El BMW ActiveHybrid 5 es un vehículo con un funcionamiento extraordinariamente suave, con una gran capacidad de aceleración y con un consumo de carburante que puede ser considerado muy bajo para su potencia si se conduce con moderación.

Es un coche muy rápido y que acelera muy bien desde cualquier régimen y marcha. Según nuestras mediciones puede pasar de 80 a 120 km/h en 3,7 segundos. Es por tanto más rápido que un Lexus GS 450h de 345 CV (4,2 s) y que un BMW 535i de 306 CV (4,1 s). Su capacidad de recuperación es igualmente buena. Por ejemplo, para pasar de 80 a 120 km/h en séptima velocidad necesita una décima de segundo más que un BMW M5 de 560 CV y en octava es el más rápido de todos los vehículos probados en km77.com (tabla de prestaciones).

Una dato que puede ayudar a comprender mejor cuán rápido es este BMW, es que sólo necesita tres décimas de segundo más para acelerar de 80 a 120 km/h que un Porsche Panamera 4S PDK de 400 CV y, además, es mucho más rápido que éste en todas las mediciones de recuperación.

Los resultados de las prestaciones son coherentes con lo que se percibe al volante. La fuerza del motor es muy grande desde cualquier régimen de giro y ésta aumenta de forma lineal a medida que suben las revoluciones —el corte de inyección se produce a 7100 rpm aproximadamente—, lo que permite una conducción fluida, sin brusquedades o aceleraciones indeseadas.

Conducir un coche con una aceleración muy superior a la del resto de vehículos da seguridad. Es complicado encontrar una situación en la que se pueda justificar la adquisición de un vehículo tan potente, en el que una aceleración fuerte implica superar en poco tiempo los límites de velocidad y circular mucho más rápido que el tráfico circundante.

En conducción normal el ruido procedente del motor es siempre muy bajo, ya sea en ciudad o autopista, en fases de aceleración suave o a velocidad sostenida. Cuando se acelera a fondo y se revoluciona, el sonido que emite el motor es, para mi gusto, muy bonito, agudo y resonante.

El consumo que hemos obtenido en nuestra prueba habitual de consumo —trayecto de ida y vuelta de 143,3 km a una velocidad media real de 120 km/h— ha sido 7,4 l/100km. Es una cifra muy buena. Un Lexus GS 450h necesita 7,6 l/100 km, mientras que un BMW 535i utiliza 9,1 l/100 km (todos estos valores han sido corregidos teniendo en cuenta el error de los medidores de consumo de cada vehículo).

Este resultado es más sorprendente cuando lo comparamos con vehículos Diesel de menor potencia pero de similar tamaño. Por ejemplo, un BMW 520d Touring de 184 CV con cambio automático de 8 velocidades consumió en ese mismo trayecto 6,7 l/100 km —en su momento calificamos esta cifra como baja—y un Mercedes-Benz E250 CDI Estate de 204 CV gastó 7,2 l/100 km.

No destaca en la capacidad de frenado, ya que ha necesitado 54,9 metros para detenerse completamente desde una velocidad de 120 km/h. Es uno de los peores resultados registrados para vehículos de tamaño similar, pero parece acorde con los obtenidos por otros BMW Serie 5 que hemos probado. El BMW 535i y el 520d Touring necesitaron 53,3 y 55,2 metros respectivamente.

Esta relativa falta de potencia de frenado puede deberse a tres motivos: al sistema de frenos, a la masa y a los neumáticos. El sistema de frenos está compuesto por unos discos del mismo tamaño que los del 535i —348 mm delante y 345 mm detrás, todos ventilados—, pero el ActiveHybrid 5 tiene una masa 150 kg superior a la de éste; los neumáticos que tenía montados eran GoodYear Excellence RunFlat de medida 225/55 R17.

Modos de conducción

A la izquierda del selector del cambio de marchas hay un botón que permite elegir entre diferentes modos de conducción —varían la respuesta del acelerador, de la dirección y de la suspensión—. En total hay cinco posibilidades: «Sport+», «Sport», «Comfort», «Comfort+» y «ECO PRO» (en el mismo orden en que están dispuestas).

«Sport+» y «Sport» son muy parecidos. En ellos la respuesta del motor al pedal del acelerador es instantánea y la dirección y la suspensión se endurecen. La principal diferencia radica en que el primero desconecta el control de tracción y hace que el control de estabilidad actué más tarde, lo que permite una conducción deportiva más libre. Son los modos de conducción más apropiados para circular con rapidez por carreteras de curvas porque la precisión y la confianza que dan al conductor es muy alta. En la unidad que hemos probado —no sabemos si sucederá así en todas— la temperatura del aceite del motor subió hasta el umbral de alarma en más de una ocasión; en ese momento la potencia del motor se reduce electrónicamente para ayudar a su refrigeración. Eso ocurrió haciendo un uso muy exigente del motor (aceleraciones muy intensas y muy frecuentes).

Entre el modo «Comfort» y el «Comfort+» tampoco hay grandes diferencias. Ambos son aptos para una conducción tranquila y sosegada porque la respuesta del motor al pedal del acelerador se suaviza y resulta menos directa que en los modos «Sport+» y «Sport». Además la suspensión, así como la dirección, se vuelven más blandas, y la absorción de los baches e irregularidades del asfalto es más suave. Con cualquiera de estos modos el ActiveHybrid 5 es un coche muy confortable para circular por autopistas o vías rápidas, sensación que se refuerza gracias a los asientos opcionales «confort» (sobre los que hay más información en impresiones del interior).

En el modo «ECO PRO» la respuesta del motor al pedal del acelerador no es más suave que en los modos «Comfort» y «Comfort+», pero sí menos intensa para un mismo grado de presión. Es un programa de conducción pensado para ahorrar la máxima cantidad de combustible, que trata de optimizar el uso del motor eléctrico y del de gasolina. Es el modo adecuado para circular en modo eléctrico la mayor cantidad de tiempo posible, sobre todo en ciudad, ya que es necesario pisar el acelerador más fuerte que en el resto de modos de conducción para que se encienda el motor de gasolina. A velocidades inferiores a 160 km/h el motor de combustión se desacopla del eje de transmisión cuando no se presiona el acelerador, lo que permite que el coche circule como si fuera en punto muerto, pero sin gastar combustible, ya que se apaga..

En el ActiveHybrid 5, a diferencia de Lexus GS 450h, no hay un botón que «fuerce» al sistema propulsor a utilizar únicamente el motor eléctrico. No obstante, es posible tener un cierto control sobre el uso de éste gracias a cuatro segmentos —colocados en la zona inferior del cuentarrevoluciones— que se iluminan secuencialmente en función de la demanda de energía que solicitamos. Cuando los cuatro segmentos están iluminados, un pequeño incremento en la presión del acelerador suele implicar el arranque del motor de combustión.

En el modo «ECO PRO» he llegado a utilizar el motor eléctrico como única fuente de movimiento circulando a 125 km/h. Para que esto ocurra se debe circular por un terreno que tenga una pendiente descendente lo suficientemente pronunciada para que el coche no gane velocidad, pero que obligue a pisar ligeramente el acelerador para mantener la velocidad antes mencionada.