Opel Astra Coupe (2001) | Todos los motores son nuevos en alguna medida.
Aunque en algunos mercados el Astra Coupe se vende ahora con el motor de 1,8 litros de cilindrada que llevan Astra, Zafira o Vectra, en España la versión menos potente será la evolución de este motor, que da 125 CV en lugar de 116. Por lo que afecta al rendimiento, la diferencia principal entre ellos está en la distribución. Este nuevo motor, al igual que todos los del Astra Coupe, puede cumplir la norma Euro 4 de emisiones, que entra en vigor en el año 2005.
En el otro extremo de la gama está el nuevo 2.0 Turbo. Se trata de un motor de la misma familia que el anterior, derivado del 2.0 de 136 CV que se monta ahora en el Astra. El turbocompresor tiene algunas particularidades; la turbina no es una pieza independiente, sino que forma parte del colector de escape. De esta manera la pérdida de energía de los gases es menor cuando llega a la turbina, lo que favorece su rendimiento. Está controlado electrónicamente mediante un sistema que limita la presión máxima a 1,84 bares y, si se acelera a fondo, es capaz de mantenerla constante en una gama muy amplia de régimen. Como sucede normalmente con los turbo, no es un motor capaz de girar muy rápido; da la potencia máxima a 5.400 rpm. Lo interesante es que el par máximo —250 Nm— es constante entre sólo 1.950 rpm y 5.300, casi el régimen de potencia máxima. Esto quiere decir que la potencia del motor aumenta en proporción directa al régimen, lo que da una sensación de empuje fuerte y constante.
El único motor que he tenido ocasión de conducir es el 2,2 de 147 CV. El grupo GM sólo lo ha empleado hasta ahora en Estados Unidos; es también el motor que se montará en Opel Speedster. Es un bloque nuevo de aluminio, que tiene la misma medida de diámetro y carrera de otros 2,2 de Opel (Frontera y Omega). La potencia de este motor no es muy alta con relación a su cilindrada. Esto se debe, en parte, a que el motor funciona proporcionalmente mejor a medio régimen. Como otros motores de cuatro cilindros en línea y cilindrada alta, tiene dos ejes de equilibrado. Su efecto es positivo para reducir vibraciones, pero no evitan un ruido algo alto y no muy agradable, sobre todo en en aceleración. No es el tipo de ruido que se le perdona a un deportivo aunque sea alto.
Es difícil no acordarse (otra vez) del motor 2.0 16v de 150 que llevaban el Calibra y otros modelos de Opel, cuya fuerza y sonido deja en muy mal lugar a este nuevo 2,2. Es este motor de 2,2 l uno de los rasgos que hacen del Astra Coupé un buen coche de diario, cómodo y fácil de usar, más que un deportivo en sentido estricto. Según datos de la marca, el Astra Coupé 2.2 acelera menos que un Toyota Celica 1.8 (140 CV y más ligero) y más que un Peugeot 406 2.0 (135 CV y más pesado).