Esta generación de Peugeot 208 reemplaza al modelo que fue lanzado en 2015 (información). Se puede elegir con un motor Diesel (102 CV), tres de gasolina (75, 102 y 131 CV) y uno eléctrico (versión e-208, de 136 CV; más información).

Está en venta desde 13 200 euros con el motor de gasolina de menor potencia. El Diesel está disponible desde 17 550 euros, que son 2000 más que el 208 con motor de gasolina también de 102 caballos. Hay cinco niveles de equipamiento: Like, Active, Allure, GT y GT Pack (en noviembre de 2020, Peugeot introduce GT Pack y retira GT Line). Los niveles de equipamiento no se pueden combinar con todos los motores: así, por ejemplo, el Like sólo se puede elegir con el motor menos potente y el GT sólo con el motor eléctrico (todos los precios).

Esta nueva generación de 208 transmite la sensación de ser un coche con una suspensión más elaborada que antes y mejor puesta a punto para preservar el confort a bordo. Es más silencioso y, al menos con los motores de 102 y 131 caballos así como con el eléctrico, la respuesta es buena. Por el camino ha perdido la vivacidad de reacciones del modelo anterior, cuya ligereza era un aliciente para quienes buscasen un coche pequeño y divertido (en el sentido de ágil de reacciones) sin necesidad de optar por las versiones más potentes. La versión de gasolina de 131 caballos tiene unas prestaciones acordes a su potencia y un consumo por encima de la media. En las impresiones de conducción ahondamos al respecto tras probarla.

El precio del Peugeot 208 Active PureTech 100 S&S (que es la versión más barata con motor de gasolina de 102 caballos) es de 15 400 euros. Esta cantidad coloca al Peugeot 208 por encima en precio de varias alternativas de potencia cercana, como un Škoda Fabia o un Mazda2, que son claramente menos costosas. Por unos 1000 euros menos hay un SEAT Ibiza de potencia parecida. Un Ford Fiesta es ligeramente más barato y un Renault Clio, ligeramente más costoso. Un Volkswagen Polo o un DS3 son productos mucho más caros. Listado, ordenado por precio de turismos de cinco puertas con carrocería de entre 3,9 y 4,2 metros de longitud y motores de gasolina de entre 90 y 110 caballos de potencia. 

Los tres motores de gasolina tienen 1,2 litros de cilindrada con 75, 100 y 130 CV con los que se ofrecen cuatro versiones: PureTech 75 S&S, PureTech 100 S&S 6V (manual de seis relaciones) o EAT8 (automático de ocho) y PureTech 130 S&S EAT8. El motor Diesel es de 1,5 litros y cuatro cilindros (BlueHDi 100 S&S 6v) similar al que ya tiene, por ejemplo, el Citroën C4 Cactus. Las siglas S&S hacen referencia a la presencia de arranque y parada automáticas del motor. 

Peugeot sigue usando una instrumentación que se ve por encima del aro del volante (imagen). Dice que la ha mejorado por la forma en cómo se muestran los valores porque «los datos se proyectan como un holograma. Estas indicaciones son dinámicas. Se acercan a la vista en función de su importancia o urgencia. De este modo, el tiempo de reacción se reduce alrededor de medio segundo». Nuestra experiencia con este cuadro de instrumentos es que no aporta, aparentemente, ningún beneficio sobre el cuadro de otros Peugeot que no tiene proyecciones holográficas, ni sobre una instrumentación tradicional de agujas. En el centro del salpicadero hay una pantalla que puede ser de 5, 7 o 10 pulgadas, según el nivel de equipamiento elegido.

Las versiones tope de gama (GT Line y GT) tienen faros con ledes para toda las funciones (con luz de marcha diurna específica, a la que Peugeot se refiere como «una firma luminosa de tres garras», imagen), llantas de 17 pulgadas con inserciones decorativas (imagen), tapicería del techo en color negro, pespuntes de los asientos en color y pedales de aluminio. La versión eléctrica tiene una tapicería parcialmente de Alcantara con un tejido especial (que Peugeot llama 3D) y decoraciones específicas para las llantas de 17 pulgadas (imagen).

Según nuestras mediciones de interior, el habitáculo del 208 (2020) es más estrecho a nivel de hombros que el del modelo sustituido y también que el de la mayoría de sus alternativas. En las plazas delanteras el que menos ventaja le saca es el SEAT Ibiza, con tres centímetros más, y el que más, el Volkswagen Polo, con ocho. En las plazas posteriores, la diferencia también es grande, de entre dos y once centímetros de desventaja con los modelos que hemos hecho la comparativa (con el Ford Fiesta y con el Volkswagen polo, respectivamente). El maletero tiene 308 litros de capacidad, un volumen normal en relación con otros competidores. En las Impresiones del interior damos más detalles de la habitabilidad.

Hay varios asistentes a la conducción en función del nivel de equipamiento elegido y del cambio de marchas. Si se elige el cambio automático, puede haber un programador de velocidad activo con una función que permite detener el vehículo y volver a ponerlo a rodar (de forma automática, si la parada ha durado menos de 30 segundos o mediante una pulsación en el acelerador o en un mando ubicado en el volante, si la parada ha durado más tiempo). Esta función puede ir complementada por otra que mantiene al vehículo dentro del carril delimitado por las marcas viales (LPA o Lane Position Assist). También hay un sistema de aparcamiento automático que controla el freno, la dirección y el acelerador.

Además de lo anterior e independientemente del cambio de marchas elegido, hay un sistema de frenado automático de emergencia hasta 140 km/h con detección de peatones y ciclistas incluso durante la noche, un sistema de alerta de cambio involuntario de carril, asistente de cambio involuntario de carril, detección de vehículos en el ángulo muerto (disponible desde 12 km/h), reconocimiento de señales de tráfico (de velocidad, de Stop y de dirección prohibida), conexión y desconexión automáticas de luces de largo alcance.

El Peugeot 208 2020 está creado sobre la plataforma modular CMP, en lugar de la PF1 que tenía el anterior 208 y estrenó el primer Peugeot 207. Peugeot cita algunas ventajas de la nueva plataforma: es más ligera (30 kg), está preparada para albergar sistemas de producción eléctricos, mejora la aerodinámica del vehículo (puesto que hay entradas de aire frontales controladas electrónicamente), mejora el silencio y suavidad de marcha y permite implementar sistemas de asistencia a la conducción más avanzados.

Hemos usado el comparador de seguros de coches para calcular el coste de una póliza a todo riesgo del 208 que hemos probado (GT Line Puretech 130 EAT8). La conductora tiene 40 años, reside en el centro de Madrid, aparca en garaje comunitario, recorre hasta 20 000 kilómetros anuales y no ha declarado siniestros desde que se sacó el carnet. Puede asegurar el coche sin franquicia desde 240 euros al año con Mapfre.