El Porsche 911 S/T es una edición de conmemoración del 60 aniversario del nacimiento del 911. Tiene el motor del 911 GT3 RS (525 CV), un cambio manual con embrague aligerado y otras numerosas medidas para reducir el peso. Su producción está limitada a 1963 unidades y su precio de venta es de 349 225 euros.

El exterior mezcla el estilo del 911 GT3 Touring Package (el frontal y la trasera, por ejemplo), con partes inspiradas en el 911 GT3 RS, como el corte del paso de rueda delantero, el pliegue en la chapa en la zona de las puertas y las manijas. El peso de homologación (conductor de 75 kilogramos incluido) es de 1455 kg. Son 38 kg menos que un 911 GT3 con cambio manual y 70 menos que un 911 GT3 RS.

El capó, el techo, las aletas delanteras y las puertas son de plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP). También son de este material los asientos, la jaula antivuelco del habitáculo, la barra estabilizadora posterior y un panel de refuerzo inferior en el eje trasero. Otras medidas de reducción de peso son el uso de un acristalamiento aligerado, la reducción del espesor de las alfombrillas, la utilización de llantas de magnesio y una batería de iones de litio de tipo LFP de 40 Ah. Los frenos, además, son cerámicos de serie (PCCB, de Porsche Ceramic Composite Brake). Este 911 S/T no tiene el sistema de ruedas traseras directrices del 911 GT3, lo que también supone menos peso.

El motor es el del GT3 RS, por tanto se trata de un bóxer de seis cilindros, atmosférico, con 3996 cm³ de cilindrada. Da una potencia máxima de 525 CV a 8500 rpm y un par máximo de 465 Nm a 6300 rpm. El corte de inyección se produce a 9000 rpm. 

La caja de cambios del 911 S/T es manual de seis velocidades y tiene unos desarrollos un 8 % más cortos que los del 911 GT3 Touring y una palanca 10 milímetros más corta. Cuenta además con un nuevo embrague diseñado en exclusiva para esta versión y un volante de inercia monomasa (como en el Porsche 911 R de 2016). Con estas medidas, Porsche dice haber reducido la masa rotacional en 10,5 kilogramos. Esto debería traducirse en una mayor facilidad del motor para subir y bajar de revoluciones.

Acelera de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos, de 0 a 200 km/h en 11,2 s y alcanza una velocidad máxima de 300 km/h. Estas cifras en un GT3 Touring son 3,9 s, 11,9 s y 320 km/h respectivamente.

Porsche dice que ha concebido esta versión con el objetivo de proporcionar el máximo disfrute de la conducción en carretera abierta. Es decir, no tiene la orientación a circuito y a conseguir vueltas rápidas de los otros 911 de la división GT, como el mencionado GT3 RS. Tiene el mismo esquema de suspensión —doble horquilla superpuesta en el eje delantero y multibrazo en el trasero—, pero el ajuste de muelles y amortiguadores es ligeramente más suave.

En el alerón posterior hay un pequeño apéndice aerodinámico llamado «Gurney flap» (es una pestaña colocada en la arista de salida del alerón, de color negro como se aprecia en esta foto) que ayuda a incrementar la presión en esa zona y ganar un poco de fuerza descendente. También permite que el alerón permanezca en su posición de reposo hasta los 120 km/h, mientras que en el GT3 Touring, al no tener el Gunery flap, se levanta a partir de unos 80 km/h. Las llantas son de 20 pulgadas delante y 21 detrás, con neumáticos en medida 255/35 y 315/50 respectivamente.