Volkswagen T-Roc (2022) - Prueba | Información general
El Volkswagen T-Roc 2022 es un SUV de tamaño compacto —mide 4,25 metros de longitud y 1,82 de anchura— adecuado para utilizarse como coche familiar, pues tiene un habitáculo espacioso para su tamaño exterior y un maletero grande, de 445 litros (392 l con tracción total). El T-Roc está en venta desde 30 860 euros. Es un precio superior al de prácticamente todas sus alternativas, como el Fiat 500X, el Hyundai Kona, el Škoda Kamiq o el Nissan Juke (listado comparativo ordenado por precio). Es ligeramente más grande y de mayor calidad que el T-Cross.
Es un vehículo cómodo en términos generales (aunque no todas las versiones lo son por igual) y de reacciones seguras. Con el motor menos potente —gasolina 1.0 TSI de 110 CV—, el T-Roc se mueve bien y tiene un consumo de carburante moderado. Por su parte, el T-Roc con el motor de gasolina de 150 caballos es un coche veloz que permite circular a buen ritmo con facilidad y su consumo de carburante es normal. Esta versión de 150 caballos tiene una suspensión más firme y, por ello, unas reacciones ligeramente más directas que el de 110 caballos. En todo caso, el aislamiento acústico del T-Roc no es excelente: en vías rápidas el ruido de rodadura se hace patente en el interior, aunque no es molesto. Impresiones de conducción.
Además de los motores citados de 110 y 150 caballos, es posible elegir entre otros dos más de gasolina —2.0 TSI 190 CV o 2.0 TSI 300 CV— y dos Diesel —2.0 TDI de 116 o 150 CV—. Ninguno está hibridado, ni preparado para funcionar con carburantes alternativos como GLP o GNC, por lo que todas las versiones del T-Roc llevan la etiqueta C de la DGT y eso lo pone en desventaja respecto a algunas de sus alternativas.
Algunas versiones del T-Roc se pueden pedir con cambio automático y tracción total (en este listado de la gama se pueden consultar todas las posibles combinaciones y sus precios). El cambio de marchas automático DSG no siempre funciona con toda la suavidad necesaria durante las maniobras (a veces es complicado dosificar la aceleración para que el coche se desplace con total suavidad), pero en el resto de circunstancias es muy satisfactorio.
Existe también una versión cabrio. Es menos práctica que la convencional de cinco puertas porque solo tiene cuatro plazas y un maletero considerablemente más pequeño (280 l). Además, el T-Roc Cabrio es más caro (desde 37 045 €) y su gama de motores es menos extensa. Gama Volkswagen T-Roc Cabrio.
Lo que cambia en el T-Roc 2022
Este T-Roc año-modelo 2022 es la típica puesta al día que los fabricantes hacen a mitad de la vida comercial de sus modelos. En este caso, estamos ante la renovación de la primera generación del T-Roc, que llegó al mercado a finales de 2017. El renovado T-Roc se reconoce por el cambio de diseño en algunos elementos de la carrocería y del habitáculo, por el equipamiento de serie y opcional que puede tener y por la oferta de asistentes a la conducción, que es más extensa y moderna.
Por fuera no es sencillo distinguir un T-Roc 2022 del modelo anterior (imagen de un T-Roc 2018 y de un T-Roc 2021). Son nuevos los parachoques, la parrilla, el difusor aerodinámico posterior que tienen algunas versiones y los pilotos, que tienen una distribución de funciones distinta y, en algunas versiones, están oscurecidos. Todos los T-Roc 2022 llevan unos faros de ledes (antes había T-Roc con faros halógenos). Hay cuatro nuevos colores para la carrocería —Ascot Grey solid, Pyrite Silver metallic, Kings Red metallic y Petroleum Blue metallic— y varias llantas de entre 17 y 19 pulgadas con un diseño inédito.
Habitáculo y maletero
En el interior los cambios del Volkswagen T-Roc 2022 son más notables y bajo nuestro punto de vista acertados, pues solucionan algunos de los aspectos menos positivos del modelo anterior. Por ejemplo, la calidad de los materiales empleados en el salpicadero es claramente superior. La plancha superior del salpicadero es ahora un plástico de tacto gomoso más agradable al tacto que el plástico duro del anterior T-Roc y tiene un ribeteado que le da una apariencia más sofisticada. Por otra parte, se ha colocado la pantalla central en una posición más elevada y las salidas de aire pasan a estar situadas un poco más abajo.
Los nuevos sistemas multimedia pueden tener una pantalla de 8,0 o de 9,2 pulgadas (en el anterior T-Roc lo máximo eran 8 pulgadas). En ambos casos, el sistema operativo es el MIB3, que está conectado a internet de manera permanente (permite la consulta de algunos datos del vehículo, así como realizar acciones en remoto) y es compatible con Android Auto y Apple CarPlay.
