La segunda generación del Peugeot 508 difiere de la anterior (más información del 508 año-modelo 2015) no solo en el número de puertas —cinco en vez de cuatro—, también en que tiene un interior más cuidado y más equipamiento. La gama está compuesta por motores de entre 131 y 224 CV con precios que van de 27 250 a 41 900 € (listado de precios y versiones). También hay una versión con carrocería familiar, de la que hablamos en un artículo distinto (más información del Peugeot 508 SW).

Peugeot ha reducido la longitud —mide 4,75 metros en vez de 4,83— y la altura de la carrocería —cuatro centímetros menos— a la par que la ha ensanchado —tres centímetros—; ficha técnica comparativa. Que sea más bajo y que los pilares que soportan en el techo estén muy tendidos condiciona la sensación de amplitud, la visibilidad y el acceso al habitáculo. En el apartado de impresiones de interior damos más información.

Como ocurre en el resto de modelos de Peugeot, lo más distintivo del habitáculo es el diseño del puesto de conducción. El volante es más pequeño de lo corriente y el cuadro de instrumentos —que es una pantalla— se consulta por encima de él, no a través del interior del aro.

Hay dos motores de gasolina —versiones 1.6 PureTech 180 (181 CV) y 1.6 PureTech 225 (224 CV)— y tres Diesel —1.5 BlueHDi 130 (131 CV), 2.0 BlueHDi 160 (163 CV) y 2.0 BlueHDi 180 (177 CV)—. Todas tienen cambio automático de ocho velocidades; solo la Diesel de 131 CV puede tener también uno manual (de seis). A mediados de 2019, la gama se ampliará con una versión híbrida enchufable de 224 CV que tratamos por separado en este artículo. El sistema estará compuesto por un motor de gasolina de 180 CV y otro eléctrico de 109. Según nos ha contado Peugeot, esta versión no supondrá una merma en la capacidad del maletero.

El precio de partida del 508 es de 27 250 euros para la versión básica (Diesel de 131 caballos con cambio manual). Para su nivel de potencia es un precio intermedio entre sus alternativas. Un Kia Optima Concept 1.6 CRDi de 136 CV cuesta 26 149 €, un Ford Mondeo Berlina Trend 2.0 TDCi 150 CV cuesta 27 967 € y un Mazda6 Sedán Evolution 2.2 SKYACTIV-D 150 CV parte de 28 725 € (ficha técnica comparativa).

Con cualquiera de los motores, el 508 es mucho más asequible que el Audi A5 Sportback, el BMW Serie 4 Gran Coupé y el Volkswagen Arteon (ficha comparativa con motor Diesel y cambio automático).

El 508 es un modelo ágil y estable, con el que se puede realizar una conducción precisa. La calidad de rodadura y el aislamiento acústico nos han parecido corrientes. El motor más potente de la gama —1.6 PureTech 225—, que es el que hemos probado más tiempo, da unas prestaciones buenas y tiene un consumo moderado, pero su funcionamiento no es tan suave y refinado como el de algunas de sus alternativas (aunque sí lo es más que las versiones con motor Diesel). Sobre estos y otros aspectos damos más detalles en el apartado de Impresiones de conducción.

Hay cinco niveles de equipamiento: Active, Business Line, Allure, GT Line y GT. El Active trae como equipamiento de serie una pantalla de 8 pulgadas (más pequeña que la que sale en las fotos de nuestras galerías), arranque por botón, retrovisor interior electrocrómico y el sistema de frenada de emergencia. El Business Line está ideado para flotas (trae navegador y las llantas más pequeñas, de 16 pulgadas). En el nivel Allure, la pantalla ya es la de 10 pulgadas, incluye navegador, entrada sin llave, tapicería mixta de tela y piel y sensores de ayuda al aparcamiento, además de el aviso de vehículos en el ángulo muerto de los retrovisores.

Si se opta por el GT Line, se añade a lo anterior cambios en el aspecto —parrilla distinta y llantas de 18” en vez de 17”—, faros de ledes, unos asientos distintos que son calefactables (con certificación AGR) y lunas oscurecidas. El equipamiento GT solo está disponible con los motores más potentes. Aquí Peugeot ofrece tapicería de cuero, amortiguadores controlados electrónicamente, llantas de 19” y cámara trasera. 

Otros elementos de equipamiento, según la versión, son la función de masaje para los asientos delanteros, el techo panorámico, una superficie de recarga inalámbrica para teléfonos móviles (que está colocado en un lugar de acceso complicado; imagen) o un equipo de sonido de la marca Focal. 

Entre los sistemas de ayuda a la conducción no hay nada novedoso en la industria del automóvil, pero sí en Peugeot: un sistema de visión nocturna (de entre 200 y 250 m de alcance), la visión de 360 grados mediante cámaras (llamada Visiopark 2) y el asistente de aparcamiento semiautomático (actúa sobre dirección, acelerador y freno). El listado de asistentes lo completan el programador activo de velocidad, los sistemas de centrado y mantenimiento en el carril, el frenado de emergencia con detección de peatones y el aviso de vehículos en el ángulo muerto. También tiene función de lectura de señales de tráfico y cambio automático entre luces cortas y largas (los faros y pilotos son de ledes).

El 508 está construido sobre la plataforma EMP2 del Grupo PSA, de la que Peugeot dice que es, de media, 70 kg más ligera que la del 508 anterior. La suspensión es independiente, de tipo McPherson delante y de varios brazos detrás. 

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