Una de las cosas más curiosas que tiene este Audi es el sistema de iluminación. La luz que se proyecta hacia la carretera no es la misma que sale directamente del foco de xenon (este tipo de luces se usan tanto para largas como para cortas; bi-xenón) , sino la reflejada por un reflector (como un espejo). Los focos de xenón son fijos y están dispuestos verticalmente y propaga la luz de abajo hacia arriba.
Cuando se encienden las luces, estos reflectores-espejos se inclinan 45 grados desde una posición vertical y así se transmite la luz hacia delante. Este mecanismo permite no sólo variar la altura del haz de luz si no también permite dar luz hacia el interior de la curva. Incluso es capaz de prever el sentido de la siguiente curva gracias al navegador. Debajo de los faros hay como una especie de aletas que son tomas de aire.
El portón del maletero se puede abrir mediante un mando a distancia los grados que se desee, una vez abierto, el suelo tiene una placa corrediza que se puede desplazar hacia fuera (para facilitar la carga) o se pueden abatir los asientos traseros y colocar sobre ellos esta palanca (para aumentar el volumen de carga y conseguir una superficie totalmente lisa). Todas estas funciones se realizan mediante el mando a distancia.
El habitáculo tiene cuatro asientos completamente individuales. Los dos asientos traseros tienen regulación longitudinal y de inclinación del respaldo. Entre estos dos asientos hay una voluminosa consola con diferentes mandos para que puedan ser usados por sus ocupantes.
El techo se caracteriza porque tiene seis módulos acristalados que tienen varias funciones; dar luminosidad al habitáculo y ser receptor de energía para cubrir determinadas funciones mientras el motor está apagado. Los ocupantes pueden regular independientemente su oscurecimiento para que no dé calor.