Respecto al anterior ZR cambian los paragolpes, la rejilla frontal, los faros delanteros (que ahora tienen una cubierta transparente que cubre los dos proyectores) y el portón trasero. La pieza sobre la que van los antinieblas delanteros es negra, mientras que en el Rover 25 va pintada del mismo color de la carrocería.

Las llantas son también nuevas, de 17 pulgadas para el modelo más potente y de 16 para el resto. La longitud se ha reducido ligeramente, pasando de 4.011 a 3.999 mm.

MG ha realizado modificaciones en la alineación de las ruedas traseras (la caída y la convergencia). En el ZR 160 se han mejorado los frenos, aunque no detalla las variaciones realizadas.

Los cambios en el interior son similares a los del Rover 25, por lo que reproduzco lo que comenté de él: El salpicadero es nuevo y está hecho en plástico duro. He montado en dos coches con distinto color interior y el de tono oscuro da sensación de mayor calidad visual que el beige. Las salidas de aire son circulares y están pintadas en un color que simula un cromado.

El volante es ajustable en altura pero no en profundidad; a pesar de ello, he podido conseguir una postura de conducción adecuada. Los apoyacabezas delanteros tienen un recorrido muy amplio y los asientos tienen regulación en altura y del apoyo lumbar. Están tapizados con un tejido agradable y ofrecen una sujeción escasa en zonas con muchas curvas; además se echa en falta un reposapies.

Todos los MG ZR tienen aire acondicionado, ABS con repartidor electrónico de frenada y elevalunas eléctricos delanteros. El ZR 160 tiene además llantas de aleación de 17 pulgadas, faros antiniebla, espejos retrovisores térmicos y eléctricos, elevalunas eléctricos en todas las ventanillas en la versión de cuatro puertas y alarma volumétrica. Ninguno puede tener control de estabilidad, faros de xenón o automatismos que sí llevan otros coches más modernos.

Además, hay varias novedades en el sistema de apertura y cierre del vehículo (pulse aquí para conocerlas).

La gama está formada por cinco versiones. El ZR 105 tiene un motor de 1,4 litros, 103 CV a 6.000 rpm y 123 Nm a 4.500 rpm.

Los ZR 120 y ZR 120 Stepspeed tienen un motor de 1,8 litros, 117 CV a 5.500 rpm y 160 Nm a 6.000 rpm. Se diferencian en el cambio, que es de tipo automático por variador en el Stepspeed; todos los demás modelos tienen cambio manual de cinco velocidades.

Un ZR 120 Stepspeed alcanza 180 km/h y tarda en llegar a 100 km/h desde parado 10,1 s, mientras que un ZR 120, con caja manual, hace 192 km/h y 9,1 s en las mismas mediciones.

El ZR 160 supone el tope de gama. Tiene una versión del 1,8 litros de los ZR 120 con distribución variable, que alcanza 160 CV a 6.900 rpm y 174 Nm a 4.700 rpm. Por último, el ZR 115 TD tiene un motor Diesel que da 113 CV a 4.200 rpm y 260 Nm a 2.000 rpm como valores máximos.