El habitáculo del 156 GTA se caracteriza por varios detalles exclusivos que realzan su enfoque deportivo y le diferencian del resto de los modelos de la gama 156. Los elementos que lo distinguen son sus asientos de tipo bacquet, con reposacabezas integrados, regulación en altura, calefacción y tapicería de cuero; los paneles de las puertas, que están también rematados en piel con el mismo dibujo que en los asientos; los pedales de aluminio con inserciones de goma para mejorar su adherencia; los relojes de la instrumentación en color negro y con un velocímetro cuya escala llega hasta 300 km/h; las alfombrillas con el logitipo «GTA» bordado; y las inserciones de un color gris metalizado específico en el salpicadero, el volante y el pomo del cambio.
El volante (similar al de los Alfa 147) está forrado en cuero y tiene mandos multifunción para el manejo del equipo de sonido. Al igual que el resto de los renovados Alfa 156, el GTA tiene un salpicadero rediseñado y puede tener ahora navegador y ordenador de viaje. También estrena una nueva pantalla multifunción situada en la parte superior del salpicadero (entre las salidas de ventilación) que tiene un indicador adicional de temperatura de aceite. Se han reposicionado casi todos los mandos para su accionamiento más fácil y aparecen algunos nuevos, como el botón para desconectar el control de tracción (situado junto a la palanca de cambios).
En cuanto al nivel de equipamiento, el GTA lleva climatizador automático con regulación de temperatura independiente en cada lado (similar al de los 147), nuevo airbag de protección de cabeza, limpiaparabrisas automático, programador de velocidad, navegador, ordenador de viaje y tapicería de cuero entre sus elementos de serie.
En la parte posterior, el diseño de la banqueta remarca la posición para dos ocupantes, si bien está acondicionado para tres plazas, aunque el pasajero central no tiene ni cinturón de seguridad de tres puntos ni reposacabezas.