Del Škoda Karoq hemos probado todas las versiones, aunque ha sido la Diesel 2.0 TDI de 150 CV la que hemos conducido durante más tiempo. Este motor no es especialmente silencioso, pero apenas vibra y da una buena relación entre prestaciones y consumo (más información y datos en las impresiones de conducción). En cualquiera de sus versiones, el Karoq es un todoterreno muy satisfactorio, tanto por sus cualidades dinámicas, como por las características de su habitáculo (más información en las impresiones del interior).

Mide 4,38 metros de longitud y en su interior se pueden alojar hasta cinco pasajeros. Es un modelo de menor tamaño que el otro todoterreno de Škoda, el Kodiaq, que tiene hasta siete plazas. Está en venta desde 22 490 euros con un motor de gasolina 1.0 TSI de 116 CV (precio, equipamiento y fichas técnicas de toda la gama).

Tomando como referencia a la citada versión de gasolina, el Karoq tiene un precio superior al de un Nissan Qashqai, un Renault Kadjar y un SEAT Ateca e inferior al de un Peugeot 3008 (listado comparativo ordenado por precio).

El precio del Škoda Karoq no es bajo porque su equipamiento de serie es abundante. Actualmente, el nivel de equipamiento más asequible es el Ambition; más adelante llegará uno más sencillo llamado Active. En este enlace, donde aparecen comparadas las versiones más económicas del Nissan Qashqai, el Renault Kadjar, el SEAT Ateca y el Škoda Karoq (todas ellas con un motor Diesel en torno a 115 CV), se puede ver que el Karoq tiene más equipamiento de serie y la posibilidad de llevar más opciones.

La oferta de motores del Karoq está compuesta por dos de gasolina —1.0 TSI 116 CV y 1.5 TSI 150 CV— y otros dos Diesel —1.6 TDI 116 CV y 2.0 TDI 150 CV—. El cambio de marchas puede ser manual de seis velocidades o automático de doble embrague y siete relaciones (DSG). La tracción es siempre en las ruedas delanteras (4x2), excepto en el Karoq 2.0 TDI 150 CV, que siempre tiene tracción total (4x4). A lo largo de 2018, Škoda añadirá a la gama una versión Diesel 2.0 TDI de 190 CV con cambio automático y tracción total.

Los dos motores de 116 CV (1.0 TSI y 1.6 TDI) nos han gustado. No dan una capacidad de aceleración grande, pero consideramos que es suficiente en muchos casos, salvo que se necesite un vehículo veloz en toda circunstancia. El motor de gasolina 1.5 TSI de 150 caballos puede defraudar porque, en una conducción normal, es decir, sin prestar mucha atención al cambio de marchas, no da la impresión de acelerar mucho más que los de menor potencia. Con el motor Diesel de 150 CV se consigue un buen equilibrio entre aceleración y consumo (Impresiones de conducción).

Durante la presentación internacional a la prensa, Škoda no nos confirmó si habrá versiones Scout y RS (del Kodiaq existe el Kodiaq Scout), aunque tampoco lo negó. Sí nos comentó que en 2019 habrá un Superb híbrido enchufable, en 2020 un «SUV» eléctrico y, en 2025, cinco modelos eléctricos, pero no nos especificó cuáles.

Por su equipamiento y otras características, como el buen remate de sus piezas y la calidad de rodadura, creemos que el Karoq está más cerca de los modelos más costosos que de los más económicos contra los que compite. Por ejemplo, es un producto mejor conseguido que un Nissan Qashqai y un Renault Kadjar en términos de calidad. A este respecto creemos que es incluso mejor que el Ateca porque en el Karoq los recubrimientos parecen un poco más lujosos. Además, tiene más soluciones prácticas que hacen más cómodo el uso diario. No llega al nivel de calidad que transmite un Volkswagen Tiguan, pero no está lejos y el Volkswagen es claramente más costoso.

El espacio para ocupantes es normal para las dimensiones exteriores, excepto por la cota de altura libre al techo, que es superior a la media (mediciones propias del interior). En opción, se puede pedir que los tres asientos traseros sean individuales y extraíbles. El maletero, con 521 litros, es uno de los más grandes entre sus alternativas. En el apartado Impresiones del interior damos más información.

El Karoq no estrena elementos de equipamiento dentro del Grupo Volkswagen, pero sí es el primer Škoda en el que el cuadro de instrumentos puede verse mediante una pantalla (imagen). Otras opciones disponibles son los faros de ledes, tres sistemas multimedia —Bolero (con pantalla de 8 pulgadas), Amundsen (8 pulgadas) y Columbus (9,2 pulgadas); los dos últimos tienen navegador— o la luz ambiental de diez colores (hay una muestra de esta función en este vídeo del Kodiaq).

Entre el equipamiento de seguridad y ayuda al conductor de que puede disponer el Karoq están el asistente de aparcamiento, el programador de velocidad activo, la detección de vehículos en el ángulo muerto de los retrovisores, el avisador de cambio de carril involuntario con asistencia del volante, el servofreno de emergencia con detección de obstáculos, el reconocimiento de señales de tráfico y peatones y un asistente para maniobrar con mayor seguridad cuando se arrastra un remolque.

En nuestro comparador de seguros hemos calculado el precio de una póliza a todo riesgo sin franquicia para un Škoda Karoq con motor de gasolina de 116 CV. El tomador es un hombre de 48 años que vive en Madrid y recorre unos 20 000 kilómetros anuales. Esta persona lleva más de 10 años como titular en un seguro de coche y, en los últimos 3 años, ha dado un parte con culpa a su anterior compañía de seguros. Con estos condicionantes, el precio mas bajo lo ofrece Qualitas Auto por 1300 euros.

El Škoda Karoq es el sustituto del Yeti. Está construido sobre la misma plataforma que SEAT emplea para el Ateca —llamada MBQ-A1— y ambos se fabrican en Kvasiny, un municipio de la República Checa. El Karoq es 19 milímetros más largo que el Ateca y 2 mm más alto. La anchura de la carrocería, la distancia entre ejes y la anchura de vías son idénticas (ficha comparativa). Además, el Škoda Karoq y el SEAT Ateca comparten muchos motores y elementos de equipamiento.