El Mégane 1.9 dCi 120 CV tiene algunas características peculiares (sin considerar su aspecto externo) y no necesariamente satisfactorias. También tiene un gran número de cualidades que lo hacen recomendable para personas con exigencias distintas.

Aunque no es el menos costoso, sí es de lo mejor que hay por relación entre precio y equipamiento (tabla comparativa de la versión Expression con otros modelos).

Destaca por la suavidad y silencio con que puede ir por carretera. Lo que más se oye es el aire, el motor casi pasa desapercibido, especialmente cuando se puede circular en sexta velocidad. Es ligeramente más rápido que sus competidores de menor potencia (los que tienen 110 ó 116 CV). Con relación a los más rápidos de ellos, la diferencia no siempre es claramente palpable.

Su consumo, como el de cualquier Diesel de este tipo, puede ser bajo fácilmente y difícilmente puede ser alto. Los hay que gastan menos, pero las diferencias en términos de costo por kilómetro no son más importantes que otros factores económicos, como la relación entre precio y equipamiento.

La unidad que hemos probado tenía control de estabilidad y, con él, me parece un coche muy seguro (sin él puede que también lo sea, pero no lo he probado). Es un coche con buen agarre y que frena bien. Lo que no tiene es un tacto ágil como —por ejemplo— un Ford Focus o incluso el anterior Mégane; por cómo se mueve su carrocería, parece más un buen monovolumen que un buen turismo. Como es un coche seguro, que no tenga ese tacto no es un problema, salvo que sea lo que va buscando el cliente.

Interiormente, la carrocería del Mégane es satisfactoria de la mitad hacia delante. Tiene un buen puesto de conducción (especialmente para quien prefiera ir alto), un sistema de ventilación eficaz, buena visibilidad de noche y un salpicadero funcional. De la mitad hacia atrás no es tan bueno: falla por espacio en las plazas traseras y por maletero.

La calidad de acabado y ajuste me ha parecido todo lo buena que cabe esperar en un coche que acaba de llegar al mercado, y mejor que la de la mayoría de sus competidores. La versión que hemos probado es «Luxe Privilege», que tiene una terminación interior rica; los materiales más bastos están poco visibles; puede que otras versiones no den tan buen aspecto.

Con este motor Diesel de 120 CV hay hasta ocho variantes de carrocería, que resultan de combinar tres o cinco puertas, dos grados de equipamiento (Confort o Luxe) y tres tipos de acabado (Expression, Dynamique o Privilege).