Citroën C3 (2002) | Carrocería y bastidor
El estilo del C3 no tiene nada que ver con lo visto últimamente en Citroën. Es un coche original, con rasgos y proporciones inusuales.
Citroën sólo ha mostrado de momento la carrocería de cinco puertas. Esta carrocería mide 3,85 m de longitud, es decir, está entre los más grandes utilitarios modernos; las diferencias con relación a los que lo son aún más no son grandes. De hecho, y por sus proporciones, el Citroën C3 puede ser uno de los más amplios. En primer lugar es alto (1,52 m), lo que hace posible diseñar los asientos para que los pasajeros vayan más bien incorporados y no necesiten tanto espacio longitudinal como si fueran más recostados (postura de silla o de sillón). En segundo lugar, también es ancho para lo que es habitual en coches de esta longitud. Aún no hemos medido el C3, pero Citroën declara que es uno de los coches más espaciosos de su clase. Un dato positivo es que el asiento delantero tiene un recorrido máximo de 230 mm, un poco más de lo normal.
El maletero es muy amplio, tiene 305 litros de volumen (según sistema VDA). Gran parte de ese volumen se debe a la altura libre: 59 cm; esta medida es superior a lo común en coches de cualquier tipo y tamaño. Hay tanta altura libre, en parte, porque el suelo del maletero queda muy bajo. La distancia entre el suelo del maletero y el borde de carga es grande y, si se abaten los respaldos traseros, queda un escalón entre el plano del suelo y el de los respaldos abatidos.
Citroën ha diseñado un suplemento que llama «Moduboard», que puede tener distintas funciones. Colocado sobre el suelo del maletero, queda al ras de los respaldos abatidos, sirve como cajas independientes o puede sujetar objetos para que no se desplacen lateralmente. Está dividido en dos, de forma que coincide exactamente con la anchura de cada uno de los respaldos abatibles. Otras características del maletero son que la bandeja puede soportar mucho peso y que tiene pequeñas guanteras laterales, cerca de los pasos de rueda.
El C3 no es la versión Citroën del Peugeot 206, aunque puede haber algunos elementos en común entre ambos. Como cualquier coche moderno, parte del bastidor está hecho con acero de alta resistencia; en este caso la proporción es el 41 por ciento. La suspensión delantera es McPherson; para la trasera, Citroën ha abandonado el sistema de rueda tirada que usaba normalmente. Ahora tiene un sistema de rueda tirada con eje torsional y muelles helicoidales, semejante al del Peugeot 307. No es un coche particularmente pesado, comparado con otros utilitarios modernos.
La dirección tiene asistencia eléctrica variable en función de la velocidad de forma continua. Es decir, no hay dos grados de asistencia, sino que la fuerza que hay que hacer sobre el volante decrece proporcionalmente con la velocidad. Casi todas las versiones tienen discos delante y tambores detrás, salvo el 1.6 16v y el HDi 16v, que tienen discos también detrás. Tiene repartidor electrónico de frenada y servofreno de emergencia.