Ya están a la venta los Volvo S40 y V50 con un motor Diesel de 2,4 l de cilindrada y 180 CV de potencia máxima. El S40 D5 menos costoso tiene un precio de 30.800 €, el V50 (la versión familiar) cuesta 1.500 € más.

No tienen un precio de venta bajo ni un equipamiento de serie abundante. Su interior no es muy espacioso. El S40 y V50 destacan por la calidad de los materiales interiores y su buen ajuste.

Hay modelos menos costosos que un Volvo S40 D5 Kinetic (30.800 €), como un Opel Vectra 4p Cosmo V6 CDTi (29.550 €) y un Toyota Avensis Sedán 2.2 D-4D 177 CV Sport (29.100€). A igualdad de equipamiento, el Avensis es claramente más económico. Tanto el S40 como el Avensis tienen unas prestaciones muy parecidas; el consumo es menor en el Toyota. Ambos modelos tienen un buen nivel de acabado interior.

Un Lexus IS 220d tiene un precio de venta mayor, pero tiene mucho más equipamiento de serie. A igualdad de equipamiento, el Lexus resulta menos costoso. Un Peugeot 407 2.2 HDi (tabla comparativa) también es más económico (relación de modelos semejantes al S40 D5, ordenada por precio).

Respecto a la variante familiar V50, hay bastantes modelos con un precio menor (ver relación de ellos). Igualando el equipamiento, un Renault  Laguna Grand Tour 2.0 dCi 175 CV Luxe Privilege tiene una ventaja en precio de más de 8.000 € (tabla comparativa). Un Fiat Croma JTD de 200 CV también es más económico, cuesta 4.000 € menos a igualdad de equipamiento.

La nueva versión de 180 CV supera en potencia a las dos versiones Diesel que había hasta el momento en la gama del S40 y V50: una tiene un 1,6 l de 109 CV y la otra un 2,0 l de 136 CV(motores de origen Ford, de cuatro cilindros). En gasolina, sólo es más potente la versión T5, con 220 CV.

Inicialmente, sólo se venderán con un cambio automático de cinco velocidades. Antes de que termine el año, también podrán encargarse con una caja de cambios manual de seis velocidades (por unos 2.000 € menos). Según datos oficiales facilitados por Volvo, el S40 D5 Aut. alcanza 225 km/h de velocidad máxima y es capaz de acelerar hasta 100 km/h en 8,5 segundos. Su consumo medio en el ciclo mixto homologado es 7,0 l/100 km. El Volvo V50 D5 tiene unas cifras de prestaciones y consumos casi iguales (ficha comparativa).

Su consumo no es tan bajo como en muchos coches de características parecidas que tienen cambio manual. Sí está bien en relación a los que tienen cambio automático. Sus prestaciones son normales para su potencia (tabla comparativa).

El motor tiene cinco cilindros, 2,4 l de cilindrada y 180 CV de potencia máxima a 4.000 rpm; es el mismo que lleva el C70 D5. Este motor lo usan otros muchos modelos de Volvo (el S60, V70, XC70 y XC90) y su potencia varía en función del modelo al que vaya asociado. La versión más potente de este motor la lleva el S60 (donde da 185 CV de potencia); la menos potente la lleva otra versión del S60, con 126 CV. Más información sobre el motor.

He podido realizar una toma de contacto del V50 con el nuevo motor. La unidad de pruebas llevaba neumáticos Pirelli P7 en medida 205/50 R17.

El nuevo motor D5 mueve con bastante agilidad al V50, las prestaciones son suficientes en casi cualquier circunstancia. No obstante, la capacidad de aceleración es muy normal, está penalizada por el resbalamiento del convertidor de par. Se pueden realizar adelantamientos con mucha facilidad (previa reducción mediante «kick-down») y permite circular a velocidades muy superiores a las permitidas en España. La sonoridad del motor está contenida, salvo cuando circulamos con el motor a un régimen alto.

El cambio automático es suave al cambiar de marcha, pero resulta algo lento de respuesta, sobre todo al reducir de marcha cuando disminuye la velocidad a la que se circula. Este cambio permite eliminar marchas manualmente (no seleccionarlas). En esta modalidad, no cambia a una marcha superior cuando llega al régimen máximo.

La suspensión de serie hace que el V50 sea un coche muy cómodo. Es lo suficientemente flexible para absorber eficazmente las irregularidades de la carretera y lo suficientemente firme como para contener, también de forma eficaz, los movimientos amplios de la carrocería. Por otra parte, la dirección me ha parecido algo sensible a alta velocidad. (Impresiones de conducción del Volvo S40 2.0 D).

El Volvo S40 es una berlina con carrocería de cuatro puertas y 4,47 m de longitud. Su interior no tiene un espacio amplio para los pasajeros de las plazas traseras, ni su maletero es grande (tiene 404 l de volumen). El Volvo V50 es un modelo con carrocería familiar y 4,51 m de longitud. El maletero es algo mayor que el del S40, 414 l, pero tampoco es grande.

Ambos modelos, que tienen un interior casi idéntico, dan una gran sensación de calidad por los materiales empleados y sus ajustes (más impresiones del interior). Los compartimentos portaobjetos que hay en su interior resultan suficientes. Algunos de ellos son característicos, como la bandeja que hay detrás de la consola central, los bolsillos de las puertas que son extremadamente pequeños y la guantera, que tiene un díficil acceso (más información).

Puede tener un equipamiento bastante completo, aunque hay algunos elementos que no están disponibles. Entre los elementos de equipamiento que tiene de serie se encuentran: seis airbags, control de estabilidad, protección contra latigazos cervicales (WHIPS), climatizador, retrovisores exteriores eléctricos y con desempañado, equipo reparapinchazos y radio con lector de CD.

Según versiones u opcionalmente, puede llevar acceso y arranque sin llave, tapicería de cuero con asientos eléctricos y con calefacción, mandos multifunción en el volante, techo solar corredizo, faros de xenón para cortas y largas, limpiaparabrisas automático, suspensión deportiva, suspensión autonivelante (V50), navegador, teléfono manos libres y llantas de aleación de hasta 17 pulgadas.

No puede llevar algunos elementos de equipamiento que sí están disponibles en modelos semejantes, como encendido automático de faros, iluminación en curva, airbags laterales traseros, conexión Bluetooth para el teléfono móvil y retrovisores exteriores antideslumbrantes, entre otros.

Volvo prevé que el diez por ciento de los Volvo S40 y V50 que se vendan sean D5. En total, espera vender 460 unidades D5 en 2006 y 670 en 2007. A finales de este año Volvo pone a la venta el nuevo compacto C30 que, según Volvo, restará algunas ventas al S40 y al V50.

El Volvo S40 y V50 comparten elementos de la estructura del bastidor con el Ford Focus, Focus C-Max y el Mazda 3.