El GLC 43 4MATIC es una versión de la gama Mercedes-AMG que, por potencia, se encuentra justo por debajo de los GLC 63 4MATIC+ y GLC 63 S 4MATIC+ (más información). Recibe las mismas actualizaciones estéticas y de equipamiento estrenadas hace unos meses en la gama GLC convencional y sustituye al modelo homónimo que estuvo en venta hasta abril de 2019 (más información).

El motor es el mismo 3.0 V6 biturbo que tenía el modelo anterior, pero con una serie de modificaciones en los turbocompresores y en la gestión electrónica para que la potencia máxima sea superior. En esta ocasión rinde 390 caballos entre 5500 y 6000 rpm (23 más que antes) y 520 Nm de par entre 2500 y 4500 rpm (exactamente el mismo que antes, y en el mismo rango). 

A pesar de ello, las prestaciones no sufren modificación alguna: tarda 4,9 segundos en acelerar de 0 a 100 km/h y alcanza 250 km/h de velocidad máxima (ficha comparativa). Un BMW X3 M40i, que tiene 36 CV menos, es un poco más rápido acelerando desde parado y alcanza la misma velocidad máxima (que en ambos casos está limitada electronicamente), mientras que un Porsche Macan S, también menos potente, es más lento saliendo desde parado pero tiene una velocidad punta ligeramente más alta (ficha comparativa de los tres modelos).

La caja de cambios es una automática de nueve relaciones a la que Mercedes-AMG denomina AMG SPEEDSHIFT TCT. Es similar a la que Mercedes-Benz utiliza en otras versiones del GLC, pero tiene dos funciones adicionales: simula la maniobra de doble embrague en retenciones y no selecciona una marcha superior al llegar al limitador de revoluciones con el modo manual seleccionado. El sistema de tracción total transmite un 69 % de la fuerza del motor al eje trasero y un 31 % al delantero.

Como en la mayoría de modelos de Mercedes-Benz, el GLC 43 4MATIC tiene un selector de modos de conducción que modifica el funcionamiento del motor, de la caja de cambios, del sistema de tracción total, la suspensión o incluso el sistema de climatización. Hay cuatro programas predefinidos (calzada resbaladiza, Comfort, Sport y Sport+) y uno personalizable (Individual). Adicionalmente, también incluye el sistema AMG DYNAMICS, con el que es posible modificar el funcionamiento de las ayudas electrónicas y con ello, las reacciones del coche. Hay dos programas: Basic y Advanced.

La suspensión de serie tiene muelles neumáticos (es la que Mercedes-Benz denomina AMG Ride Control) y tiene tres ajustes de dureza predefinidos: Comfort, Sport y Sport+. Además, también es capaz de mantener la altura de la carrocería a un nivel constante con independencia de la carga transportada. Las llantas de serie son de 19 pulgadas de diámetro, aunque opcionalmente también se pueden pedir otras de 20 y de 21 pulgadas.

Estéticamente, los cambios más importantes con respecto al modelo al que sustituye se dan en los faros, los pilotos, los paragolpes y la parrilla. En el habitáculo hay un volante distinto, el sistema multimedia MBUX con pantalla de 10,25 pulgadas y una instrumentación compuesta por una pantalla de 12,3 pulgadas con tres modos de visualización: Clásico, Deportivo y Superport.