El 911 GT3 es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 4,3 s y alcanza 310 km/h. Son unas prestaciones buenas para un cupé de esta potencia, proporcionalmente mejor la velocidad máxima que la aceleración (tabla comparativa).

Lleva el motor bóxer de seis cilindros en versión de 3.600 cm³ que tenían las versiones GT3, Turbo o GT2 del 911 996; no es el motor que lleva el 911 Carrera 997. Sobre la base del anterior GT3, Porsche ha aumentado la potencia máxima desde 381 hasta 415 CV (305 kW); es decir, es el 911 más potente entre los de motor atmosférico. La potencia específica de este motor es 115,4 CV/l; el único motor atmosférico del mercado que da más actualmente es el del Honda S2000 (120,7 CV/l).

Para alcanzar esta potencia, Porsche ha modificado la respuesta del motor y ha aumentado su régimen de giro. Da la potencia máxima a 7.600 rpm (antes 7.400) y es capaz de llegar a 8.400 rpm, 200 rpm más que en el anterior GT3 o en versión RS.

No hay actualmente en el mercado un motor de esta cilindrada que pueda girar tan rápidamente (el del Audi RS4 alcanza 8.250 rpm).

Porsche ha modificado todo el flujo de gas a través del motor. La válvula de mariposa tiene un diámetro mayor (82 mm contra 76), el colector de admisión variable es distinto que el de un 911, hay cambios en la culata y el escape produce una contrapresión menor.

El GT3 tiene tracción trasera y una caja de cambios manual de seis velocidades. En relación a la de un Carrera, esta caja tiene menores recorridos de la palanca y relaciones de cambio más cortas en las cinco últimas marchas. Tiene una señal luminosa en el cuentavueltas que indica el momento idóneo para cambiar, si se busca la máxima aceleración.

Lleva un diferencial autoblocante mecánico y también un sistema de control de tracción electrónico desconectable, semejante al del Carrera GT.

En la versión de serie (no en el GT3 Cup), los soportes de los muelles permiten variar con rapidez la altura de la carrocería y ajustar la carga en cada una de las ruedas, para su uso en circuito. Las barras estabilizadoras también disponen de varios puntos de regulación.

Tiene un sistema de amortiguación variable (PASM) con dos programas: uno deja la suspensión con un ajuste semejante a la del anterior GT3, apropiado para circular por carretera; el otro deja la suspensión más dura y está pensado para circuito. Además, tiene un botón «Sport» en la consola, independiente del mando «Sport» de la suspensión activa, que cambia la respuesta de otros elementos.

Este botón hace que la apertura de la mariposa de admisión sea más rápida y, por lo tanto, la respuesta al pisar el pedal, más contundente. Además, reduce la contrapresión de los tubos de escape para obtener 25 Nm más de par entre 2.000 y 4.000 rpm.

Cuando llevamos la selección «Sport», se aprecia claramente cómo cambia el sonido del escape. Por otro lado, el umbral de actuación del control de tracción se hace todavía más permisivo, para dejarnos jugar en mayor medida con el sobreviraje.

Las llantas que lleva de serie son de 19". Además de por las llantas, el GT3 se distingue por fuera en elementos aerodinámicos como las entradas y salidas de aire, el faldón delantero o el alerón. Tiene unos asientos específicos de esta versión y le faltan algunos elementos de equipamiento que puede llevar el 911 Carrera.