El motor de dos litros de cilindrada y 150 CV tiene aspectos satisfactorios, como su suavidad, el poco ruido que emite y la capacidad para subir de régimen de forma rápida.
Obtiene buenos resultados en nuestras mediciones derecuperación. En aceleración, en cambio, está ligeramente por debajo de lo esperado en un coche de este tamaño y potencia. En nuestras mediciones con el correvit ha obtenido datos de aceleracion máxima similares a otros modelos menos potentes y algo más pesados como el BMW 318 Ti (143 CV) o el Ford Mondeo 2.0 (147 CV). Los modelos con el motor 1.8 T del grupo Volkswagen, con 150 CV, tienen mejores prestaciones que este Alfa.
A pesar de que este motor da la potencia máxima a 6.300 rpm, si lo que se busca es la mayor aceleración, es posible apurar la marcha hasta unas 6.800 rpm, porque es capaz de subir sin una importante pérdida de fuerza.
Resulta silencioso aunque se apuren al máximo sus posibilidades y vibra muy poco (tiene árboles de equilibrado). Sube de vueltas con facilidad, de una forma muy progresiva, sin que existan cambios bruscos de empuje. Tiene un sonido característico que me ha parecido muy agradable porque no es elevado ni intenso. A alta velocidad se escucha más el roce de la carroceria contra el aire que el motor.
Los desarrollos de transmisión están ajustados para obtener un buen aprovechamiento del motor. Alcanza la velocidad máxima (208 km/h) ligeramente por encima del régimen de potencia máxima (que es a 6.300 rpm).
Lo más desfavorable de este motor es el consumo. En un recorrido sobre 170 km en carretera de sentido único, a una media de 117 km/h con frecuentes rampas y pendientes, ha gastado 8,6 litros de media. Haciendo una media de 155 km/h, en las mismas condiciones que la medición anterior, ha gastado 14,5 litros. En recorrido principalmente urbano, en condiciones muy diferentes de tráfico, ha consumido 13,0 litros de media.