El Auris Touring Sports tiene espacio suficiente para que cuatro personas de complexión normal y su respectivo equipaje viajen sin problemas de espacio. Con respecto a un Auris de cinco puertas, la principal diferencia está en que tiene dos centímetros más de altura en los asientos posteriores y, sobre todo, en que tiene un maletero 170 litros más grande.

El espacio en los asientos posteriores se sitúa en una posición intermedia en relación a sus competidores (mediciones del interior). Así, el espacio longitudinal es similar al de un Opel Astra Sports Tourer y un Renault Mégane Sport Tourer, la anchura a la altura de los hombros es muy parecida a la de un Hyundai i30 CW y un KIA cee'd Sportswagon y la altura disponible para la cabeza, la cota menos sobresaliente, se sitúa entre las alternativas con menos espacio.

El maletero del Auris Touring Sports tiene formas regulares y un borde carga bajo, lo que facilita la colocación de los objetos que depositemos. Tiene un volúmen de 530 litros, mayor que el de los dos monovolúmenes de tamaño medio que comercializa Toyota: el Prius+ y el Verso (ficha comparativa). También es mayor que el de la mayor parte de sus alternativas. Así, según nuestra base de datos, sólo hay dos turismos familiares de similares dimensiones exteriores con un maletero más grande, el Škoda Octavia Combi (610 litros y una carrocería 10 centímetros más larga) y el Volkswagen Golf Variant (605 litros y misma longitud de carrocería que el Toyota). Un SEAT León ST también tiene una capacidad mayor: 587 litros. Un Hyundai i30 CW y un KIA cee’d Sportswagon tienen 528 y 510 litros respectivamente (listado comparativo).

Bajo el piso del maletero tiene un doble fondo dividido en dos partes (imagen) y otros dos huecos adicionales más pequeños en los extremos, aunque uno de ellos (el derecho) está inutilizado en las versiones híbridas —ahí va alojada la bateria de 12 V—. Bajo el doble fondo hay espacio suficiente para albergar una rueda de repuesto, pero en España esta variante del Auris se vende con un kit de reparación de pinchazos (imagen).

Tiene varios elementos para organizar la carga, como ganchos en las paredes laterales o cuatro argollas para colocar una red, pero se echa en falta alguna cinta elástica o un sistema de organización mediante raíles similar al empleado por KIA en el cee´d Sportswagon (imagen) o Audi en varios de sus modelos (imagen). También tiene una toma de 12 voltios para conectar una nevera portátil o algún otro dispositivo electrónico y un plafón de iluminación en la parte izquierda.

La cortinilla cubreequipaje tiene tres posiciones fijas: enrollada (imagen), desenrollada (imagen) y una tercera que la deja un punto intermedio y más elevado, dejando un mayor espacio para introducir objetos en el maletero (imagen). Se puede desmontar y guardar en el doble fondo del maletero.

Los respaldos de los asientos traseros se pueden abatir en dos secciones (en proporción 60/40). Hay dos maneras de abatirlos. La primera, con los tradicionales mandos que se colocan en los extremos superiores de los respaldos y, la segunda, con unos tiradores que hay a ambos lados del maletero—a este sistema Toyota le llama «Easy flat» (imagen)—. Abatidos, la superficie que queda es casi plana y el volumen de carga es 1658 litros (imagen). Tiene fijaciones para sillas infantiles «ISOFIX» en las dos plazas de los extremos.

Dentro del equipamiento de serie se incluye una red de tela para separar la zona de carga de la de los pasajeros (imagen). Se puede montar tanto en configuración de cinco plazas como de dos. Cuando no se utiliza queda enrollada en un carrete junto a otro carrete donde se recoge la cortinilla que cubre el equipaje. Al igual que la cortinilla cubreequipaje, se puede desmontar y guardar en el doble fondo del maletero.

Hay un buen número de huecos portaobjetos repartidos por el habitáculo. Son destacables por su amplitud los del interior de las puertas delanteras y traseras —donde caben botellas de 1,5 y 0,5 litros, respectivamente— o el cajón el que se encuentra bajo el reposabrazos delantero —que además tiene una bandeja superior—. Entre los asientos delanteros hay un hueco portabebidas donde se pueden depositar unas llaves o un teléfono móvil. La guantera es grande y está iluminada, pero carece de cierre con llave o refrigeración.

El diseño, los materiales y la calidad de los ajustes son los mismos que en el Auris, por tanto, tiene un interior donde hay materiales que dan buena sensación a la vista y al tacto —como los plásticos de la parte superior del salpicadero y de algunas molduras decorativas y revestimientos de cuero por encima de la guantera— y otros de inferior calidad visual y táctil —como la parte baja de la consola y la tapa de la guantera—. Los ajustes entre las diferentes piezas es bueno y, en general, da sensación de solidez y de que va a aguantar bien el paso del tiempo.

El puesto de conducción permite una buena disposición a los mandos para personas con tallas y complexiones muy diferentes, ya que las regulaciones del volante y los asientos son muy amplias. Todos los mandos quedan cerca de la mano y solo la pantalla del sistema multimedia Toyota Touch & Go + (más información) queda en una posición ligeramente baja, obligando a apartar la vista para visualizar la información o realizar algún ajuste.

La parte inferior de la consola central tiene un diseño ligeramente distinto en las versiones híbridas: la palanca de cambios es de un tamaño mucho más reducido y además está ubicada en una posición ligeramente más elevada (imagen). Por encima de ésta se sitúan los tres botones que activan los modos de conducción («EV», «Eco» y «Power»), mientras que en las versiones de gasolina o Diesel hay un hueco portaobjetos (imagen del híbrido y del resto de versiones).

El cuadro de instrumentos tampoco es igual que en el resto de la gama Auris con motor gasolina o Diesel. El cuentarrevoluciones ha sido sustituido por un indicador del uso de la potencia que se divide en tres tramos: «Charge», «Eco» y «Power» (imagen).

Los asientos delanteros tienen un mullido firme pero muy cómodo —incluso en viajes de varias horas— y sujetan bien el cuerpo cuando circulamos por carreteras con muchas curvas. Los de las versiones «Advance» tienen calefacción con dos niveles de temperatura —«HI» y «LO»—, pero incluso en el más alto no proporciona mucho calor y además tardan en empezar a calentarse. En la segunda fila, los asientos más cómodos son los de los extremos. El central tiene un mullido más duro que lo hace incómodo si se va a ir sentado durante mucho tiempo —sobre todo el respaldo—.

El climatizador es de doble zona y tiene una buena capacidad para enfriar el habitáculo. El modo automático tiene tres tipos de funcionamiento: «Soft», normal y «Fast». El primero de ellos da prioridad a generar el mínimo ruido posible, mientras que el último («Fast») hace todo lo contrario: intenta alcanzar la temperatura seleccionada de la manera más rápida.