El BMW X5 M es la versión más deportiva de la gama X5. Es, junto al X6 M, el primer BMW M con tracción total. También hay versiones «M» de la Serie 3 (M3 Berlina, M3 Coupé y M3 Cabrio), la Serie 5 (M5 y M5 Touring) y la Serie 6 (M6).
Tiene un motor de gasolina con ocho cilindros en V y 4,4 litros que da 555 CV. Tiene inyección directa y dos turbocompresores de doble entrada (más información del motor). Va asociado a una caja de cambios automática de seis velocidades («M Sport-Automatic»).
El X5 M acelera de 0 a 100 km/h en 4,7 s y tiene una velocidad máxima limitada a 250 km/h (275 km/h con el paquete «Driver M», que incluye un curso de conducción en circuito). El consumo medio homologado es 13,9 l/100 km.
Hasta que se comercialicen las versiones «M» del X5 y del X6, el todoterreno más potente a la venta en España es el Porsche Cayenne Turbo S (549 CV). Es 0,1 s más lento acelerando de 0 a 100 km/h que ambos BMW (los dos tienen las mismas prestaciones) y su consumo medio es superior (14,9 l/100 km).
El X5 M tiene un diferencial trasero especial («Dynamic Performance Control») que permite variar la fuerza que realizan las dos ruedas traseras de forma independiente tanto en la fase de aceleración como en la de retención. La tracción es permanente a las cuatro ruedas («xDrive»), como en cualquier otro X5.
Tiene una suspensión específica y su carrocería va 10 mm más cerca del suelo que la del resto de versiones de la gama X5. En el eje trasero los muelles son neumáticos para mantener la altura constante. La amortiguación es variable controlada electrónicamente («EDC») y las barras estabilizadoras son activas.
El control de estabilidad («DSC») puede desconectarse completamente o de forma parcial activando el modo «MDM» («M Dynamic Mode»). Cuando se selecciona, el control de estabilidad interviene más tarde para corregir la trayectoria y el sistema de tracción total modifica su funcionamiento aumentado la fuerza que llega a las ruedas traseras.
El X5 M lleva dirección «Servotronic» con asistencia variable en función de la velocidad. Es posible seleccionar manualmente el modo de menor asistencia pulsando la tecla «M Drive».
Además de poder regular la dureza de la suspensión, la asistencia de la dirección y el funcionamiento del control de estabilidad, también es posible ajustar la respuesta del motor y de la caja de cambios desde el menú «Power». Hay dos programas disponibles: «Sport» y «Efficient». En este último, los cambios de marcha se producen a un régimen de giro del motor más bajo para intentar reducir el consumo de combustible.
El BMW X5 M lleva llantas de aleación de 20'', con neumáticos capaces de circular con baja presión o pinchados durante unos kilómetros («Run Flat») de distinta medida en cada eje: 275/40 delante y 315/35 detrás. Los frenos de disco ventilados son de pinzas fijas de cuatro pistones en el eje delantero (395 mm) y de pinza flotante en el trasero (385 mm).
Caja de cambios «M Sport-Automatic»
La caja de cambios tiene seis relaciones y permite seleccionar manualmente las marchas desde la palanca o las levas situadas tras el volante. Hay tres modos de funcionamiento: «D», «S» y «M».
El «M» es el programa más deportivo. En éste, el cambio no selecciona una marcha superior cuando se alcanza el régimen máximo de giro del motor (algo que sí ocurre en los otros dos modos). Además, el paso de una relación a otra se produce con mayor rapidez ya que se corta la alimentación y el encendido de uno o más cilindros en el momento del cambio para disminuir el par motor.
Con el programa «M» está disponible la función de salida rápida («Launch Control») que gestiona diversos parámetros del coche como la caja de cambios y el control de tracción para conseguir la máxima aceleración saliendo desde parado.
Para activar esta función es necesario tener el coche parado y colocar la palanca del cambio en la posición «M» o «S». Después hay que seleccionar el programa «Sport» del menú «Power» y desconectar el control de estabilidad total o parcialmente (modo «M Dynamic Mode»). A continuación hay que seleccionar la primera marcha mientras se pisan los pedales del freno y el acelerador (éste, como mínimo un 60% del recorrido del pedal). Entonces, una bandera a cuadros en el cuadro de instrumentos indica que el coche está preparado; basta con dejar de frenar para que salga con la mayor rapidez posible.
Diseño, habitáculo y equipamiento
El X5 M se diferencia de los otros modelos de la gama X5 por las entradas de aire frontales de mayor tamaño, el capó de diferente diseño y los paragolpes. Los faros también son distintos (son los mismos que los del X6).
Según BMW, las entradas de aire de la parte delantera han sido diseñadas en función de la refrigeración que necesitan tanto el motor como los frenos. Este es el motivo por el que el X5 M no tiene faros antiniebla.
Los intermitentes laterales, que llevan integrados el logotipo «M», van ubicados dentro de unas pequeñas hendiduras en la chapa. Las molduras de la carrocería que en el resto de versiones del X5 son de color negro mate, en el X5 M van pintadas en el mismo color de la carrocería. Lleva dos salidas de escape dobles, que van situadas en los extremos del paragolpes posterior.
El habitáculo es similar al del resto de X5 aunque tiene ciertos elementos específicos como los asientos de diseño deportivo con el logotipo «M» en los reposacabezas, el reposapiés para el conductor, los embellecedores en los umbrales de las puertas, el volante de piel y el cuadro de instrumentos con iluminación en color blanco y cuentarrevoluciones con zona roja variable (cuando el motor está frío comienza antes y, según va alcanzando la temperatura óptima de funcionamiento, se desplaza hacia un número de revoluciones mayor). Además, lleva apoyos acolchados para las rodillas en los laterales de la consola central.
La tapicería es de piel, igual que el salpicadero, el apoyabrazos central, los recubrimientos superiores de las puertas y la moldura de las manecillas de las puertas. La piel puede ser de color negro, «silverstone» o beige bambú. Todos estos elementos también están disponibles en piel Merino de color canela, naranja, negro, «silverstone» o beige bambú.
Desde el mando «iDrive» se pueden controlar no sólo el navegador, el equipo de sonido, el climatizador y el teléfono como en otros BMW sino también los ajustes de la amortiguación variable electrónica «EDC», de la dirección asistida «Servotronic», del control de estabilidad «DSC», del menú «Power» y, si lo lleva, el sistema «Head-Up Display» de información proyectada en el parabrisas.
El X5 M tiene de serie programador de velocidad con función de frenado, faros de doble xenón con luz de cruce autoregulable y luz diurna de diodos luminosos (en forma de aro), seis airbags, reposacabezas activos, sensores de aparcamiento delanteros y traseros (en opción pueden ir asociados a una cámara de marcha atrás) y climatizador de dos zonas. También lleva luces y limpiaparabrisas automáticos y asientos con regulación eléctrica.
El equipamiento se puede completar con elementos opcionales como un climatizador de cuatro zonas, diversos equipos de sonido y navegación, asientos de piel con ventilación, techo panorámico de cristal o luces automáticas en curva (ficha de equipamiento). Además, puede tener los sistemas «BMW Assist» de llamadas de emergencia y localización automática del vehículo y «BMW Connected Drive» que permite ponerse en contacto con el centro de llamadas de BMW para bloquear o desbloquear las puertas en caso necesario, por ejemplo si se ha cerrado el coche con las llaves dentro (este dispositivo no estará disponible en el momento inicial de comercialización del X5 M).