Opel Meriva 1.6 XE (2003) | Buenas prestaciones, dentro de lo que cabe, con un consumo algo alto
Como cabe esperar por su peso y su potencia, el Meriva no es un coche rápido. Ahora bien, como el motor tiene una respuesta buena, no parece insuficiente en todo caso. Habrá conductores que echen de menos una aceleración mayor, pero para unas condiciones de circulación normales, la que tiene permite ir con el tráfico y hacer incorporaciones o adelantamientos normales.
Los desarrollos son teóricamente largos para la velocidad máxima del coche; se supone que alcanza 175 km/h en quinta a menos de 5.600 rpm, cuando el motor da la potencia máxima a 6.000.
Esto se debe a que la velocidad máxima no puede ser grande, dada la potencia y el factor de resistencia aerodinámica del coche (0,75 m²). Aunque relativamente largos, en términos absolutos los desarrollos son más bien cortos; a 140 km/h en quinta, el motor gira a unas 4.450 rpm.
Esto tiene efectos positivos y negativos; creo que, unos con otros, los desarrollos están bien escogidos. El efecto positivo es que el Meriva responde bien al acelerador y que es capaz de mantener marchas largas en condiciones desfavorables, como rampas fuertes o con mucha carga. En recuperación, el Meriva es más rápido que algunos monovolúmenes que lo superan en potencia.
Los aspectos negativos son el ruido y el consumo. El ruido no es fuerte al acelerar, pero por encima de 4.000 rpm es evidente el ruido mecánico de fondo, que proviene del motor y se superpone al de la carrocería.
El consumo en condiciones normales, si se alterna carretera y ciudad, está cerca de 10 l/100 km; es lo que cabe esperar en un monovolumen de gasolina con este tamaño, peso y potencia. Con una conducción más cuidadosa (o menos ciudad), se puede gastar algo menos.
En un recorrido por carretera de sentido único, a una media real de 149 km/h, ha gastado 11,5 l/100 km. Este recorrido tiene algunas rampas fuertes y, en esta ocasión, tráfico poco fluido. No siempre pude ir en quinta y algunas ocasiones tuve que acelerar a fondo para mantener la media. El consumo que he medido al máximo de las posibilidades del coche ha sido 17,7 l/100 km, es difícil conseguir este consumo, pero que sea tan alto indica que a un ritmo normal también debe serlo.
Esta versión no tiene ordenador como equipo de serie y es aburrido calcular el consumo por el método de rellenar, porque meter los últimos ocho o diez litros requiere mucho tiempo y paciencia. El cuentakilómetros tiene poco más de un uno por ciento de error, así que sirve perfectamente para calcular el consumo.