El 360c es un prototipo con el que Volvo da a conocer su visión sobre el futuro del vehículo autónomo. Dice que está pensado para sustituir los viajes en avión (especialmente los de corto recorrido) y así evitar los inconvenientes que suelen venir asociados a este tipo de transporte: «colas, esperas, retrasos y ruidos».

El 360c es completamente autónomo y, por lo tanto, carece de volante, por lo que el habitáculo está diseñado para maximizar el espacio disponible para los pasajeros (imagen). Volvo describe cuatro posibles potenciales usos del mismo: dormitorio, oficina portátil, sala de estar o espacio para el entretenimiento. Además, de acuerdo con las fotos facilitadas, el 360c puede tener varias configuraciones para los asientos, que van desde dos banquetas corridas enfrentadas entre sí hasta un sillón individual de grandes dimensiones.

El sistema de impulsión es exclusivamente eléctrico, aunque por el momento desconocemos el número de motores, la potencia de los mismos o la autonomía entre recargas.