El cuadro de instrumentos mediante pantalla es de serie (antes dependía del nivel de equipamiento). Hay dos versiones, Volkswagen Digital Cockpit (pantalla de 8,0 pulgadas) y Volkswagen Digital Cockpit Pro (pantalla de 10,25 pulgadas y más funciones y posibilidades de personalización, como por ejemplo, ver el mapa del navegador; imagen). La instrumentación básica cumple de sobra con su función, que es la de mostrar la información más relevante del vehículo. Se ve bien y es fácil de configurar. Pero se nota que tiene menos resolución que la Pro y el hecho de no tener algunas funciones (como la comentada de ver el mapa) puede que sea un inconveniente para algunas personas.
Otra novedad en el interior es el módulo del climatizador, en el que los botones y ruletas han dado paso a superficies táctiles, como en el Taigo, el Polo y el Tiguan. Se gana un aspecto más moderno, pero se pierde un poco de facilidad de uso porque no se reconocen al tacto y hay que buscar la función con la vista. Con todo, son unos mandos que se manejan bien y que están organizados de forma intuitiva. Al menos, se agradece que Volkswagen no haya decidido quitar los botones del climatizador para integrarlos todos en el sistema multimedia.
Los mandos del volante pueden ser botones tradicionales (imagen) o mandos que responden tanto a las pulsaciones como al tacto (imagen). Estos últimos no nos han gustado ya que, al tener menor relieve no se reconocen bien sin mirarlos. Además, hemos comprobado que hay un ligero retraso entre que se pulsan y que se activa la función que deseamos. No nos parece que este tipo de mandos aporte nada respecto a unos botones tradicionales.
Este T-Roc 2022 no tiene diferencias en cuanto a la amplitud del habitáculo respecto al modelo anterior, que continúa siendo buena. Según nuestras mediciones, está en un punto intermedio frente a sus alternativas en cuanto a espacio para las piernas y es un poco mejor que la media por altura libre al techo y anchura entre puertas. Se trata, por tanto, de un coche adecuado para transportar con comodidad a cuatro adultos de estatura media o incluso un poco superior. Además, el acceso al habitáculo es un poco más cómodo que en un turismo, pues sus banquetas están situadas más altas. Impresiones del interior del T-Roc 2018.
Tampoco el maletero sufre cambios, sigue contando con 445 litros de capacidad, un dato que posiciona al T-Roc como uno de los mejores de su segmento, únicamente mejorado por el del Ford Puma (456 l) y el MINI Countryman (450 l). Listado de SUV de entre 4,2 y 4,3 m de longitud ordenados por volumen del maletero. Algunas versiones tienen un piso móvil que se puede colocar en dos alturas distintas para crear, si se desea, dos espacios diferenciados (el principal y un doble fondo). Los T-Roc con tracción total (solo son las dos versiones más potentes, de 190 y 300 CV) tienen 392 litros de maletero.
Equipamiento y otros detalles
Actualmente, el T-Roc de cinco puertas solo está disponible con tres niveles de equipamiento: Life, R-Line y R (este último es exclusivo para la versión 2.0 TSI de 300 CV). En el T-Roc descapotable hay dos niveles de equipamiento: Style y R-Line.
Entre los asistentes a la conducción es novedad el sistema IQ.DRIVE Travel Assist, que combina el funcionamiento del programador de velocidad activo (y predictivo; es decir adapta la velocidad en función del trazado de la vía y de las señales de limitación de velocidad) con el de mantenimiento de carril para ofrecer una función de guiado automático (funciona hasta 210 km/h). También son novedad los faros matriciales IQ.LIGHT, que como en otros modelos de la marca de reciente aparición, incluyen una tira iluminada que los une a través de la parrilla (son opcionales para las versiones R-Line). Estos faros opcionales dan una buena iluminación. Otros sistemas disponibles con los que ya contaba el modelo anterior son un detector de vehículos en el ángulo muerto, un sistema de frenada de emergencia en ciudad con reconocimiento de peatones y ciclistas, uno de aparcamiento semi automático (en batería y en línea) o una alerta por cambio involuntario de carril.
El seguro a todo riesgo sin franquicia para un T-Roc 1.0 TSI de 110 CV cuesta 420 euros al año con Qualitas Auto, la compañía que resulta más asequible tras introducir en el comparador de seguros los siguientes datos: hombre casado de 40 años, sin hijos, que vive en Madrid, recorre 20 000 km al año, dispone de una plaza de aparcamiento en un garaje comunitario y no ha tenido seguro de coche previamente.