El Suzuki Kizashi es una berlina de cuatro puertas que tiene una longitud de 4,65 m. Suzuki comercializó este modelo entre septiembre de 2010 y enero de 2015. La información que sigue la publicamos cuando este modelo aún estaba en venta:

 

Está disponible desde 29 790 € (todos los precios). Por tamaño es una alternativa a modelos como el Alfa Romeo 159, el SEAT Exeo, el Škoda Octavia o el Volkswagen Jetta, entre otros. Todos ellos tienen una gama de motores mucho más amplia y, a igualdad de equipamiento, tienen un precio superior.

Únicamente está disponible con un motor de gasolina de 2,4 l de cilindrada y 178 CV de potencia. Este motor puede ir acompañado de una caja de cambios manual, de seis velocidades, o automática de variador continuo —CVT—. Por el momento Suzuki no se plantea comercializar una versión con motor Diesel.

Las versiones con cambio manual tienen tracción a las ruedas delanteras. Las que tienen cambio automático son de tracción total (Suzuki la llama «4x4 i-AWD»). Dependiendo de la superficie sobre la que nos desplacemos el sistema puede gestionar el reparto de fuerza automáticamente entre ambos ejes, pudiendo enviar el 100 % de la fuerza al tren delantero o repartirlo al 50% en cada eje.

De entre los vehículos de tamaño y potencia similar es el más barato. Solamente el Mazda6 Sportive 2.5 de 170 CV (desde 29.100 €) tiene un precio ligeramente superior. Un Audi A4 o un Mercedes-Benz Clase C son mucho más caros. Hay coches de tamaño similar más baratos aunque tienen motores de potencia inferior.

En el momento de escribir este artículo el Subaru Legacy Sedán (con un motor de 150 CV de potencia) es el vehículo de características similares con tracción total más barato.

Durante los pocos kilómetros que he podido conducirlo he tenido la sensación de que en general es un coche cómodo y agradable de conducir. La versión con cambio manual y tracción delantera es la más rápida y la que consume menos carburante (más impresiones de conducción).

El interior del Kizashi es amplio. Cuatro ocupantes pueden viajar cómodamente gracias, entre otras cosas, a que las plazas traseras tienen un espacio longitudinal para las piernas grande. Dicho espacio es mayor que el de berlinas de mayor tamaño, como el Mazda6 o un Ford Mondeo y similar al del Škoda Superb (tabla comparativa de mediciones interiores).

Me ha sorprendido el ajuste y la calidad de los materiales de recubrimiento del habitáculo, mejores que los que he visto en otros modelos de la marca (impresiones del interior).

El único nivel de equipamiento disponible es el «Sport», que incluye: llantas de 18 pulgadas de diámetro —con neumáticos en medidas 235/45 R18—, doble salida de escape, embellecedores cromados en los paragolpes y en los laterales de la carrocería y un pequeño alerón en la tapa del maletero.
 

De serie tiene control de estabilidad, 6 airbags, arranque sin llave, programador de velocidad, asientos tapizados en cuero con regulación eléctrica y calefactables, climatizador de dos zonas, control de la presión de los neumáticos, sensores de proximidad para la ayuda al aparcamiento, conexión Bluetooth y conexiones para fuentes de sonido externas (tabla comparativa de equipamiento).

No puede tener ni en opción ningún sistema de navegación —según la marca el coste del mantenimiento de estos sistemas es elevado y no cumplen todas las expectativas que el usuario europeo puede esperar, por ejemplo, la detección de radares—.

Está fabricado en la planta de Suzuki en Sagara.

Anteriormente la marca presentó varios prototipos con la denominación Kizashi (éste es uno de ellos).