollo del Fiat Freemont, la reducción de óxidos de nitrógeno con relación a la versión anterior de este motor es del 30%, en igualdad de condiciones. La máxima presión de inyección es de 1600 bar.
Su funcionamiento suave, además del buen filtrado y de la inyección múltiple, se debe también a la utilización de una mariposa para regular el aire de admisión, un elemento que no es frecuente en los motores Diesel. Me decía Corradi: «al limitar la entrada de aire a bajas revoluciones, la combustión es menos eficiente, pero ganamos en suavidad».
También hay pequeñas mariposas, justo antes de uno de los dos orificios de entrada de aire al cilindro, que permite cerrar una de las entradas para que el aire gane velocidad en la admisión.
El Dodge Journey, el modelo en el que se basa el Freemont, tenía un motor de origen Volkswagen con cuatro soportes, mientras que el del Grupo Fiat tiene tres soportes. «El buen equilibrio de estos tres soportes, su posición exacta, permite compensar en parte las vibraciones propias de los motores Diesel. Una de las operaciones que nos ha costado más trabajo ha sido la realización del bastidor auxiliar que nos ha permitido encajar el motor Fiat en este coche, con las diferentes medidas para obtener un elevado confort de marcha». Entre estas medidas también se incluyen nuevos materiales fonoabsorbentes entre el vano motor y el habitáculo.
El trabajo sobre las suspensiones ha sido escaso según Corradi. Se han montado muelles más rígidos que en el Journey, amortiguadores más duros, se han modificado las cotas de dirección y suspensión y se han montado casquillos diferentes.
Como el Freemont deriva del Journey, ambos tienen la plataforma GS de Mitsubishi. Ésta la llevan varios modelos de Mitsubishi y del Grupo Chrysler —Chrysler, Jeep y Dodge— desde 2005, como el Mitsubishi Outlader, el Mitsubishi ASX, el Chrysler Sebring, el Jeep Compass, el Jeep Patriot o el Dodge Caliber.