Volvo ha hecho mejoras en su motor Diesel de cinco cilindros y 2,4 l de cilindrada. Hay tres variantes según su potencia: 126, 163 y 185 CV. Los llevan las gamas S60, V70, XC70 y XC90 aunque no todos están disponibles en cada modelo (relación de ellos).

Los cambios afectan principalmente al sistema de inyección y al turbocompresor. También hay modificaciones en sistema de descontaminación (tabla comparativa de potencia y par respecto a los motores que reemplazan).

Los inyectores tienen siete orificios en vez de cinco y el proceso de inyección se divide en tres etapas. La última se emplea, además de para reducir las emisiones, para regenerar el filtro de partículas. Con el nuevo sistema de gestión de la inyección, se puede regular continuamente la turbulencia con la que se inyecta el gasóleo dentro de la cámara.

El turbo está gestionado electrónicamente. La rueda del compresor es ahora de mayor tamaño y los álabes son de nuevo diseño. La zona próxima al eje está refrigerada por agua.

Para reducir las emisiones contaminantes se ha modificado el sistema de recirculación, que es más rápido y tiene mayor capacidad de refrigeración.

También se ha bajado la relación de compresión, desde 18 a 1 hasta 17 a 1, empleando unas cámaras de combustión de mayor tamaño. De este modo se logra bajar la temperatura de funcionamiento y disminuir las emisiones.

El catalizador es de mayor volumen y está más cerca del motor para permitir que alcance la temperatura de funcionamiento lo antes posible. Se le ha añadido un sensor de oxígeno para regular con mayor precisión la mezcla de combustible.

El filtro de partículas es de serie en todos los modelos. Tiene una eficacia del 95 % y se regenera cada 20 minutos o en intervalos de 500 a 1.000 km, dependiendo de las circunstancias.

El bloque y la culata están hechos de aluminio. La inyección es directa por conducto común. Tiene cuatro válvulas por cilindro.

El mantenimiento de estos nuevos motores se ha prolongado hasta cada 30.000 km (antes eran 20.000 km).

El D5 (185 CV) lleva de serie una caja de cambios manual de seis relaciones (M66D). El 2.4 D (163 CV) la puede llevar como opción. Más adelante, Volvo ofrecerá una nueva caja automática de seis marchas para estos dos motores (AWTF-80SC). El D5 puede ir montado con tracción delantera o total.

En el caso del S60, comparando el actual motor de 163 CV con el anterior, mejora algo la aceleración; la variación en el consumo es insignificante (tabla comparativa de prestaciones del Volvo S60).

El más potente, S60 D5, tiene muy buena relación entre prestaciones y consumo (tabla comparativa). Por precio, la versión Kinetic, que es la más asequible (35.500 €), está en un lugar intermedio entre un Alfa Romeo 156 2.4 JTD 20V 175 CV Distinctive (31.157 €) o un Opel  Vectra 4p Elegance 3.0 V6 CDTi 24V (27.690 €) y un Audi A4 3.0 quattro 6 vel. (40.000 €) o un Mercedes-Benz C 270 CDI (38.900 €).