La gama 2013 del Porsche Panamera cambia respecto a la de 2009 (información del Panamera modelo 2009). Además de un aspecto ligeramente distinto, hay cambios en los motores, existe una versión híbrida enchufable y se ofrece la posibilidad por vez primera de elegir dos tamaños de carrocería. El Panamera más asequible cuesta 93 398 euros y el más costoso 226 747 (todos los precios). 

En junio de 2015, Porsche pondrá a la venta una versión del Panamera denominada «Edition». Estará disponible con el motor de gasolina de 310 CV o con el Diesel de 300 CV y tendrá un equipamiento de serie más abundante. Exteriormente, las versiones Edition se distinguen del resto de la gama porque tienen algunas partes de la carrocería pintadas en color negro brillante y unas llantas de aleación de 19 pulgadas con diseño «Panamera Turbo II». En el habitáculo hay unos asientos de cuero bitono con el escudo de Porsche grabado en los reposacabezas delanteros (imagen), un volante de tres radios con diseño deportivo («Sport Design») y unas alfombrillas exclusivas. Además, todos los Panamera Edition tienen de serie un sistema de sonido del fabricante Bose con 14 altavoces, unos faros de xenón adaptativos y una suspensión de dureza variable «PASM».

El Panamera ofrece una conducción gratificante, especialmente para quienes valoren unas cualidades dinámicas en curva infrecuentes en un coche de este tamaño. En cambio, si lo que se busca es viajar lo más aislado del exterior, sus alternativas son preferibles en este sentido. Porsche dice que ha hecho ligeras mejoras en la suspensión para que sea más cómodo; yo no soy capaz de notarlas sin poder conducir una y otra generación en el mismo lugar.

Del Panamera 2013 hemos probado las dos versiones que menos gastan, la Diesel de 300 CV y la híbrida enchufable de 416 CV (prueba del Pananera S E-Hybrid). También son las versiones más opuestas por refinamiento: la híbrida puede circular en modo eléctrico sin ruido ni vibraciones debidas al sistema de impulsión mientras que la Diesel suena a ralentí, quizás no más que otras de gasolina, pero lo hace con menos «encanto». En el apartado Impresiones de conducción hay más detalles de la prueba del Panamera Diesel 300 CV y algunas pinceladas de otras versiones de gasolina.

Las versiones, por motor, disponibles para el Panamera son siete. Además del Diesel de 300 CV y del híbrido enchufable de 416 CV existen cinco más de gasolina con 310, 420 (S), 441 (GTS), 519 (Turbo) y 570 CV (Turbo S). Algunas versiones son de tracción trasera (listado) y otras pueden tener o tienen exclusivamente tracción total (listado). Todos los Panamera tienen cambio automático. El de la versión híbrida y la Diesel es el denominado Tiptronic S con ocho relaciones (de convertidor hidráulico de par). En el resto, es el PDK de siete marchas (de doble embrague).

Aunque la silueta pudiera dar lugar a pensar lo contrario, el Panamera es un coche adecuado para ocupantes de estatura superior a la media, que podrán viajar tanto en las plazas delanteras como en las traseras. De hecho, un pasajero de casi dos metros viajará en cualquiera de las cuatro plazas sin tocar en el techo, algo que no ocurre en el Lexus LS, por ejemplo.

En la lista de precios aparecen unas versiones llamadas «Executive» (4S Executive, Turbo Executive y Turbo S Executive). Son las que tienen una carrocería 15 cm más larga (5,17 m en vez de 5,02) debido a que la distancia entre ejes ha sido aumentada en esa misma cantidad (de 292 a 307 centímetros). Estas variantes —cuya masa es 170 kg superior a sus equivalentes de longitud inferior —ofrecen más espacio para los ocupantes de las plazas posteriores (imagen e imagen), 13 cm más para las piernas según nuestras mediciones. El resto de cotas, incluidas las del maletero, no cambian. Gracias a esos 13 cm adicionales, el Porsche Panamera Executive es, de los turismos que hemos medido, el que mayor distancia ofrece para las piernas en las plazas traseras (1 cm más que un Audi A8 o un BMW Serie 7 con carrocería larga).

Los asientos traseros de las versiones «Executive» son idénticos por forma a los del resto de la gama —dos asientos individuales que recogen muy bien el cuerpo— pero tienen más reglajes —el respaldo se puede inclinar y la banqueta alargar—. De serie, hay calefacción y ventilación en los asientos, un mecanismo que finaliza automáticamente el cierre de las puertas, cortinas eléctricas en las ventanillas traseras y la luneta, y una toma de corriente de 230 V. A las versiones «Exclusive», como al resto, se les pueden montar unas bandejas plegables para colocar un ordenador o papeles (2701 euros) y una nevera de 10,5 litros con dos vasos (2023 euros). A pesar de todo lo anterior, el Panamera no ofrece a los pasajeros de las plazas traseras las mismas atenciones que un Audi A8 o un Mercedes-Benz Clase S, por ejemplo. En la lista de equipamiento de éstos hay, entre otros elementos, asientos que dan masajes o reposapiés para viajar más cómodo.

En octubre de 2014, Porsche puso a la venta una edición limitada a 100 unidades (ya están todas vendidas) denominada «Panamera Exclusive Series», que sólo estaba disponible con el motor de 570 CV del Turbo S y la carrocería «Executive» —costaba 287 020 euros—. Exteriormente se distinguia por una carrocería pintada a mano en dos tonos (Negro Jet y Marrón Chester; imagen) y unas llantas de 20 pulgadas con el diseño llamado «Sport Classic» pintadas en Negro Jet. Los asientos y la parte inferior de las puertas estaban tapizados con cuero de la compañía italiana Poltrona Frau teñido en color Marrón Chester. La parte superior de las puertas estaba recubierta con cuero napa. En la segunda fila de asientos había un sistema multimedia con dos pantallas de 10,1 pulgadas. Para esta versión había en opción un juego de cinco maletas de viaje hechas con el mismo tipo de cuero de los asientos (imagen). 

Como salvo por pequeños detalles no hay diferencias importantes, las impresiones del interior que publicamos en la prueba del Panamera 2009 siguen siendo válidas para el de 2013.

La dotación de serie es mayor en el modelo 2013. Ahora, forman parte de ella los faros de xenón y el mecanismo de cierre y apertura automáticos del portón. Entre las opciones, son nuevos los faros con ledes para todas las funciones (no he podido probarlos), que cuestan unos 3000 euros. También lo es la opción «Porsche Car Connect» (407 euros). Mediante una aplicación instalada en el móvil (gratuita durante seis meses), el propietario puede actuar a distancia sobre elementos como los retrovisores (para plegarlos) o el cierre centralizado, además de disponer de otras funciones como la localización del coche en un mapa o consultar la autonomía restante. En el caso de la versión híbrida, el «Porsche Car Connect» es de serie y la aplicación tiene más funcionalidades relacionadas con la parte eléctrica (por ejemplo, la gestión de la recarga y la conexión de la climatización). Estás funcionalidades específicas son gratuitas durante cinco años.

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