El DBS 770 Ultimate es, tras el Valhalla y el Valkyrie, el Aston Martin más potente a la venta. Pone fin a la producción del DBS y, probablemente, también sea el último modelo que salga de la fábrica con un motor V12. Solo se producirán 499 unidades, 300 con la carrocería cupé y 199 con la descapotable (Volante, según la terminología de la marca). Las primeras unidades se empezarán a entregar a partir del verano.
Lo que distingue a este 770 Ultimate del resto de la gama DBS son los ajustes específicos para la transmisión, la dirección y la suspensión, pero sobre todo los del motor. Este es el mismo V12 de 5,2 litros y doble turbocompresor de otras versiones, pero con una serie de modificaciones (sistema de admisión de aire, colectores de escape y presión de la sobrealimentación) para que el rendimiento sea superior. Ahora rinde 770 caballos y 900 Nm de par (45 CV más y el mismo par que el DBS Superleggera).
A pesar de ello, la velocidad máxima no cambia: 339 km/h. Por el momento, Aston Martin no ha comunicado cuál es la cifra de acleración de 0 a 100 km/h, pero no debería ser muy distinta a la del DBS Superleggera, que cubre la maniobra en 3,4 segundos. Modelos de características similares como el McLaren 720S, el Ferrari 812 Superfast o el Porsche 911 Turbo S, tienen una velocidad máxima parecida (un poco más baja en el Porsche, debido a que es el menos potente; ficha técnica comparativa).
La caja de cambios también es la misma que llevan otros DBS, pero Aston Martin ha hecho una serie de ajustes para que los cambios sean más rápidos y para que su funcionamiento se adapte mejor al tipo de conducción que se practique. Como en otras versiones, el eje posterior (el motriz) tiene un diferencial de deslizamiento limitado para mejorar la adeherencia en condiciones de conducción exigentes. El sistema de frenos está compuesto por discos carbocerámicos de 410 x 38 mm en el eje delantero y de 360 x 32 mm en el trasero.
La dirección ha recibido una nueva columna con puntos de anclaje distintos (más firmes) con los que, según Aston Martin, el tacto es mucho mejor, especialmente a la hora de practicar una conducción deportiva. Además, los amortiguadores controlados electronicamente (ADS) han sido reajustados con el mismo objetivo.
El aspecto del Aston Martin DBS 770 Ultimate es distinto al del resto de versiones de la gama gracias al empleo de varios aditamentos en la carrocería, algunos de los cuales tienen una función práctica (generan más fuerza descendente a alta velocidad y refrigeran mejor el motor y los frenos). El parachoques, por ejemplo, tiene unas entradas de aire más grandes y el capó tiene una abertura en forma de herradura. Otros detalles distintivos son unas piezas de fibra de carbono que recorren algunos puntos del perímetro inferior de la carrocería, un difusor aerodinámico específico también fabricado en este material y unas llantas de 21 pulgadas con un diseño específico (con neumáticos 265/35 en el eje delantero y 305/30 en el trasero).
Por dentro los cambios son menos evidentes: unos asientos SportPlus tapizados en cuero de semianilina y Alcantara con un estriado específico, levas de cambio de fibra de carbono (en otras versiones son opcionales) y varios logotipos e inscripciones que hacen alusión al nombre de la versión (770 Ultimate). Como es habitual en Aston Martin, cada propietario puede elegir entre una gama amplísima de colores para la carrocería, cueros para el habitáculo (con distintos colores y texturas) y molduras decorativas (varios tipos de madera o fibra de carbono, entre otros).