Glosario | Inyección electrónica. Inyección mecánica
En este tipo de inyección de combustible, la gestión del suministro de carburante a través de los inyectores se realiza con ayuda de componentes electrónicos. Se trata de un sistema mucho más eficaz y de mayor capacidad de control que los carburadores o la inyección mecánica, por lo que se ha impuesto con la llegada de las normativas anticontaminantes cada vez más estrictas.
En los sistema de inyección electrónica, la cantidad de combustible que se inyecta es función de la masa de aire que aspira el motor, la cual se mide mediante un sensor especial. Una sonda especial de temperatura también informa al procesador para calcular el tiempo de apertura de los inyectores y el momento exacto, en función de la velocidad de giro del motor. Si se utiliza un solo inyector que suministra el combustible a un colector común para todos los cilindros se dice que la inyección es monopunto, mientras que si existe un inyector para cada cilindro, la inyección es multipunto.
La inyección es continua si el combustible se regula mediante la presión de suministro del inyector. Esto quiere decir que el suministro de gasolina se produce incluso con la válvula de admisión cerrada; la gasolina se acumula hasta que se abre la válvula de admisión y es arrastrada por la corriente de aire. En los sistemas de inyección intermitente, la apertura de los inyectores está gobernada por una señal eléctrica (la aguja que cierra y abre la tobera se levanta mediante electromagnetismo), y se inyecta combustible una vez en cada ciclo. Entre los sistemas de inyección intermitente se habla de inyección simultánea si el «disparo» de combustible se realiza en el mismo instante para todos los cilindros, independientemente de la fase del ciclo en la que se encuentren; la inyección es secuencial cuando cada inyector suministra combustible a su correspondiente cilindro de forma independiente, sólo durante la carrera de admisión.
Inyección mecánica: Es un sistema que regula la entrega de combustible al colector de admisión o a los cilindros mediante sistemas mecánicas, como un plato sonda para el aire de admisión, la presión de la gasolina para controlar el caudal, etc. En la actualidad, ya no se utilizan, pues los sistemas electrónicos son mucho más eficaces.