Clasificación por peso (ECE R44/04)
- Por Alfonso Herrero (@alf_reguart)
- 17 de diciembre de 2017
Desde junio de 2009, está permitida la venta de sistemas de retención con la homologación CE R44 únicamente en su cuarta variante, la CE R44/04. La norma R44 se aprobó, por vez primera, en el año 1982 y ha sido actualizada en cuatro ocasiones. Los sistemas de retención infantil (SRI) homologados conforme a las dos primera —etiquetados como R44/01, R44/02— no se pueden utilizar actualmente. La tercera se puede utilizar pero no se comercializa.
Los SRI conformes a la norma R44/04 se categorizan en cinco grupos —0, 0+, 1, 2 y 3— en relación al peso del niño. Estas sillas pueden ir sujetas al vehículo mediante el cinturón de seguridad o el sistema ISOFIX.
Grupo 0
Para bebés de entre 0 y 10 kilogramos. Son capazos o portabebés adaptables al carro de paseo. El bebé se sujeta mediante un arnés al propio dispositivo, y el dispositivo al coche mediante los anclajes que lleva integrados. Si es una sillita, va en contradirección; si es un capazo, se coloca transversalmente al sentido de la marcha, sobre la banqueta trasera (es recomendable que la cabeza del bebé se sitúe en el extremo contrario a la puerta, para disminuir el riesgo de lesiones en caso de accidente lateral).
Grupo 0+
Para bebés de hasta 13 kilogramos. Sirven indistintamente para llevar al niño en el coche y en el carro de paseo. Se coloca en contradirección. El bebé se sujeta mediante un arnés al propio dispositivo, y la silla al coche mediante el cinturón de seguridad o el sistema ISOFIX.
Grupo 1
Para niños de entre 9 y 18 kilogramos. El bebé se sujeta mediante un arnés al propio dispositivo, y la silla, que va colocada en el sentido de marcha al coche, mediante el cinturón de seguridad o el sistema ISOFIX.
Grupo 2
De 15 a 25 kilos. Se utiliza el cinturón del coche para sujetar al niño. Adicionalmente, la silla puede ir anclada al coche mediante sistema ISOFIX. Normalmente la altura del respaldo —junto a la guía por la que pasa el cinturón de seguridad— es regulable. Colocarlo a la altura adecuada permite que el cinturón haga su trabajo correctamente.
Grupo 3
De 28 a 36 kilogramos. Son similares a las anteriores con o sin respaldo (sistemas conocidos como elevadores). Las primeras son preferibles porque también protegen en caso de impacto lateral. Se utiliza el cinturón del coche para sujetar al niño. Adicionalmente, la silla puede ir anclada al coche mediante el sistema ISOFIX.
Se puede saber si una silla cumple con la homologación y a cuál de los grupos pertenece consultando con la etiqueta identificativa. Es de color naranja, rectangular, y en ella se indica la norma que cumple, el intervalo de peso y si es una silla universal (válida para cualquier modelo de coche), semi-universal (igual que la anterior pero con ciertas limitaciones) o específica (válida para un o unos modelos concretos). En esta imagen mostramos una de ejemplo.
En todos los casos hay que prestar atención tanto a la correcta sujeción del sistema de retención como a que los arneses del cinturón de seguridad estén adecuadamente colocados sobre el cuerpo del niño.
El sistema ISOFIX evita errores en la sujeción de la silla, una ventaja notable respecto al uso del cinturón de seguridad como elemento de fijación. Desde 2014, todos los coches de al menos cuatro plazas y nueva matriculación llevan Isofix en dos plazas traseras. Hay coches en los que también se puede tener este sistema en la plaza del pasajero delantero y otros en los que lo hay en la tercera fila de asientos (imagen de las plazas traseras del Audi Q7).
Los anclajes ISOFIX se localizan habitualmente en el hueco que queda entre el respaldo y la banqueta y están identificados por un símbolo que representa un niño colocado en una silla. Pueden estar ocultos por una tapita de plástico (imagen), tras una cremallera (imagen), ocultos tras una pieza de tapizado que hay que extraer o, simplemente a la vista. El primer caso es el más cómodo porque el marco de plástico que tiene el anclaje metálico sirve de guía para introducir las hebillas de la silla. Muchas sillas tienen un testigo de color verde que señala de que está bien colocada.
En aquellas sillas en las que el niño va sujeto por los elementos integrados en la propia silla (el arnés o un cojín de retención) es necesario un sistema de sujeción adicional para evitar que la silla pueda pivotar. Puede ser un Top Tether —un mosquetón unido a una cinta (de hilo trenzado, como los cinturones de seguridad) que hay que enganchar en un anclaje que normalmente va colocado en la parte posterior de los respaldos, pero que también se puede encontar en el techo o en algún lugar del maletero— o una pata como tercer punto de apoyo (imagen).
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