Peugeot 306 2.0 HDi (2000) | El interior se ha quedado algo pequeño

24/10/2000 |Víctor M. Fernández

El aumento de tamaño en los coches de esta clase ha dejado «pequeño» al 306. La altura libre hasta el techo es muy justa en las plazas traseras y tres adultos se acomodan más apretados que en modelos como el Ford Focus o el Renault Mégane. Es más recomendable para cuatro pasajeros en total, porque con cinco, los que están situados en los laterales golpean con la cabeza en el montante superior del techo. Dos viajan bien detrás, con reposacabezas regulables incluidos en las versiones más equipadas. No hay reposacabezas central, ni cinturón de seguridad de tres puntos para la plaza del medio.

Sin embargo, el 306 tiene un espacio para las piernas y un volumen de maletero similar al de sus rivales, con una carrocería 15 centímetros más corta, lo que da una idea de su buen aprovechamiento interior. Tiene asientos traseros abatibles por mitades (60/40) y la rueda de repuesto es de buen tamaño, aunque está situada en el exterior.

En la parte delantera nos encontramos con un salpicadero funcional, realizado con materiales plásticos de buen aspecto, pero el ajuste y colocación de algunas piezas es mejorable. Por ejemplo, en la unidad que probamos (Peugeot 306 5p Boulevard 2.0 HDI), no estaba correctamente alineada la banda decorativa del salpicadero con su prolongación en los guarnecidos de las puertas. La guantera es pequeña y poco práctica, no permite ni siquiera guardar la carpeta con la documentación.

En los últimos meses de su etapa comercial, Peugeot ha aumentado el equipamiento de toda la gama 306 2.0 HDI y es más completo que sus rivales en varios aspectos. Todas las versiones tienen faros antiniebla, doble airbag frontal, elevalunas eléctricos delanteros, cierre centralizado con mando a distancia, asiento del conductor regulable en altura, paragolpes pintados en el color de la carrocería y radiocasete. El ABS es también de serie en todas las versiones, excepto en el 306 5p XR HDI. De todos ellos, la versión XS de tres puertas es la que tiene el equipamiento de serie más completo, sumando a lo anteriormente dicho el aire acondicionado, airbag lateral delantero, llantas de aleación, retrovisores eléctricos, radiocasete con mandos junto al volante y limpiaparabrisas automático (un elemento que no tienen competidores más modernos).

El puesto de conducción es cómodo pero mejorable, ya que el volante se queda un poco lejos del conductor y el mullido de los asientos es muy blando, tanto los delanteros como los traseros. El volante y el asiento del conductor se regulan en altura y todos los mandos se encuentran al alcance de la mano, excepto los mandos de la ventilación, que están un poco lejos. Los asientos delanteros mejorarían también con algo más de sujeción lateral.

La visibilidad desde el interior es buena y los faros de doble parábola (las luces largas no anulan las cortas) proyectan una luz potente en conducción nocturna. Los faros antiniebla también actúan como eficaces «cuneteros», aportando un mayor campo de visión al emitir un haz de luz muy amplio.