El Porsche Boxster Spyder es el más caro, el más incómodo y el más ruidoso de todos los Boxster (modelo que en enero de 2016 Porsche reemplaza con el 718 Boxster), pero también es el más potente, el más ligero y el más eficaz en curva. Porsche ha conseguido hacer un deportivo excelente a base de utilizar componentes de mucha calidad —motor, cambio, dirección, frenos y suspensión entre otros— y de una integración perfecta entre ellos (impresiones de conducción).
Tiene el mismo motor del Porsche Cayman GT4, que procede del que Porsche utilizaba en el 911 Carrera S 2012. Es de tipo bóxer, atmosférico, con seis cilindros y una cilindrada de 3,8 litros. En el Boxster Spyder da 375 CV a 6700 rpm, mientras que en el Cayman GT4 da 385 CV a 7400 rpm. El cambio de marchas es manual de seis relaciones (no hay posibilidad de uno automático) y la tracción es siempre en las ruedas traseras.
Está a la venta por 92 442 euros, es decir, 9907 euros más costoso que el Porsche Boxster GTS (330 CV) y 6652 euros menos que el Cayman GT4 (ficha comparativa).
El Boxster Spyder no es la versión descapotable del Cayman GT4, ni éste la versión cupé de aquél. Entre ellos hay diferencias significativas en la suspensión, en los neumáticos, en los frenos y en la aerodinámica, además de en el motor, como ya hemos señalado. Así, la suspensión del Boxster Spyder es la misma que lleva el Boxster GTS cuando se equipa con la opción «Chasis deportivo» (rebaja la altura de la carrocería 20 mm con respecto a la del Boxster GTS de serie), mientras que la del Cayman GT4 deriva de la que utiliza el 911 GT3 2013.
Las dimensiones de los neumáticos del Spyder son más pequeñas que las del GT4 y el tamaño de los discos de freno también (ficha técnica comparativa). Por último, el Boxster Spyder no tiene el enorme alerón posterior del Cayman GT4 (imagen). El Cayman GT4 nos ha parecido ligeramente más preciso y eficaz en curva que el Spyder. También frena en menos espacio (al menos en el caso de las unidades que hemos probado, más información en las impresiones de conducción).
Con respecto al Boxster GTS, el Spyder tiene una serie de mejoras mecánicas que le permiten un paso por curva más veloz y una mayor agilidad de reacciones. No obstante, las diferencias dinámicas entre estas dos versiones se pueden reducir, pues el Boxster GTS puede llevar opcionalmente algunas de las mejoras en el chasis que tiene el Spyder. Son, el anteriormente citado «Chasis deportivo» y el diferencial posterior con autoblocante y con distribución activa del par (Porsche Torque Vectoring o PTV, según la terminología de la marca). Por el contrario, hay otras mejoras que son exclusivas del Spyder, como los frenos, provenientes del 911 Carrera S, y la reducción en peso de 30 kg.
La mayor potencia y el menor peso dan como resultado mejores prestaciones. Según los datos oficiales, el Boxster Spyder puede alcanzar una velocidad máxima de 290 km/h y acelerar de 0 a 100 km/h en 4,5 s. Un Boxster GTS con cambio manual llega a 281 km/h y necesita un mínimo de 5,0 segundos para llegar a 100 km/h desde parado. Estos valores en un Cayman GT4 son 295 km/h y 4,4 segundos respectivamente (ficha comparativa de los tres modelos). En nuestras mediciones de aceleración, el Boxster Spyder ha sido más rápido que el Cayman GT4 (tabla comparativa de prestaciones).
La capota del Boxster Spyder es 11 kilogramos más ligera que la de cualquier otro Boxster porque está menos elaborada (tiene menos capas de revestimiento en su cara interna, lo que deja al descubierto gran parte de su estructura metálica y articulaciones) y porque no tiene un mecanismo eléctrico que la mueva.
La operación de plegado y desplegado requiere inevitablemente bajarse del vehículo y hacer una serie de pasos sencillos, pero que toman un tiempo (vídeo demostrativo). El único proceso que está automatizado es el que desengancha y engancha la capota al marco del parabrisas, operación que se puede hacer desde un botón en la consola o desde el mando a distancia. A pesar de su sencillez, esta capota reduce claramente el ruido que entra en el habitáculo procedente del motor cuando se acelera con intensidad, además del que produce el viento a alta velocidad en autopista (pero no tanto como en los otros Boxster). La capota del anterior Porsche Boxster Spyder era más difícil de manejar, no se podía lavar en túneles y Porsche recomendaba no superar 200 km/h con ella sobre la carrocería.
En búsqueda de la ligereza, Porsche también vende el Boxster Spyder sin elementos de equipamiento como el climatizador o la radio, si bien ambos se pueden montar opcionalmente sin recargo. En lo que no se ha escatimado material ha sido en el recubrimiento del salpicadero, en el que predomina el cuero y la Alcantara (más información en las impresiones del interior).
Con el comparador de seguros de coches he calculado el coste de asegurar a todo riesgo y sin franquicia un Boxster Spyder para un hombre casado de 45 años, que vive en Madrid, tiene una plaza de garaje individual y recorre con el 15 000 kilómetros al año. Pues bien, la única compañía que da un precio para estos condicionantes es Mapfre y exige un pago anual de 3847 €. La calidad de esta póliza es buena —7,23 puntos sobre 10 posibles—.