El Cadillac BLS Wagon es la versión con carrocería familiar del BLS de cuatro puertas.
Está a la venta en España desde 31.490 € de la versión básica hasta los 47.490 € que cuesta la versión más equipada (todos los precios). En todas sus versiones, el BLS Wagon es 1.500 € más caro que la versión de cuatro puertas.
Es el único Cadillac —junto con el BLS de cuatro puertas— que puede tener motores Diesel, que son de 150 y 180 CV de potencia. El Cadillac BLS más barato con motor Diesel de 150 CV cuesta 32.840 €.
Con el motor Diesel de 150 CV, el BLS Wagon tiene unos datos de prestaciones y consumo normales para su potencia (tabla comparativa). Con el motor Diesel de 180 CV los datos son comparativamente peores, porque tiene un consumo superior y unas prestaciones inferiores a la media (tabla comparativa). Un Saab 9-3 con el mismo motor de 180 CV tiene mejor rendimiento (prueba de este modelo).
El BLS Wagon mide 4,72 m de largo (4 cm más que el cuatro puertas), 2,04 m de ancho (incluyendo los espejos retrovisores) y 1,54 m de alto (con los raíles y la antena). El maletero mide 419 l (hasta la cortinilla que lo cubre), con un compartimento adicional de 12 l bajo el piso del maletero. Es un maletero pequeño para una berlina familiar de esta longitud.
El BLS es un modelo mecánicamente semejante a un Opel Vectra o un Saab 9-3; se fabrica en las mismas instalaciones que el 9-3 y con la misma gama de motores. Los motores de gasolina del BLS son dos variantes de un 2,0 l, con 175 y 209 CV de potencia, y un V6 de 2,8 l y 256 CV de potencia.
Los dos Diesel tienen cuatro cilindros y 1,9 l de cilindrada.
Además, hay una variante de gasolina (también para el cuatro puertas) que puede utilizar como carburante E85 (85 por ciento etanol y 15 por ciento gasolina). Estas variantes se denominan «Flexpower» y tienen 200 CV de potencia.
Según el motor, puede tener un cambio manual de seis velocidades, o uno automático de cinco o seis marchas.
Hay cuatro versiones según el equipamiento: «Business», «Elegance», «Sport» y «Sport Luxury». No están disponibles todas las combinaciones de motor y equipamiento.
La versión del BLS con carrocería de cuatro puertas (todavía no hemos probado el Wagon) nos dejó la impresión de tener un nivel de calidad superior a la mayor parte de los coches de este tamaño. Los materiales de recubrimiento son ricos y el ajuste es bueno. Este Cadillac, fabricado en Europa, es superior en este sentido a los Cadillac fabricados en EE.UU. Algunos elementos interiores son los mismos que los de un Saab 9-3, como la palanca del freno de mano, las de los intermitentes o algunos mandos del salpicadero.
Todo el salpicadero está hecho con plástico y espuma, un material que muchas marcas reservan para las partes más visibles. También es de este material el guarnecido de las puertas, incluso en su parte más baja, que normalmente es de plástico duro y poco tratado. La parte central de la consola, entre los dos asientos, es de un plástico duro pero con un tratamiento superficial que le da buen aspecto. Los marcos con aspecto metálico que hay en el salpicadero son de plástico.
El puesto de conducción es bueno a excepción de los asientos. Si están tapizados en cuero resultan muy resbaladizos. La banqueta es más bien corta y por ello da poco apoyo en los muslos, lo que hace recomendable ajustar la inclinación de la banqueta para que la parte delantera quede un poco más alta. El respaldo no tiene una forma envolvente y deja muy suelta la zona dorsal.
Delante no hay problemas de espacio para personas de estaturas muy distintas. En las plazas traseras del BLS de cuatro puertas, falta espacio longitudinal para adultos de talla normal: este dato no es distinto en el BLS Wagon (porque tienen la misma distancia entre ejes). La forma del techo del BLS Wagon sí puede favorecer que haya más espacio libre para la cabeza de los ocupantes traseros que en el cuatro puertas, pero aún no lo hemos medido.
Al menos en la carrocería de cuatro puertas, el motor Diesel de 150 CV tiene la misma respuesta que en otros modelos que lo llevan (por ejemplo, el Alfa Romeo GT), pero quizá con una suavidad algo mayor y menos ruido al ralentí. Es un motor apropiado para sostener una velocidad de crucero alta y da la capacidad de aceleración que cabe esperar en un coche como éste.
El motor V6 de 256 CV tiene mucha fuerza y una respuesta rápida al acelerador. Es un motor muy agradable porque, además de que tiene una buena reserva de aceleración, es suave y silencioso. La caja de cambios automática de seis velocidades que puede tener selecciona marchas con suavidad y, normalmente, lleva al coche en el régimen adecuado. Como otras cajas de este tipo, su principal carencia es lo que tarda en responder a una necesidad repentina de aceleración. Esta caja tiene mandos en el volante de tipo secuencial, pero para utilizarlos, previamente hay que seleccionar el modo manual con la palanca que hay entre los asientos. Esto impide que se pueda seleccionar rápidamente una marcha corta en cualquier momento. Además, los mandos del volante (izquierdo para reducir, derecho para aumentar) son de los que hay que empujar, menos cómodos que aquellos de los que hay que tirar.