Saab 9-5 Aero 2.3 SW - Volvo V70 T5 | Prueba comparativa | El Saab tiene más equipamiento de serie: el Volvo más opciones que no puede llevar el Saab
El Volvo V70 T5 y el Saab 9-5 Aero SW tiene un aspecto lujoso, materiales de buena calidad y un equipamiento muy completo que, puede ampliarse todavía más si pagamos las opciones: retrovisor interior antideslumbramiento, limpia-lavafaros, sistema de navegación (sólo Volvo), control de distancia en aparcamiento (sólo Saab), tapicería de cuero, asientos con reglaje eléctrico o programador automático de velocidad, entre otros.
El Saab 9-5 Aero (6.300.000 pesetas) cuesta menos que el V70 T5 y tiene un equipamiento de serie con elementos que en el Volvo son opción: climatizador automático, ordenador de viaje, radiocasete, volante con mandos multifunción (que carecen de iluminación por la noche), faros antiniebla y llantas de aleación de 17 pulgadas de diámetro.
El Volvo V70 T5 es caro en comparación con su rival (6.828.000 pesetas) y tiene menos equipamiento de serie, pero puede equiparse opcionalmente con más cosas que Saab no ofrece en su modelo: control de estabilidad, navegador por satélite, televisión, teléfono integrado, airbag de protección de cabeza en las plazas traseras o un potente equipo de sonido Dolby Surround con nueve altavoces. Por 229.600 pesetas más se accede a la versión T5 Optima (7.057.000 pesetas), versión más equipada que sí incluye de serie climatizador automático, faros antiniebla, ordenador de viaje, programador de velocidad, retrovisor interior antideslumbramiento y tapicería combinada con cuero, elementos que, como opción, tienen un precio final de 340.000 pesetas. Las llantas de aleación de 17 pulgadas que tenía la unidad de pruebas, con neumáticos 225/45 R 17 Y 91, también son opcionales en el T5 (70.049 pesetas).
En los dos modelos se puede regular el volante en altura y profundidad; es muy fácil encontrar una buena posición de conducción. Los asientos delanteros son cómodos y cuentan con un sistema de protección cervical en caso de accidente, aunque el mullido es un poco blando en los dos coches. Los del Saab mejorarían con algo más de sujeción lateral.
Todos los elementos están bien situados en el V70 y el 9-5, destacando especialmente por su sencillez el manejo del sistema de navegación (opcional) de Volvo desde los mandos del volante. Es el primer coche en el que no he tenido que leer el libro de instrucciones para utilizarlo. La instrumentación es algo más completa en el Saab 9-5 Aero, incluyendo un manómetro de soplado del turbo. Además, su velocímetro tiene una precisión absoluta.
Saab ofrece opcionalmente en el 9-5 Aero un sistema de ventilación en los asientos delanteros (49.920 ptas. pero sólo con tapicería de cuero) que, en los días calurosos, refrigera el cuerpo con mucha eficacia y aporta un agradable frescor.
En Volvo, el airbag frontal delantero tiene un sistema de inflado en dos fases (lo denominan Airbag Dual). El sensor determina la violencia del impacto y las bolsas de aire se inflan un 70 % o un 100 % en función de la gravedad del accidente.