El Evanda tiene un habitáculo grande, pero tampoco resalta por su relación entre tamaño de carrocería y habitabilidad interior. El aprovechamiento de espacio es mucho mejor, por ejemplo, en un Citroën C5. La anchura interior y el espacio para las piernas son las cotas más destacables en la berlina de Daewoo, que sin embargo, tiene una altura libre al techo algo escasa en las plazas traseras. Ver cuadro de mediciones. Detrás hay sitio para tres personas muy justas o para dos pasajeros muy amplios. Como el resto de las plazas, la central trasera cuenta con cinturón de seguridad de tres puntos y reposacabezas, pero la forma del respaldo ofrece poco apoyo al pasajero que vaya sentado y en el suelo hay un abultamiento longitudinal (más ancho que alto) que resta espacio para situar los pies.
El asiento trasero tiene por lo tanto una forma más apta para acomodar a dos pasajeros. En tal caso, el respaldo parece muy cómodo por su diseño, altura e inclinación, pero la banqueta tiene un mullido que parece un poco blando. En la parte central está un reposabrazos escamoteable que al bajarlo enseña un reposalatas doble que lleva integrado y una guantera con tapa.
El respaldo del asiento trasero es abatible en partes desiguales (50/30). Como sólo se abate el respaldo y no la banqueta, queda un fondo de carga ligeramente inclinado, aunque su utilidad principal es para poder transportar objetos largos. El maletero del Evanda tiene 420 litros de capacidad (norma VDA), poco para un coche de su tamaño (sus principales competidores tienen entre 450 y 500 litros). Las columnas de suspensión traseras restan mucho espacio al maletero y dejan un contorno muy poco uniforme. Dentro del maletero se pueden colocar objetos de hasta 100 cm de largo, 155 cm de ancho y 50 cm de alto, pero en su zona más estrecha sólo hay 81 cm y en la zona más baja sólo encontramos 37 cm de altura.
El puesto de conducción del Evanda CDX tiene asiento regulable eléctricamente (inclinación del respaldo y distancia, altura e inclinación de la banqueta). Manualmente también es regulable el apoyo lumbar y la altura e inclinación del reposacabezas. Es fácil encontrar una postura cómoda, aunque el volante (sólo regulable en altura) se puede quedar un poco lejos del conductor en la parte superior. El asiento parece cómodo, pero tiene un mullido muy blando en la banqueta y escasa sujeción lateral. También me ha parecido que se queda un poco alto en su posición más baja y esto hace, a su vez, que la columna de dirección parezca que está un poco baja (incluso podemos llegar a golpearla con las rodillas en alguna circunstancia).
Todos los mandos se encuentran a mano, el ajuste de los distintos elementos es correcto y la presentación interior me ha parecido próxima a la que tienen los modelos de su categoría, aunque se emplean algunos plásticos duros en la parte baja del salpicadero y las puertas que son de escasa calidad aparente. También me ha parecido mejorable el remate de los plásticos utilizados en la guantera y en las bolsas de las puertas (algo ásperos, aunque no cortantes). Por otro lado, tiene detalles que llaman la atención por su buena factura, como los tiradores de las puertas acabados en plástico pintado, los mandos de apertura cromados, el buen remate de los parasoles delanteros o la antena integrada en la luna trasera.
El Evanda CDX tiene un equipamiento que lleva de serie elementos que en otros modelos son opción, como el climatizador automático, equipo de radio con cargador de cinco CD's y seis altavoces, tapicería de cuero, espejos retrovisores exteriores con reglaje eléctrico y plegado automático, inserciones de símil madera en puertas y salpicadero, retrovisor interior antideslumbrante, volante forrado en cuero con mandos de control del equipo de sonido o asientos delanteros calefactados.
Sin embargo, no están disponibles otros elementos que sí se ofrecen (de serie o en opción) en modelos de su categoría, como la conexión automática de faros y limpiaparabrisas, el navegador, ordenador de viaje, teléfono integrado, airbag de cabeza, programador de velocidad, faros de xenón o el control de estabilidad.